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Cierro mis ojos con fuerza y paso mis manos por mi rostro tratando de apartar todos los pensamientos que me quieren carcomer. Dejo salir un poco del aire de mis pulmones y vuelvo a ver todo de nuevo un poco nublado.
Aprieto mi mandíbula con fuerza y trato de tomar bocanadas de aire, todo se vuelve un poco intenso, es como si estuviera viendo doble.
-Señora Jáuregui- trato de girar el rostro pero siento que va mucho más lento de lo que pienso, incluso cuando he girado con rapidez. Sabía que fue mala idea, tengo que seguir mi instinto más seguido.
-Dígame- articulo, pero de una u otra forma estoy sintiendo que no estoy hablando tan rápido o tan normal como suelo hacerlo.
-Una señorita la está buscando- alzo un poco más lento mi rostro y veo delante de mí a la única persona que no quiero tener frente a mí.
Las luces de colores en el ambiente oscuro me hace sentir aun peor, es como si estuviera drogada, mi cuerpo se siente pesado y algo lento.
-No- niego y bajo mi rostro, veo mi vaso encima de la mesita en donde estaban las otras, no lo vuelvo a tomar porque siento que algo había allí, y no pude percatarme de peor forma que algo tenía mi bebida.
-Vamos Lauren- la voz era profunda y seguí negando, pero cuando me tomo de la muñeca sentía a mi cuerpo ligero, me levante sin siquiera quererlo, pero cuando intenta apartar su mano era como si me moviera muy lento y no tocaba el lugar que necesita tocarlo.
Metí mi mano dentro del bolsillo de mi pantalón de vestir y tantee mi teléfono, mis pasos eran descoordinados y estaba trastabillándome, tantee los botones del volumen y apreté dos veces hacia la parte de abajo, y el tercero lo mantenía presionado.
Trate de tirar de mi cuerpo hacia atrás pero la mujer seguía tirando hacia adelante, sentí como choque con alguien pero la persona me ignoro.
Alguien debía llegar, tengo la esperanza de que alguien cerca pueda atender mi llamado.
Veo esos profundos ojos azules cuando me tira dentro de un pequeño cuarto oscuro, mi espalda golpea contra una pared. Trato de alzar mis manos con fuerza, mis ojos se cierran queriendo caer de nueva cuenta en el suelo.
Trato de mantenerme despierta, aunque incluso no pueda hacerlo, me es tan fuerte incluso mantener mi cabeza recta. Siento como me toman de las solapas de la chaqueta y me lanzan a un lugar suave. Mis manos pasan y tocan las sabanas hasta que siento un peso sobre mis piernas.
-No tenías que lograr que la pequeña niña que aun puedes criar, tuviera tus hijos- siento un beso húmedo en mi cuello y me remueve como puedo –Siempre estuve tan entregada a ti y lo único que hiciste y dejarme- me agito moviendo la cabeza.
»Yo pude darte cada uno de ellos, nunca quise dejarte- murmura lentamente –Pensé que volveríamos pero ella se metió en mi camino-
Sus manos toman mi camisa y tiran de ella, mis ojos se cierran y antes de poder hacer algo es cuando caigo en un mundo complemente oscuro.
-Lauren- la voz es suave, siento como agitan un poco mis hombros y como golpean en suave toques mi rostro.
Abro mis ojos y escucho un suspiro, no puedo enfocar mucho pero aun siento como mis ojos se están cerrando.
-Es bueno tenerla de vuelta, señora Jáuregui- parpadeo varias veces y el hombre con bata blanca deja salir un suspiro. Miro alrededor y veo varias personas que no pensé ver en estos días.
Halsey, Taylor y Selena tiene sus brazos cruzados mirándome, Camila este a mi lado tomando mi mano. Su rostro preocupado.
-¿Qué ha pasado?- trato de incorporarme cómo puedo pero Camila hace que vuelva acostarme –Cariño- paso mi mano por su mejilla.
-Usted recibió una dosis alta de una droga- miro al techo y dejo salir un suspiro –Para dejarla paralizada- escucho como Camila sorbe su nariz y tiene su frente apoyada en el dorso de mi mano.
-¿Los niños?- le pregunto a Camila pero ella sonríe negando.
-Fue Nicole ¿Lo sabes?- asiento como puedo.
-Le dije a Camz que iría a una reunión rápida con unos hombres que querían invertir, acepte pero luego sentí mi cuerpo extraño- mire al doctor.
-Los señores han dicho que no saben nada, sino que te fuiste con la mujer- el doctor acota y las mujeres delante de mi asienten.
-Dijeron que sabían tu nombre y dijo que era tu amiga- comento Selena llegando cerca de mí –No pudimos detenerla, Taylor fue la que llego primero pero cuando escucho que estaba forcejeando la puerta espero a que entrara para escapar-
-Disculpen- dice el doctor revisando un beeper y sale de la habitación.
-Te encontramos inconsciente y con parte de la ropa fuera de tu cuerpo- miro a Camila.
-Lo siento- es lo único que puedo decirle.
-La matare- dice ella alzando su rostro hacia mí.
Todas nos quedamos mirándola, pero ella se sienta erguida y besa el dorso de mi mano, y el color chocolate de sus orbes se vuelven casi negros.
-Los niños están afuera ¿Quieres verlos?- sus ojitos su suavizan y asiento. –Te amo, mi cielo- besa mis labios y sale en busca de mis hijos.
-¿Ella?- Halsey apunta hacia la puerta y no sé qué hacer con sus palabras.
