Baka (Katsuki x M! Reader)

Yo solo quiero pastel, a la mierda

Desde esta parte empiezan los especiales.

Especial parte 1

10 años más tarde...

Una iglesia, las damas de honor con los padrinos estaban a un lado del altar. La mayoría de los invitados eran héroes sin sus trajes, policías de calle como de alto rango, y no podía faltar dónde ocurrió todo. Los compañeros, los que formaron la clase 1-A.

Bakugō miraba el suelo, una oleada de recuerdos paso por su mente rápidamente repitiéndose una y otra vez. Todos los momentos que pasó con ese demonio. No pudo evitar sonreir tiernamente al mirar el bolsillo dónde debería estar la rosa. Cualquiera diría que es algo desubicado o que da asco, pero para el no. Incluso el dueño de la punta de la cola le daba asco.

Las puertas se abrieron mostrando a un chico de cabello desordenado, traje negro con toques rojizos. Su mirada se levantó del celular, lo guardo en el bolsillo mirando a su pareja en el altar.

-Esperen, ¿No es el pasivo el que tiene que estar acá?- Bakugō frunció el ceño cuando los demás empezaron a reírse.

El demonio empezó a caminar con las manos en los bolsillos y su cola meneandose delatando que estaba feliz.

El cura comenzó hablar, una de las cosas más aburridas de la boda o que te hacen poner más ansioso y nervioso.

Las parejas normales que van a casarse estarían escuchando antentamente lo que dice el sacerdote mientras pensaban en lo que harían después de la boda o algo por el estilo con su pareja. Pero para nuestra pareja de orgullosos, Bakugō estaba más atento a la partida que tenía Furue con un celular más parecido a un Nokia; que al cura.

Nokia: es un celular re viejo que si lo tirabas de un edificio no se rompía. Más duro que un ladrillo es.

-Ahora los consentimientos- hablo ya queriendo terminar con el casamiento.

-Te amo- dijeron los dos al mismo tiempo estando en las mismas posiciones que antes, Katsuki mirando la partida del morocho y este jugando.

-Tienen que turnarse y- el cura estaba confundido por lo extraño que están actuando

-Déjelo pasar- hablo Kirishima ya que la pareja no pensaba en abrir la boca, se habían salteado el escrutinio y ahora los consentimientos.

-Entonces... Ahora pasamos a la bendición y entrega de anillos.

-¿Anillos?- el morocho levantó la cabeza confundido.

-Los guardaste vos- hablo Katsuki desinteresado.

-Te dije que lo hagas vos- recriminó el demonio mirando a su pareja.

-Yo me estaba bañando idiota- el rubio levanto la mirada con el ceño fruncido.

-¡Y yo estaba en una partida Panh!

-¡Eso no es escusa!- una discusión de última hora se formo por una cosa bastante estúpida. El cura no sabía que pensar de la relación de uno de los mejores héroes y el tipo más inteligente del mundo.

Por otro lado los demás se estaban riendo por dentro.....o por fuera, como Denki y Mineta.

-¡Yo los tengo!- salto cierta rubia de ojos azules, mejor conocida como Mt. Lady.

-¡Maldita montaña! ¿¡ Porque no hablaste antes!?- el marido salió del altar para sacarle los anillos de mala manera.

Ninji dirigió su mirada a la rubia en forma de reproche- No me mires así.