"Los McKagan Stradlin"

IXX. Confusiones.

Capítulo 19.

Confusiones.

Tanto Izzy como Duff miraban desde la camioneta al pelirrojo con quién se suponía que era su madre biológica. Se espantaron cuando Axl permitió que le besara la mejilla y luego después regreso a donde sus padres. Con algo en manos y la cara más sería del mundo.

—¿Qué pasa Axl? —pregunta intrigado Duff.

—Nada —respondió y miro a sus padres dedicando una sonrisa desconocida para ambos. El camino a casa fue muy tranquilo pues Axl estaba muy callado y ambos padres se preocupaban por ello. Algunas veces lograron mirar como Axl visualizaba una fotografía. Cuando el camino a casa finalizo los tres bajaron y allí estaba Slash sentado en las escaleras esperando por su duende irlandés.

—¡Axl hermani...! —el pelirrojo lo hizo a un lado y siguió subiendo las escaleras.

Los presentes quedaron asombrados por la actitud del pelirrojo.

—Se los dije le iban a lavar el cerebro, la puta sangre llama.

Izzy lo miro mal por su vocabulario pero no lo regaño sino que subió las escaleras para ir a ver a su otro hijo, antes pasando por la habitación de Steven asegurándose que este estuviera bien. Al llegar a puerta de Axl toco.

—Hijo —lo llamó—. ¿Te encuentras bien? —Axl no respondió y después de unos minutos se le sumo Duff—. No me habla.

—Axl.

Volvieron a intentar y el pelirrojo les abrió la puerta con otra ropa puesta. Cuando pasaron miraron a su hijo un poco despreocupado.

—¿Cómo te sientes? —Axl se sentó en su cama y les palmeó un lugar a ambos padres.

—Estoy bien no se preocupen. Sólo supe cosas que no me agradaron —paso su brazo por detrás de sus padres y les mostro la fotografía que le había entregado la señora Rose.

—Esto me está superando —se dejó caer en la cama mientras sus padres aun miraban la fotografía.

Y de repente sintió un peso sobre su cabeza. Slash lo estaba aplastando.

—No tengo ganas de jugar trapeador —Slash salió de encima de Axl y se acercó a ver la foto.

—Yo digo que te lavaron el cerebro —le dijo y A xl lo miro mal.

—Jodete Slash no sabes lo desgastante que es esto. No, no me lavaron el cerebro sólo me contaron mi historia y la de ellos y me di cuenta que fui un error el embarazo de mi supuesta madre le arruino su vida y ahora me siento culpable porque resulta que no pueden tener hijos. Y soy su única descendencia así que yo decidiré si los quiero ver o no. Y no es que me quiera alejar de ustedes —los abrazo, a sus padres—. Tal vez los llegue a visitar una o dos veces es muy difícil decidirlo.

Todos suspiraron al mismo tiempo lo que provoco una risa por parte de todos.

—Si así lo quieres servirá para dejar la fiesta en paz con tus biológicos —Axl asintió y miro a su familia.

—Me dejarían solo, por favor aún hay cosas que tengo que pensar —dice y toma la fotografía que tenía Slash en sus manos.

Sus padres no protestaron y salieron de la habitación. Slash se tomó el privilegio de quedarse en la cama de Axl.

—¡Que te vayas he dicho! —exclamó dejando a Slash confundido.

—No me grites pequeño tonto —se acercó y lo abrazo—. Sólo estas muy confundido, digo, de la noche a la mañana te aparecen dos familias.

—Sí es complicado pero sabes, me gusta algo en parte porque está reuniendo a nuestros padres y eso, espero que los haga retractarse de su demanda de divorcio —se apartó y le sonrió.

—Tienes razón, pero estas seguro que no intentaran hacer nada contigo, porque... Las personas de hoy en día no son confiables —Axl dudo un poco y es que Los Rose le agradaban pero no metería sus manos al fuego por unas personas que no conocía bien.

—Esperemos que no.

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Habían pasado ya tres días desde aquella visita a la casa de la familia biológica de Axl y algunas cosas ya habían vuelto a la normalidad salvo por el pequeño detalle que Axl había querido mantener contacto con la familia de sangre. Claro sin interferir con su familia de corazón. Pero esa mañana en especial había pasado algo una llamada que cambiaría la estabilidad de esa casa.

—¿Estás seguro Roger? —preguntaba desconcertado.

—Sí —dice del otro lado de la línea suspirando—. Demandaron Izzy y no sé porque su demanda está procediendo tan rápido, tal vez...Ahg no sé amigo, pero yo lo siento he intentare hacer todo lo que este mis manos para que no les quiten a Axl. Tendré que ir más tarde con ustedes.

Izzy colgó y llamó a Duff.

—¿Sí Izzy, qué necesitas? —preguntó.

—Nos quieren quitar a Axl —dijo y un silencio se manifestó en la línea.

—Malditos —susurro—. Los dejamos acercarse a él y así lo pagan. No Izzy, no van a ganar. Roger y los demás nos ayudaran y te juro que no vamos a perder a nuestro hijo. ¿Izzy?

—Puedes venir —hablo con voz cortada.

—Voy para allá —dijo el rubio y cortó la llamada.

Izzy estaba sentado en la sala de estar cuando Axl llego con su teléfono en mano y discutiendo de una manera demasiado alterada.

—¡No, no los entiendo déjenme en paz a mí y a mi familia! —Izzy se alertó y se acercó a él tomándole el hombro Axl se apartó sin decir nada y siguió discutiendo—. No quiero ir con ustedes, ¿por qué? ¡Porque ustedes no son mis padres! —cortó la llamada y al ver a Izzy corrió a abrazarlo—. No quiero que me aparten de ustedes.

Justo el instante Duff entro por la puerta principal de la casa.

—Ya sabe, se lo dijeron —el rubio por igual parte abrazo a ambos.

—Voy a darme un baño para tranquilizarme —se separó el pelirrojo y subió las escaleras.

—Nos lo van a quitar Duff —desato los nervios de Izzy, aquello era demasiado.

—No lo harán la ley debe de estar de nuestro lado, debe de ser así.

—Yo fui todo lo que necesito, fui un padre y una madre para él. Cuando lloraba por las noches era yo quien me aferraba a él y lo tranquilizaba. Yo lo ayude a caminar correctamente a comer, leer, escribir. Él es una pequeña extensión de mí, mi niño, no puedo dejar que me lo quiten te das cuenta de que si me lo quitan uno de mis mundos se derrumbaría.

—No.

—¿Por qué?

—Porque no nos lo van a quitar —el rubio lo miro hacia atrás—. Ya llegó Roger —le susurro

El rubio llego con un papel el cual certificaba la demanda.

—Lo mejor es tranquilizarnos y comenzar a traer todo lo que necesitamos.

—Sí —dijo.

—También quería comentarles —llamo la atención del aun matrimonio—. Deben de dejar la demanda de divorcio a un lado eso podría beneficiarlos a ellos y no queremos eso. Los trabajadores sociales entraran en práctica así que esto ya no es por intentar salvar su matrimonio sino por intentar tener a su hijo con ustedes. Anule el divorcio en cuanto me llego lo de Axl así que prácticamente están casados y felices. El juez no se tentara él vera quien es la mejor familia para su hijo, harán preguntas por todos lados y lo más seguro es que manden a vivir Axl con la familia más estable. Inténtenlo por él, porque si no y aunque me duela decirles... Se quedaran sin un hijo.  

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Patiense.