Después mi reunión con Siara, le di mi número de teléfono y nos separamos. Una vez en casa, me quito el vestido y me pongo la ropa del gimnasio. Estoy muy saturada ahora mismo y el único que me quita este tipo de estrés, es Trevor en el gimnasio. Llamo al gimnasio y pregunto si hoy esta libre, me confirman que si y voy. Normalmente solo voy Lunes y Miércoles, pero hoy lo necesito. Necesito sudar mis preocupaciones.
- Venga Dria, una mas, solo una mas – Me exige Trevor.
- No puedo mas.
- Si puedes. Venga una flexión mas. Muy bien Dria, hoy has hecho un buen trabajo- Me felicita una vez caigo rendida al suelo tras la ultima flexión.- ¿Necesitas ayuda?.
- No, yo me levanto. - Digo mientras me pongo en pie.- Hoy te has pasado un poco ¿No crees?.
- No. Tu viniste pidiendo ayuda y yo te la di. Además eres mas fuerte de lo que crees. Ninguna de mis alumnas ha hecho treinta flexiones hasta la fecha y tengo algunas con cuatro meses de antigüedad.
- No se por que, pero eso no me reconforta.
- Bueno. Estas tonificando muy rápido y no me cuestionas, eso es bueno. Acabarás antes de lo que piensas con tu reto "operación biquini".
- Eso espero. Gracias por ayudarme.
- Eh, no las des. Estas pagándome la comida y el alquiler. - Se ríe y yo no puedo evitar hacer lo mismo.
- Hoy se supone que tengo cena con mi novio – Suspiro – Pero no me apetece nada, ¿Te vienes a tomar algo?.
- El alcohol engorda Dria. Pero una vez al año no hace daño.
- Perfecto, se lo diré a mis amigos. Te veo en el "Templo" a las nueve.
- Vale si, conozco esa discoteca. Te veo esta noche entonces- Se despide mientras me voy a las duchas.
Cuando estoy en el coche camino a mi casa, llamo a Leo para invitarle. Espero que ya se le haya pasado el enfado. Como me suponía se le ha pasado y esta emocionado de que por fin salga de fiesta pasando de Axel. No se si eso me reconforta o no, pero me alegro de que no este enfadado. Como ya me he duchado en el gimnasio, me dedico a pensar que me pondré esta noche. Revisando el contenido de mi armario, decido usar un vestido rojo ajustado, con una raja en el lateral, a la altura del muslo. Lo dejo sobre la cama estirado y coloco mis tacones rojos en el suelo, junto a la cama. Aun quedan tres horas y media, así que llamo a Leo para que venga ha maquillarme esta noche antes de salir, el acepta gustoso. Mientras tanto me sirvo un par de copas de vino y pongo una lista de reproducción en mi equipo de música, la primera es "Earned it" de The Weekend. Con la copa de vino aun en mi mano, bailo por el salón. Me deslizo sobre la tarima dando pasos lentos y elegantes. Con un rápido y sexy movimiento, me agacho hasta tocarme las rodillas, para luego subir lentamente. Doy otro sorbo a mi copa y la dejo en la mesa. Me contoneo hasta la esquina entre el salón y la cocina, y me deslizo de espalda a ella, hasta el suelo, para luego levantarme con el culo en pompa. Después de unos cuantos pasos similares y unas cuantas canciones mas, Leo llega y trae un maletín de maquillaje con el.
- Madre mía Leo, vienes preparado – Bromeo cuando veo el contenido del maletín.
- Siempre. Además, no siempre me das el gusto de maquillarte.
- Bueno, en ese caso hoy es tu día.
Me siento frente al tocador y Leo empieza ha hacer magia con las brochas. No se muy bien que me esta echando, pero por la cantidad de cosas que esta usando, me imagino que no voy a ir muy sutil. Pero esta noche es para pasarlo bien. Ni si quiera me sentí mal, cuando llamé a Axel para decirle que cancelaba la cena, incluso le dije que es por que necesito un descanso y quiero fiesta. Se cabreó un poco, pero no creo que le dure mucho el cabreo.
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𝐴𝑍𝑈𝐿 𝑂𝑅𝐺𝐴𝑆𝑀𝑂
Teen Fiction𝒀𝑨 𝑬𝑺𝑻𝑨 𝑷𝑼𝑩𝑳𝑰𝑪𝑨𝑫𝑶 𝑬𝑳 𝑻𝑹𝑨𝑰𝑳𝑬𝑹 𝑫𝑬𝑳 𝑳𝑰𝑩𝑹𝑶 𝑬𝑵 𝒀𝑶𝑼𝑻𝑼𝑩𝑬, 𝑬𝑵 𝑴𝑰 𝑰𝑵𝑺𝑻𝑨𝑮𝑹𝑨𝑴 𝒀 𝑬𝑵 𝑬𝑳 𝑷𝑹𝑶𝑷𝑰𝑶 𝑳𝑰𝑩𝑹𝑶, 𝑬𝑵 𝑳𝑨 𝑷𝑹𝑰𝑴𝑬𝑹𝑨 𝒀 𝑼́𝑳𝑻𝑰𝑴𝑨 𝑷𝑨́𝑮𝑰𝑵𝑨 ¡𝑫𝑰𝑺𝑭𝑹𝑼𝑻𝑨! - Vale. Est...