Capítulo 42

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Las cosas con Dim no eran como antes, él estaba muy ocupado con sus cosas y ya no nos veíamos tanto. Estábamos un poco separados, y era evidente que los dos lo notamos. Pero ninguno decía nada. Podía aprovechar este tiempo para hablar... quizá pueda contarle ahora sobre los Acuos.

Subimos a su auto y pusimos música, íbamos cantando, como si la tensión entre nosotros no estuviera, pero de un momento a otro, la música y el auto pararon, sabía lo que estaba por venir.

—Lía... yo... lo siento ¿sí?, sé que estos últimos días estuvimos muy distanciados, pero han pasado cosas de las que ni te imaginas y nunca teníamos la ocasión de hablar, o siquiera hacer algo. No sé qué te pasó, estuviste por días sin comunicarte, y yo también, pero nadie decía nada —hizo una pausa y yo no dije nada—.Sé que te paso algo, y no es solo lo de Noha, entiendo que no quieras contármelo todo porque sé que últimamente para ninguno de nosotros es lo mismo que antes, y ambos sabemos el principal motivo —me miró fijo, ni siquiera hizo falta que dijera su nombre, se refería a la ida de Paipper—. Pero sabes que puedes confiar en mí para lo que quieras, aunque no parezca, aún somos mejores amigos Lí, y nada, nunca, jamás, va a cambiar eso, ni siquiera ese tal Isaac roba amigas —bromeo con el final.

Tenía razón en todo, pero, no sabía cómo contarle, o por dónde empezar, todo lo que me pasó era una absoluta locura. Cuando le conté a Emma me sentía más segura, porque en el fondo sabía que ella me iba a creer, es una bruja, pero Dimitri...

—Oye, Dimitri... yo... —odio estas situaciones, pero él es mi mejor amigo, por más que las cosas ya no sean tanto como antes, los amigos se cuentan todo, por más loco que sea. Quiero contarle la verdad sobre mi nueva vida sobrenatural, y todo lo que me ha pasado. Lo conozco tanto como para saber que no pensara que estoy loca, sé que le costará creerlo o asimilarlo, pero es mi amigo y me va creer, porque eso hacemos, siempre apoyarnos y estar ahí, por más loca que sea la situación. Así que se lo voy a decir— no soy... humana, y creo que una raza entera me quiere matar... —a juzgar por cómo lo dije, sonó más como una descarga. Un alivio se sintió en mi interior, aun sin saber cómo iba a reaccionar, pero es a la segunda persona a la que se lo cuento, al primer humano de hecho, y agradezco que sea él.

Dimitri se empezó a reír.

—¿Qué cosas dices? —Al ver que estaba seria dejó de reír y adapto mi expresión.

—Diablos... —suspire—. Bien, no empecé de la mejor manera. Va de nuevo —asintió atento, yo suspiré una vez más—. Resulta que... —y tal como hice con Emma, empecé a contarle todo lo sobrenatural, desde el primer momento, poco a poco, repitiendo palabras. Me resultaba raro que Dimitri en algunas ocasiones no pareciera tan sorprendido, pero seguramente era porque ni siquiera entendía, entonces volvía a explicar. De repente me miraba tan sorprendido que pensé que lo mataría con tantas confesiones, con tantas locuras, tantas palabras. También tuve que explicarle brevemente que eran los acuos, ya que tanto él, como yo hace unos días, no sabía de la existencia de los mismos.

Sé que le dolía algo, quizá el hecho de mi mala suerte en la vida, o el hecho de que no estuvo para apoyarme en esos momentos. Evite decirle lo de Paipper, él era una de las personas que me rogó que no me lastimara con ese tema.

Observe su rostro de principio a fin de la confesión, primero tenía una mezcla de total confusión. Juraría que hasta palideció un poco, pero su tez es muy pálida en sí. Se mantuvo silencio, solo asintiendo, y luego, cuando finalice, me sorprendió ver como sonreía de lado.

—Lía... ¿tu...? —Entrecerró sus ojos grises, que ahora tenían algo de violeta. Eso pasaba solo a veces, cuando está nervioso o enojado, hasta cuando estaba muy emocionado, de hecho, cambiaba por su estado de ánimo— ¿tú te drogas? —pregunto, se negaba a creerme. Y ahí está, doctor mente pequeña... que no entiende nada. Y no lo juzgo, porque cuando Noha me dijo todo esto, sospeche lo mismo.

Mientras el crimen sucedeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora