La Pérdida (Clexa)

Una Enamorada Muy Caliente

Casa Clarke, viernes por la noche...

POV Lexa

estoy caliente,
estoy caminando hacia ti,
tú me perteneces, yo te pertenezco,
el fuego de mi corazón está ardiendo solo por ti,
vamos a volar tan alto solo como nosotras sabemos,
tú me amas yo te amo, que sentimiento tan grande...

Los días al lado de Clarke eran inmejorables, insuperables e inolvidables, yo estaba constantemente amándola más y más si eso era posible, siendo ella tan arrebatada, tan real y tan verdadera era difícil no enamorarse a cada segundo. Clarke era mi todo y siempre me hacía notar que yo era su todo.

Volver, que linda palabra volver, inmensa y necesaria, porque volver a sus brazos fue la mejor decisión que había tomado en toda mi vida, me sentía en paz en todos los sentidos y en deuda con ella también, de cierta forma quería brindarme entera, la Lexa a medias no existía, solo era un recuerdo, mi nueva versión sacaba a relucir todo lo bueno que ella me hacía sentir y todo el trabajo que conllevaba haberme re-conectado conmigo en todo este tiempo.

Estar enamorada de Clarke era un aprender día a día y esforzarme por demostrarle que valíamos la pena, que cada segundo era mejor que el anterior. Siempre había tenido en mi mente "ideales/prototipos" de relación perfecta, pero nuestra relación era perfectamente imperfecta. Éramos las dos contra el mundo. Los miedos se hacían presente una que otra vez, los celos se habían esfumado, ella me demostraba que la única mujer que ocupaba su mente empezaba con "Le" y terminaba con "xa", era graciosa y su humor era tan sano y natural, suena repetitivo pero en ella no había una pizca de maldad. Cuando me enojaba por tonterías ella saltaba con un chiste y si no era gracioso su risa inundaba el lugar y automáticamente todo se transformaba y tan solo me miraba con la profundidad que la caracterizaba y tomaba mi mano y me decía que íbamos a caminar juntas hasta nuestro último día y que todo iba a pasar si estábamos en la misma senda tirando para el mismo lado. "¿Qué había hecho en mi vida para merecerla?".

Hablar de almas gemelas era un completo cliché, pero aprendí, gracias a mí terapeuta que uno no solo era alma gemela de su pareja sino que existen de todo tipo, porque las almas gemelas se detectan en la vibración y amplificación de las personas con quienes conectamos en diversas frecuencias y con quienes estamos en la misma sintonía.

Hablar de almas gemelas no necesariamente implicaba hablar de codependencia emocional, sino hablar de un amor impersonal donde ambas partes importan en la misma medida y donde uno funciona sin el otro, un amor desinteresado y verdadero, donde el compromiso, el respeto y la confianza sean la base. Gracias a Clarke había re-conocido los distintos tipos de amor y sobre todo el "amor incondicional" de entregarme sin necesidad de recibir nada a cambio y el "amor propio" donde la aceptación así mismo era fundamental, quererse para dejarse querer. Amor y amar dos palabras de una magnitud estratosférica que servían para sanar y eso era lo que me había dado el empujón para querer superarme de mis demonios, mis miedos y mis fantasmas, era un aprender a vivir, un nuevo amanecer después de la oscuridad.

Si vibramos en amor, podremos percibir la diferencia de las almas, y a la vez seremos percibidos, lo importante es dejar que el corazón hable, no que la mente nos maneje siguiendo condiciones que nos han impuesto desde siempre. Cuando llega esa persona que nos corresponde, nuestro corazón nos lo va a decir y nuestra piel hablara por nosotros. La clave es ser: feliz

A diferencia de mi experiencia pasada con la experiencia y aprendizaje al lado de Clarke, me di cuenta que no hay que conformarse con estar al lado de una persona que no hace resonancia con nosotros sólo por no estar solos, eso es faltarle a esa persona en el amor y faltarnos el respeto a nosotros mismos.

Avanzar, soltar, crecer, superar y vivir eran sensaciones que en todo este tiempo las visualizaba de otra forma, me había esforzado y esmerado lo suficiente para lograr agradarme en todos los aspectos. Estaba en comunión conmigo misma y hoy por primera vez sabía a donde y a quien pertenecía.

Y si hablamos también de otro tipo de amor, no puede faltar la atracción emocional y sexual hacia tu "alguien especial" y era justo como me sentía ahora mismo, estaba desbordada de excitación, desde nuestra reconciliación no hacía más que pensar en ella y las diversas formas de amarla y poder recorrer cada centímetro de su cuerpo. Me gustaba la forma en que me hacía sentir, con ella alrededor era una constante "super-vivencia", tenía el poder de llevarme al séptimo cielo con su sola presencia.

Hoy había decidido ser un poco traviesa y jugar con ella, sabia lo sexual que era, lo había podido comprobar en más de una ocasión y quería saber hasta donde era capaz de llegar con su autocontrol. Su día estaba siendo bastante ajetreado a diferencia del mío, y eran cerca de las 23:30hs, y ni sus luces de volver a casa, "maldito viernes de fumigación", había olvidado cuanto los odiaba también en el pasado.

Cabe destacar que después de los mensajes cachondos, tuve que alivianar un poco mi molestia no era Clarke pero para salir del paso había funcionado mi querido amigo del baño: "mi consolador". Tenía absolutamente toda la sensación que mi dulce chica de los negocios estaba caminando por las paredes y no me equivocaba, me acababa de llegar un mensaje de ella y la sonrisa malévola no se hizo esperar:

Clarke: ya sabes cuándo y dónde, ven a encontrarme cara a cara, te quiero todos los días y justo ahora mismo te quiero de todas las formas, ya sabes cuándo y dónde encontrarme. Amor ya no quiero esperar de verdad, ven y róbame el aliento, quiero que tú me dejes oírte decir mi nombre, como solo tú sabes hacerlo. POR FAVOR SI AUN ESTAS DESPIERTA, te quiero aquí y ahora... te deseo Lexa tanto que me duele hasta mantenerme en pie. Te voy a estar esperando amor... TE AMO!!!

No contaba con que sea tan "explicita", Clarke descontrolada era de mi top 3, la uno, a todas y cada una de sus versiones las amaba. Este mensaje me robo una sonrisa y si pudiera traspasar en este instante la pantalla lo haría, la deseaba tanto, incluso me atrevo a decir que más que ella a mí. Sabía que dejar de hablarle iba a tener como consecuencia esta "propuesta indecente" y no voy a negarlo quería que lo hiciera de cualquier forma. Desde hacía una hora estaba cambiada, lista para correr a sus brazos y era justo lo que estaba por hacer. Me despedí de las niñas, puse la alarma en casa y ni bien llegando al auto le respondí:

Lexa: es una mujer muy directa señorita Griffin, y debo confesarle que estoy muy caliente y justo en este momento estoy caminando hacia ti, necesito comprobar el estado de tus bragas o de última encontrarte sin ellas ;D. Tú me perteneces, yo te pertenezco. El fuego en mi corazón está ardiendo solo por ti cariño. Te prometo que vamos a volar tan alto solo como nosotras sabemos, tú me amas y yo te amo y es el sentimiento más grande que tenemos.

Se lo envié sin más y cuando quise arrancar el auto, llegó su respuesta:

Clarke: es usted una enamorada muy caliente señorita Woods y necesitaría de sus servicios muy urgentemente. Te deseo con cada fibra de mi piel..te estoy esperando ansiosa para que compruebes lo mojada que me tienes ;D.

"Su respuesta me había dejado sin aliento y mi centro ni lento ni perezoso había empezado a latir y lo que más quería era teletransportarme, estaba ardiendo de deseo y todo lo que en consecuencia traía eso"...