Juliette Langston ©

13. La Casa del Viejo Plop.

'La Casa del Viejo Plop'

Me remuevo sintiéndome incomoda y acalorada y de paso con mi cabeza a mil. Maldita resaca, no vuelvo a beber en mi vida.

Sigo removiendome hasta que mi cuerpo choca contra algo duro pero a la vez suave, llevo mi mano perezosamente a lo que sea que haya a mi lado, es algo blando, subo recorriendolo con mi mano, hasta que llegó a algo más blando y un poco abultado.

Lo que sea que fuera aquello se removió, y gruñó. Abrí mis ojos pero rápido los cerré ya que el sol iba directo a ellos.

Iba a impulsarme con mis manos para levantarme pero algo cayó en mi abdomen.
Gruño mientras me remuevo.

-Quedate quieta.

Esas palabras hicieron que me quedara quieta y no por hacerle caso sino no porque había alguien a mi lado, y era nada más y nada menos que Hall.

¿Que hacía acostado en mi cama? Bueno técnicamente era su cama pero que hacía hay. ¿Había dormido con el? Mierda.

Abrí mis ojos y sin importarme el maldito sol. Lo ví...

Estaba sin camisa, podía ver su espalda marcada, la sábana le tapaba de la cadera para abajo y... Esperen

Revise mi cuerpo, traía una camisa. Su camisa. Cubría apenas mi cuerpo, me senté de golpe, el brazo quedó en mis piernas y el se volvió remover.

Esto no paso. Esto no paso. Esto no paso.

Me bajo lentamente de la cama, su brazo queda colgando. Me mareo un poco y me agarró de la mesa auxiliar. Se vuelve a remover y ruego porque no despierte.

Miro a mi alrededor y... ¡No Me Jodan! Es la habitación de Henry. Dios, ¿Pero que hice? Inrespete su memoria, su casa y mi... Mierda.

¿Lo hicimos en su cuarto? Dios, mátame. Cómo se me ocurre hacer eso.

Trato de recordar cuando todo se salió de control; Alcohol, música, más alcohol, todos bailando, Erick besandose salvajemente con Am ¡JA! Yo lo sabía.

Estaba bailando con Dylan, me invitó a bailar y no le ví nada de malo ya que estábamos en una fiesta, se acabó la canción y fui por otro trago. No estaba tan borracha, bueno si, un poco.

Me inclinó un poco, apoyando mis ante brazos en el mesón. Luego de unos minutos, mi cabeza da vueltas. Siento el calor de alguien atrás, pero no me muevo.

Siento su respiración en mi oreja -¿Bailamos?

Hall.

-¿Otra vez?

-¿Me estás diciendo indirectamente que no?

-Si... digo no. Solo estoy cansada.

-Venga vamos. -me anima.

Me enfoco en la música que suena y es una sensual, demasiado, esta como para follar con todo y ropa.

-Bueno, pero si te la vuelvo a parar no es mi culpa. -le digo jugando.

-Ya lo hiciste una vez, que lo hagas otra vez, bueno, creo que podrás ayudarme con eso.

Me atragantó con la poca bebida que había en mi boca. Quiero preguntarle otra cosa pero me jala hacia la pista improvisada que hicieron.

Bueno pude hacerle dicho algo peor. Además no es mi culpa, es del alcohol.

-¿Sabes algo? -cuestionó en mi oído.