23. Consejo

760 32 11
                                    

Era por la mañana. Estaba tirada boca arriba en la cama dándole vueltas una y otra vez a lo que sucedió el día anterior.

Me froté la cara con las manos por enésima vez.

-Esto no puede estar pasando...-me dije.

Empecé a viajar en el tiempo desde que le conocí para intentar verle alguna lógica a lo que acababa de pasar.

Cuando le conocí era más borde y frío imposible, además cuando me dijo aquello a solas en su habitación, también se diría que era un sinvergüenza. Pero después le aconsejé sobre Yuma, y gracias a mí, descubrió que él era su amigo perdido de la infancia. A partir de ahí, comenzó a respetarme más. Como cuando me salvó de Castiel, se preocupaba por mí, o aquella vez en el bosque. Y empezaba poco a poco a desvelarme su otra cara: más amable, gentíl y tímida pero adorable a la vez.

Si lo ves de este modo tiene sentido, pero todavía no me entraba en la cabeza que me besara y me pidiera salir.

Y respondí "sí". Quiere decir eso que... ¿ahora somos novios?

En ese momento mi móvil vibró, símbolo de que acababa de recibir un whatsapp.

Girándome en la cama alcancé mi móvil con la mano esperándome algún mensaje de mis amigas.

Pero no. Era un mensaje de Shu ¡Y en privado!

Mi corazón automáticamente comenzó a acelerarse. Abrí el mensaje.

Ponía: "Hola".

Sonreí para mí misma. Al menos me habló por privado. Así que continué la conversación:

-Hola ¿Qué tal?-

-Bien, ¿y tú?-

-Bien-

-¿Q haces?-

-Nada, ¿y tú?-

-Nada-

Típica conversación, ¿verdad? Me sentí realmente estúpida al no saber de qué hablar, pero de repente volví a recibir otro mensaje:

-¿Cómo debería llamarte?-

-¿A qué te refieres?-

-Ya sabes... Las parejas normalmente se suelen llamar por motes, ¿no?-

Al leer este último mensaje mi corazón dio un salto. O sea que... oficialmente somos pareja..., quiero decir, ¿es mi novio?

No sabía qué responder, pero él habló por mí con otro mensaje.

-Mira, te voy proponiendo nombres y tú me dices qué te parecen, ¿ok?-

-Ok-

-Mmm... ¿Cariño?-

-Así me llaman mis padres-

-Jaja perdón ¿Cielo?-

-Nop-

-¿Nena?-

-No-

-¿Cari?-

-No-

-¿Bebé?-

-¿En serio?-

-Jajaja He visto gente así ¿Qué te parece en inglés?-

-¿Baby?-

-Sí-

-Mmm... Suena bien-

-Está bien. Pues... ¡Buenos días, baby! ;)-

¡Dios mío! ¡Casi me muero en ese momento! Si mi corazón iba más deprisa me iba a dar un infarto.

-¡Buenos días!-

-¿Dormiste bien?-

-Sí, como un angelito ¿Y tú?-

-No pude dormir-

-¿Por?-

-No dejaba de pensar en ti-

Cada vez que me enviaba estas cosas parecía que Cupido me clavaba una flecha más en mi corazón.

-¿Y qué pensabas?-

-En tu rostro sonrojado al robarte tu primer beso-

-¿Qué te hace pensar que fue mi primero?-

-No juegues conmigo. Sé que lo es al quedarte en aquel momento tan rígida como una tabla (además de que lo dijiste en el prueba o verdad)-

-Jajaja Es verdad ¿Y qué me dices de ti?-

-¿De mí? ¿Te refieres a cuántas novias he tenido?-

-Sip-

-Puff... Demasiadas, no sabría decirte-

-No juegues conmigo...-

-Jajaja... Está bien. 5-

-¿5?-

-Sí ¿Qué pasa? ¿Te parece poco?-

-Sí sabiendo que tienes 19 años-

-Pero supongo que mejor eso que ser Laito, ¿no?-

-Touché-

-Jajaja Me voy a duchar. Hablamos luego, baby ;)-

-¡Adiós!-

Dejé caer el móvil sobre la cama liberando toda la respiración contenida sin ninguna razón aparente.

-Necesito consejo-dije.

Así que volví a coger el móvil buscando en contactos a la mejor persona para aconsejarme: Luisa.

10 Teen Lovers (Diabolik Lovers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora