- Tal vez haya algo bueno de tener 115 años, bueno 116, aun así 100 no haberlos vivido...
- ¿Cómo qué? Yo no le encontraría nada bueno... Sin ofender- dice mi valiente guerrero
- Eres un idiota, Sokka- riendo - El haberte conocido...
- Te quiero, f...
Nos habíamos detenido en un río para que Katara y Aang practicaran, Sokka estaba florando en el agua sobre una hoja con Momo en su panza y yo sentada en la orilla viéndolos. Todos estábamos con poca ropa, cosa que para mí fue un poco complicado. Es más, ellos ya llevan bastante rato así, yo hace cinco minutos que recién me cambié. Estaba con un top rojo y un short amarillo que llevaba debajo de mi ropa de siempre.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aang estaba solo con su pantalón, Katara con un top y una falda short blancos y Sokka con ropa interior blanca y el cabello suelto.
Ahí seguía yo, pensando en meterme o no al agua cuando alguien empieza con sus quejas.
- ¿Terminaran pronto, verdad? Tenemos mucho camino por recorrer si queremos llegar hoy a Omashu.
- ¿Acaso estás listo para partir, chico desnudo?- le dijo Katara
- Puedo estar listo en dos minutos. En serio, cuando quieran.
Estaba viendo a Aang y Katara hacer la forma del pulpo o algo así y como mi calvo se sonrojaba cuando la chica lo ayudaba con su postura, me encantan. En eso estaba cuando veo que Sokka se acerca hacia mí en su hoja.
- Dame tu mano.-
- ¿Para qué?
- Yun, solo dame tu mano.- se la di y me jaló hacia él haciendo que entre al agua.
Me impulsó con fuerza, así que aquí estoy, cara a cara con Sokka y con una mano suya en mi cintura. No dudo que probablemente esté del color de mi top. Nos quedamos viendo un rato, él no quitaba su mano de mi cintura y tampoco me incomodaba. Sus ojos, su cabello, su cara... no puede ser, estoy perdidísima.
- ¿Por qué no entrabas?
- Yo... no lo sé, no tenía muchas ganas, pero estaba pensando en hacerlo.
- ¿Segura? ¿No es por alguna otra cosa?
- No, todo bien.- Me separé con una risa nerviosa haciendo que me suelte, pero aún así estábamos bastante cerca, felizmente los otros estaban tan concentrados que no se dieron cuenta de lo que acaba de pasar.
- En ese caso, que bueno que lo hice yo porque en lo que lo seguías pensando pasaban 3 horas más.- se reía
- ¡Oye!- le lancé agua y así comenzamos una mini guerra de agua mientras reíamos.
- "No te enamores de esa mujer, tu corazón se romperá"- ¿Una canción?Cada vez la escuchaba más cerca, siento como Sokka se cae de su hoja y logro ver a unas personas salir del bosque acercándose a nosotros.
