10 Teen Lovers (Diabolik Lovers)

30. La casa abandonada (parte 7)

-¡Subaru!-excamó Ruki al ver a este a la salida del desván.

-¡Ruki!-exclamó el chico después sorprendido de ser descubierto. Pero rápidamente salió de su escondite intentando disimular-Te estaba buscando para ver si necesitabas ayuda-

-No, tranquilo-respondió forzando una sonrisa-Parece que lo del tesoro ha sido todo un engaño-

Subaru gruñó cruzándose de brazos-Ese Ayato... Por eso el mapa no tenía sentido-

En ese momento se escucharon unos ruidos por detrás.

-¡Hey, chicos!-saludó Laito-Parece que alguien nos tomó el pelo-

-Te recuerdo que yo no fui...-gruñó Ayato por enésima vez.

-¿Entonces quién?-preguntó Shu.

Ayato bajó la mirada frunciendo el ceño.

-¿Ayato?-le llamó Alicia pasando la mano por delante suya para obtener respuesta.

Ayato nos dirigió la mirada-Dicen que fue Ken...-

-¿¡Pero cómo te puedes creer nada de lo que venga de esos pavos!?-exclamó María.

-¡Es que es eso!-exclamé dándola la razón.

-Nada de lo que venga de ellos es bueno, Ayato-le advirtió Ruki mirándole fijamente a los ojos-Nada-

Ayato gruñó de nuevo-Tchs... ¡Ya está! ¡Dejad de culparme por esto cuando fue vuestra culpa el aceptar hacerlo!-

-¿¡Perdona!?-exclamé indignada-¡Fuiste tú quien nos obligaste!-

-¡Es eso!-me apoyó María-¡Casi morimos todos aquí!-

Ayato rió sin humor-Tampoco os paseis...-

-¿¡Pasarnos!?-repitió Alicia enfadada-Tu y yo casi nos pegamos la leche de nuestra vida en el sótano y un trozo del techo se nos vino abajo, Shu y Nerea vieron a alguien encerrarles en la habitación y cerrar el armario, y Laito y María vieron huellas extrañas y escucharon ruidos ¿¡Acaso es eso pasarse!?-

Ayato se cruzó de brazos negándose a responder.

-¿Y vosotros?-interrumpió Shu dirigiéndose a Subaru y Ruki.

Todos les dirigimos la mirada confuso.

-Nada-respondió Ruki seriamente.

Entonces todos pasamos a mirar a Subaru, a quien se le veía ligeramente nervioso, más de lo normal.

-¿Yo? Pues... esto... Escuché un portazo y unos pasos, a parte de eso nada más-

-Lo mismo que nosotros-comentó Laito.

-Sería el portazo de cuando nos encerraron a Nerea y a mí y luego el culpable debió salir corriendo-dedujo Shu.

-Probablemente-opinó María.

-Chicos-interrumpió Alicia-Puede que me esté precipitando, pero estoy segura de que Castiel y los demás ya tenían esto planeado desde el principio-

-Y seguro que quien estuvo en esta casa es uno de ellos-añadió María.

-No es para nada precipitado-dijo Laito-Es que seguro que han sido ellos-

-Esperad-interrumpió Ruki elevando los brazos.

Todos le miramos confusos.

-No sé cómo lo veréis vosotros-continuó-Pero no creo que este sea ni el momento ni el lugar para hablar de esto. Ni si quiera sabemos si el intruso sigue aquí-

-Nunca pensé que diría esto...-dijo Ayato sorprendido-Pero el intelectual tiene razón. Marchémonos de aquí.

Al salir de la casa, de repente, unos extraños ruidos se escucharon cada vez más fuertes.

-¿Un pájaro?-preguntó María

-Algún animal de estos...-dije.

Laito rió para sí mismo-No es un animal-

Entonces, a lo lejos, una figura morada se fue acercando cada vez más y más rápido a la vez que esos ruidos eran cada vez más intensos.

 -¿¡Kanato!?-exclamó Alicia.

-¿Pero qué...?-exclamó Subaru.

Y, efectivamente, era Kanato. Venía corriendo con Teddy entre sus brazos y con su cara entera mojada de lágrimas.

-¡¡¡Chicos!!!-gritó él llorando como un crío.

Laito extendió los brazos sabiendo que se lanzaría a él. Y, efectivamente, así hizo.

-Me perdí... Estaba todo muy oscuro... Tenía hambre... Hacía frío... mucho frío... Os hechaba de menos-decía mientras se secaba las lágrimas en el hombro de su hermano-Pensé que nunca os volvería a ver...-

-Ya está, ya está...-le tranquilizaba Laito dándole suaves palmaditas en la espalda.

-¿Estás bien, cookie?-le preguntó María Nen preocupada.

Azusa y María Nen acababan de salir de la casa, lo cual parecía sospechoso... 

Kanato se asomó por el hombro secándose con la manga sus mejillas mojadas.

-Mhm...-asintió forzando una sonrisa-Gracias por preocuparte... La verdad es que ya estoy mejor-

-Ni si quiera le hechamos en falta-le susurré a Shu al oído.

-Sssshh...-dijo colocándome el dedo índice en mis labios.Me sonrojé en el acto-Que si no lo notará-