Custodia

952 54 20
                                    

-¡Theresa! -escuché a mi madre gritar desde la planta superior de nuestra casa.

-¿Qué pasa mamá? -dije llegando rápidamente a su lado.

-¿Qué significa esto? -preguntó mostrándome un test de embarazo sin abrir.

-Es para una amiga -mentí.

-¿Y por qué está en nuestro baño? -volvió a preguntar, no convencida con mi respuesta anterior -Sí estás embarazada Tessa...yo -estaba diciendo y la interrumpí.

-¿Qué mamá? ¿Qué vas a hacer si estoy embarazada? ¿Me vas a echar? -pregunté desafiándola y subiendo un poco el tono de mi voz.

-No me contestes así Theresa, no me levantes la voz -respondió enojada.

-No sé si estoy embarazada ¿contenta? -dije caminando en dirección a mi habitación.

-¿Cómo que no sabes Tessa? Esto no es un juego -dijo entrando en mi pieza y quedándose en el umbral de la puerta.

-Tengo un retraso de un par de días, pero quizás es normal, no es la primera vez que me pasa -dije para tranquilizarla y para tranquilizarme también, ya que no podía tener un bebé en este momento, no bajo esas circunstancias.

-¡Cómo pudiste Tessa! Vas a entrar en tu segundo año de Derecho y un bebé arruinaría todos tus planes -me reprochó sentándose en un banco que estaba a un costado de mi puerta.

-¿Mis planes? No serán tus planes mamá -suspiré -Ambas sabemos por qué estudio esa carrera y ya no quiero seguir hablando, no cuando lo único que has hecho es ver el lado negativo de un embarazo que ni siquiera sabemos si es real -dije terminando de cerrar mi mochila para salir de ahí.

-¿Dónde vas Theresa? -preguntó mi mamá mientras yo bajaba las escaleras en dirección a la puerta de entrada.

-Estaré donde Landon lo que resta de las vacaciones, no te preocupes -contesté y salí por la puerta sin mirar atrás.

Desde que mi papá nos abandonó cuando yo tenía 8 años, siempre hemos sido mamá y yo, por eso en parte entendía su forma de cuidarme y de enseñarme, siempre me dijo que tenía que estudiar para ser alguien en la vida, que tenía que estudiar una carrera que pudiese forjar un buen futuro para mí y hacer todo a su tiempo, no como ella, que había tenido que abandonar sus estudios al embarazarse de mí. Carol no quería que cometiera su mismo "error", pero yo no era ella, y aunque estuviese embarazada, no me quedaría como una madre abnegada en la casa.

-Tessa, qué alegría verte, pasa, Landon está en su habitación -dijo su madre al abrirme la puerta de su casa -¿Quieres que te suba un té? -preguntó al mirar mi cara.

-Gracias -respondí y subí rápidamente a la habitación de mi mejor amigo.

-Adelante -dijo Landon cuando golpeé su puerta -¿Qué pasa Tessa? -preguntó al verme llorando en su puerta.

-Creo que estoy embarazada -contesté hipando y sentándome en los pies de su cama, ya que el estaba en su escritorio redactando algo.

-Explícate Tessa, hasta lo que yo sabía tú seguías siendo virgen -me cuestionó. A Landon le contaba todo, pero ese detalle me lo había guardado para mí.

-Te acuerdas la fiesta de Molly, al comienzo de las vacaciones... -comencé y me hizo un gesto con la mano para que continuara -conocí un chico que había llegado por equivocación a la fiesta... era un poco mayor a nosotros. El asunto es que conversamos mucho ese día, porque como tú no fuiste, estaba un poco sola.

-¿Ahora es mi culpa? -preguntó Landon con gracia.

-No tonto, pero desde ese día comenzamos a vernos seguido y a intercambiar mensajes, fue mi amor de verano mientras tú estabas fuera con tus padres -expliqué para que entendiera bajo que circunstancias pasó todo -El asunto es que un día antes de irse a Los Ángeles, que es donde vive, nos emborrachamos y terminamos en la habitación de la cabaña donde se estaba quedando. No lo pensé Landon, no tuve ninguna duda de que sería con él con quién perdería mi virginidad...

-Pero olvidaste el condón Tessa, tú, la más responsable, olvidaste lo más importante en ese momento -musitó mi amigo confundido e interrumpiendo mi narración.

-No lo olvidé Landon, lo usamos, claro que lo usamos, pero al parecer tenía un agujero, porque no me explico de que otra forma pude quedar embarazada, si es que lo estoy -dije sacando la prueba de embarazo de mi mochila -Necesito apoyo moral -agregué moviendo el objeto en mis manos y dirigiéndome a su baño.

-Aquí estaré -gritó Landon desde el otro lado de la puerta, sacándome una sonrisa, es el mejor amigo que puedo tener y no lo cambiaría por nada.

-¿Y? -preguntó una vez que me vio salir del baño con la prueba en mis manos.

-Seré mamá -dije en estado de shock sin poder creer la respuesta que tenía en mis manos.

-Felicidades Tessa, sé que es inesperado y que no estaba en tus planes, pero serás una excelente mamá -dijo Landon abrazándome y provocando que todo lo que estaba conteniendo explotara.

Lloré por horas, lloré porque tendría que hacer esto sola, ya que el padre de mi bebé al parecer había dado de baja su antiguo número telefónico y no tenía forma de contactar con él. No tenía redes sociales o al menos yo no lo había encontrado y quedo solo como un amor de verano, fugaz, pero que dejó una huella imborrable en mí.

Pasaron los años y terminé mi carrera, gracias a la ayuda de mi madre que cuido de mi pequeña hija mientras yo me enfocaba de lleno en mis estudios. Hablamos, peleamos, lloramos, pero no me dejó sola en ningún momento, haciéndose cargo de Ava durante el último año en que no pude realizar mi carrera de forma online y tuve que volver al campus. Fue difícil para mí separarme de mí bebé, pero gracias a todo el esfuerzo, logré graduarme y ahora trabajo en una importante firma de abogados en mi ciudad.

No mentiré diciendo que no continúe con la búsqueda del papá de Ava, porque cada verano daba vueltas por los lugares que recorrimos juntos, con la esperanza de que haya decidido volver, pero no fue así y cada fin de temporada Landon se encargaba de consolarme tras mis esperanzas rotas. Así fue por años, hasta que me convencí a mi misma que solo seríamos las dos, tal como lo fuimos mamá y yo.

Hablando de mamá, aún vivo con ella, porque estoy ahorrando para comprar una casa para Ava y para mí en un futuro y también porque las tres nos hacemos buena compañía. Mi rubia de ojos verdes y pestañas espesas es la consentida de mamá y estoy segura de que le está permitiendo muchas cosas que a mí nunca me dejó hacer a los casi cuatro años de edad, pero eso hacen las abuelas, malcriar.

-Señorita Young -dijo una de las secretarias del despacho, interrumpiendo mis pensamientos.

-Dime Delphine -contesté ordenando mis carpetas sobre el escritorio para poder marcharme a casa.

-El abogado Lincoln dejó este nuevo caso para usted, para que lo revise mañana a primera hora. Al parecer es la pelea por una custodia y él no podrá llevarlo, así que lo ha derivado a usted.

-Gracias Delphine -contesté amablemente recibiendo la carpeta.

Por fin tendría un caso solo para mí, aunque lo que no sabía era que ese caso en particular cambiaría mi vida por completo.

—-
Chan Chan! Hola!!! Traigo una nueva historia corta, esta vez de Hessa ❤️ Díganme que les ha parecido? Tras varios días pensando, hoy recién me iluminé y escribí esto. No sé qué pasará en los siguientes capítulos jajaja pero confío en que se me ocurrirá un buen dramon 🤭

Gracias por leer!!! ❤️❤️❤️

One shot Herophine/ HessaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora