12. Parcialidad.

10 1 0
                                    


'Parcialidad'

La tarde ya había caído, el sol se ocultaba y las bancas se comenzaban a llenar con las personas que venían a ver el partido.

Entre ellas distinguí a muchos, demasiados padres de familia, cosa que se me hacía rara porque ellos no eran de esos que venían a ver cómo sus hijos con un palo en la mano pasaban una pelota para encestarla en la red del equipo contrarió.

Se supone que los padres deben ser un apoyo para sus hijos, bueno, así no son los padres de aquí. Cómo los de Hall, ellos ni siquiera se molestaron en venir. Mejor para todos, nos aburrirían con su simple presencia.

Creo que ahora tienen en cuenta que cualquier joven está en peligro y prefieren pasar tiempo con ellos. Desde que mi padre dió la información en la reunión la cual no me dejaron estar los padres se volvieron más que sobreprotectores. Parecían unos guardaespaldas detrás de sus hijos.

Faltaba solo una hora para hacer la presentación y el partido comenzará. Las lámparas grandes ya estaban prendidas alumbrando todo el campus.

Visualice a los señores Sidle, ellos me saludaron efusivamente y comenzaron a caminar hacia mi.

Ay no.

-Juliette¿Cómo estás? ¿Cómo está tu padre? -me pregunto la señora Sidle.

-Señora Sidle, estamos muy bien, gracias por preguntar, y ustedes ¿Cómo están? ¿Cómo está Verónica?

-Bien, la niña se encuentra de maravilla y Isaac ya sabes cómo es.

-Si.. yo creo que me voy, falta poco para la presentación.

Con eso termine la conversación y huí de hay antes de que hiciera o dijeran algo de más.

No es que me cayeran mal sino que los Sidle no me dan buena espina a excepción de Verónica la hija adoptiva menor.

Entre a los vestidores de las porristas y las ví tiradas en el piso.

-¡A LA DUCHA! ¡AHORA! -exclamé.

-Me duele todo el cuerpo. -se quejo Am

-No exageres. -dije.

-Es la verdad -la acompaño Marie y todas las del equipo.

Habíamos estado calentando una hora antes de que el campus se llenará, junto con las porristas del equipo contrarió.

-¿Me van hacer alzar la voz, otra vez?

Las ví pararse perezosamente del piso, y luego entrar a las duchas con todo y ropa. Rodé mis ojos. Hice lo mismo pero sin ropa, y luego me puse el uniforme de porrista.

Ya era hora de la presentación.

Las porristas salimos dando vueltas o agitando los pompones mientras que los chicos salían trotando porque no sabían hacer más nada.

Nos organizamos en nuestros puesto y antes de que la música comenzará les heche un vistazo a todos y sonreí, la música comenzó a sonar y nosotros empezamos con la coreo, empezamos bien no ha habido errores y eso me gusta, nos preparamos bien y no tendrían porque cometer algún error.

Terminamos la coreo como ya había dicho yo arriba de Sean con los brazos paralelos, algunas chicas en split y otras en la misma posición que yo pero en el suelo.

La gente se levantó de sus asientos y aplaudieron, hicimos una leve reverencia y nos sentamos en los banquillos atrás de los del equipo de Lacrosse. Ellos se fueron a cambiar en los vestidores ya que la coreografía la hicieron con una ropa a juego de nuestro uniforme.

Juliette Langston © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora