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Trato de ordenar la mesa como puedo, se supone que desde hace dos días desde que plantamos a los padres de Lauren en su casa, han estado aún más insistentes en poder tener la cena y hacer las presentaciones correspondientes antes de que sus hermanos vengan dentro de algunas semanas y debamos repetir la cena ahora con ellos.

Por mi parte ya Lauren conocía a mi familia, así que aquello era un peso menos que podía sentir. Aún recuerdo como mi madre la intimido ¿Cómo la cuarentona se dejó intimidar de mi madre? No lo sé, pero creo que eso es parte del encanto que tiene mi hermosa mujer de ojos verdes.

-¡Lauren!- Grito, sé que no ha hecho nada pero me gusta ver cómo es que pone esos ojos de cachorro preocupado ¡Jah!

-¡Amor!- salta asustada desde el sofá en el que está sentada viendo la televisión.

-¡Son tus padres, no los míos!- mis manos van a mi cadera en forma de reto.

La veo queriendo contestarme cuando el sonido del timbre nos saca de nuestra discusión fingida empezada por mí, ella se gira y su hermoso pantalón negro que le hace un hermoso trasero queda a mi vista mientras va hacia la puerta y la abre.

-Mamá, Papá- dice tan formal que me hace querer darle un zape en la cabeza. A veces se le olvida que no es un cliente, que es su familia.

-Lauren- veo a la madre dejar dos besos en las mejillas y luego abrazarla unos segundos.

-Hija- dice el padre y esta la abraza y la suelta cuando escucha el sonido de la televisión y los dibujos animados.

¡Par de viejos! ¡Jah! que buen chiste ha lanzado mi mente, punto de gracia para Camila. Mi cuerpo se mueve un poco en victoria hasta que al abrir los ojos tengo a la madre de Lauren frente a mi mirándome fijamente con una sonrisa en su rostro.

-Camila- la mujer no deja de sonreír y yo siento como mi sangre se está agolpándose en mi rostro y eso causa que ella alce su ceja muy parecido a como lo hace Lauren.

-Señora Jáuregui- sonrió mientras mis nervios están saliendo a flote y estoy segura que ella lo puede ver por cómo me está mirando y considero que ella sabe por qué aún estoy así.

Mi rostro esta fijo en lo que hace el padre de Lauren y obviamente ella, la madre de la ojiverde se gira nos quedamos con una cara de poker mirando cómo están pendiente de como Batman tiene que salvar de nuevo a Max de uno de los villanos que aparecen en la caricatura.

-Son como niños- murmura ella sin apartar la mirada por unos minutos.

-Indudablemente- niego cuando ella ha girado y mi rostro esta ordenando la mesa.

-Ven te ayudo- le escucho decir y aquello sí que me ha caído como un vaso de agua fría, si un vaso, porque no me tiendo pirar un balde solo por ella.

-Se supone que Lauren debería ayudarme, ha pasado toda la mañana mirando esa serie- vuelvo a negar mientras voy de camino a la cocina a buscar los cubiertos que faltan, la madre de Lauren me sigue y creo que es un milagro porque me tengo que tomar del borde.

Esto ya no me está gustando, soporto los vómitos pero me han dicho que los mareos debían detenerse.

-Camila ¿Estas bien?- me pregunta la madre de Lauren cuando pasa la mano por mi espalda. Asiento aun mirando hacia el suelo con mis brazos estirados y apoyados en el filo.

-Si- digo tan bajo que es poco creíble, la madre de Lauren trae una de las bancas que están en la isla y me hace sentarme mientras recuesto mi espalda en la pared, cierro mis ojos un momento sintiendo un poco de sudor frio corriendo por mi espalda.

Ella está sacando un poco azúcar y la está colocando en un vasito de agua –Toma- me acerca y doy un leve sorbo. Su mano hace círculos en la mía -¡MICHELLE!- el grito de la mujer es tan fuerte que debería de asustarme pero hace todo menos eso.

-¿Qué pasa?- suelta pero cuando sus ojos me encuentran con mis ojos medio cerrados recostada en la pared, es como si un interruptor en ella se activara –Mi teléfono está en la mesa- apunta hacia el lugar mientras viene rapido hacia mí y su madre va a buscarlo.

-Lau- murmuro pero siento mis parpados pesados, muy pasados. Ella da toquecitos en mis mejillas.

-No cierres los ojos, mírame a mí- está diciendo –Marca a la doctora Sánchez- la escucho pero mis ojos se están cerrando poco a poco hasta el punto en que sinceramente me está costando abrirlos.- Huele- la escucho decir y trato de inhalar y es cuando siento el olor alcohol antiséptico llenando mi sistema respiratorio.

Siento como un pañito frio en puesto en mi frente y luego como estoy siendo alzada, mi brazo no tiene mucha fuerza para poder abrazar a Lauren así que dejo que caiga mientras mi cabeza da en su pecho.

-Calma cielo, ya viene la doctora- escucho su murmuro mientras está sentada a mi lado.

-Lauren- la voz de la madre de mi prometida se hace un poco lejana mientras dejo caer mi cabeza hacia un costado terminando por quedarme dormida o desmayada, pero lo único que logro ver es todo de color negro.




*Disculpen los errores y espero les guste*

*Los O.S ya están siendo publicados en Dreame o Sueñovela*

*Gatita y La Turista, están siendo publicadas en Sweek*

*Recuerden que cuando pasen por Sueñovela o Dreame, marcar los corazoncitos de todas las historias, se los agradecería*

Señora 2da ParteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora