La Pérdida (Clexa)

¿Piensas En Nosotras?

Casa de Clarke, dos días después...

POV Clarke

¿piensas en nosotras?,
¿realmente piensas en nosotras?,
porque yo lo hago, todo el tiempo pienso en ti, en nosotras,
te necesito amor, te extraño siempre,
no sé qué es lo que está pasando,
pero sé que nosotras somos más profundas que la multitud...

Realmente estaba desganada, otra vez había llegado lunes, nuevamente prepararme para ir a trabajar se me estaba haciendo tan pesado, mi mente estaba agotada emocionalmente, pensar se me estaba yendo de las manos, y tratar de quedar con Lexa, no era opción, ella tampoco había insistido después de la pseudo conversación del miércoles pasado, no lograba entenderla, no podía ni siquiera ahondar en su cabeza, porque ella no me daba tregua, no me hacía las cosas fáciles, me estaba cansando de esta situación, ser paciente no era una de mis virtudes, pero con ella logre serlo tantas veces que hasta perdí la cuenta, esta vez había levantado un muro entre ambas y no había opción de escarbar, pero tenía que conseguir una respuesta, tan solo algo que me indique que estaba pasando, quería devuelta a mi Lexa y sé que la estaba perdiendo en el camino y me dolía tanto que no me haga participe de sus pensamientos, yo ya no sabía qué hacer.

Sentí dos pares de ojos que me miraban sin siquiera apartar su vista, Nina y Mora se habían convertido en lo único bueno de mi día a día, gracias a ellas no sentía tanto la soledad, nos habíamos apegado tanto que pasar el tiempo junto a ellas era mi parte favorita, y que decir de mis amigas y de mi hermanita que este fin de semana prácticamente hibernaron en casa, no me quejaba, necesitaba distracción y ellas hicieron todo en cuanto pudieron para tenerme arriba, y las llamadas de mis papás que estaban de viaje eran un constante dolor de panza, ellos sacaban su lado gracioso para robarme una que otra sonrisa.

Raven me había comentado de su encuentro fugaz con Anya, con quien había tratado de indagar a que se debía el comportamiento de Lexa, pero ella estaba más sorprendida que yo, no lograba hilar sus pensamientos porque estaba tan fuera de foco, pero le había dicho a Rav que iba a lograr averiguarlo.

Tratamos de armar hipótesis tras hipótesis solo para comprender que podía estar yendo mal con Lexa, pero nada me daba una pauta segura, cuando se encerraba en sí misma, no había nada que la hiciera desistir, pero iba a tratar de dar lo mejor de mí para que ella pueda abrirse conmigo, estaba tan asustada, hasta baraje la posibilidad de ella dejándome, también pensé la posibilidad de pedirle tiempo fuera en la relación para que ella se aclarase, tal vez yo no era suficiente, o en el proceso se había dado cuenta que luchar por lo nuestro no era tan buena idea después de todo, no había un solo pensamiento dirigido a seguir con ella, todos los caminos conducían a estar separadas y eso me aterraba, no se tal vez estaba siendo demasiado paranoica y dramática, tal vez mi mente me jugaba malas pasadas, pero no estaba entendiéndola y mucho menos a mí, con Lexa perdía los estribos y algunas veces me hacía sentir débil, pero ahora era diferente, esta versión de mí no me gustaba nada.

Mientras me levantaba de la cama para dirigirme directo al baño y comenzar con mi ritual pre-trabajo, sentía la puerta principal de casa abrirse, no me había preocupado sabía que se trataba de Lexa, solo que me había quedado sorprendida por la hora, eran las 6am.

Las perritas comenzaron con su danza, ladridos y saltos, era inevitable pensar cuanto la habían extrañado, Lex comenzó a poner esa voz graciosa que solo guardaba para ellas y que a mí me hacía derretir, sabía que no podía estar sin sus "hijas", ya bastante las había aparatado de su lado. No hice ni siquiera el intento de acercarme hasta el comedor y seguí mi camino, "tal vez vino a llevarse a sus mascotas", me decía para mí misma.

Un par de minutos después saliendo del baño, la había visto parada en la puerta con sus brazos hacia atrás, estaba decaída, con ojeras, sabía que lo estaba pasando igual o peor que yo, y quería ayudarla, "¿cómo?, no lo sé pero algo tenía que hacer":

Emm hola Clarke. Salió de sus labios algo titubeante.

Hola, ¿como has estado?. Le dije pasando por su lado, dirigiéndome hacia la cocina para prepararme el desayuno.

¿Quieres un café?. Sentí que me agarro del brazo, tirándome hacia ella, estaba al borde de las lágrimas.

Por favor perdóname, perdóname por esto, por estar distante, yo te prometo que voy a resolverlo, esta semana amor, dame tiempo y te prometo que voy a hablar contigo de todo, solo te pido tiempo, yo te amo de verdad lo hago, lo hago tanto que de pensar en perderte me quiero morir. Ella hablaba sin parar, no lograba entender a que se refería, si antes me había asustado con mis pensamientos, esta vez estaba muerta de miedo con sus palabras.

Lex, por favor habla conmigo, estoy aquí, quiero ayudarte, déjame hacerlo, por ti, por mí, por nosotras, no me apartes. Yo también te amo y solamente quiero que estés bien. La abrace fuerte y ella rompió a llorar, no podía contenerla, me desgarraba verla así.

¿Lexa tú piensas en nosotras?. Aparatándose un poco de mis brazos, me miraba confundida.

Digo si realmente piensas en nosotras, no tenemos título, no se tal vez estas asustada, vamos demasiado deprisa, no estas lista y tienes miedo y no te atreves a decírmelo, no se Lexa, algo tienes que decirme, yo me estoy volviendo loca, con tan solo imaginarme lo que pasa por tu cabeza. ¿Yo lo hago sabes?, pienso en nosotras, en ti y en mí, en un para siempre quizás. Todo el tiempo pienso en nosotras, te extraño y te necesito como no tienes una idea, no sé qué te estará pasando para que actúes así, trato de descifrar tu mirada, pero no puedo hacerlo no me ayudas, no te abres conmigo, Lex soy yo, soy tu Clarke, estoy aquí para ti, sé que somos más profundas que la multitud y tú y yo podemos contra todo y todos, pero tienes que abrirte conmigo, no puedo ayudarte sacándote las palabras con tirabuzón, prometiste decirme todo y no lo estás haciendo, quiero saber si esto no es suficiente para ti, ¿yo no soy lo que esperabas?, si es así entonces es mejor dejarlo por la paz y cada una por su lado. Le dije todo lo que sentía y ella solo abría sus ojos tan grande, estaba asustada, su expresión era de pánico y esperando su respuesta, me aleje lo más que pude y comencé a llorar como lo venía haciendo este último tiempo...

Yo no quiero seguir con esto, vete de mi casa Lexa...le dije sin más entre sollozos...