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Capítulo 29: Sentimientos abrumadores

Hoy me levanto sabiendo que mañana es el gran día. Es el día en el que voy a lanzarme a la piscina. Solo espero que esta vez este cubierta. Bueno y en que hoy es el gran día de mi bebe, empresas Scott cumple dos años en temporada y hay que celebrarlo. Hoy tengo una sorpresa para mis trabajadores. Cuando me pongo en pie escribo a Remedios, que es la que se encarga de los preparativos. Obtengo respuesta inmediata:

"Remedios: Todo listo"

Con ese mensaje empiezo a hacerme el Té y a vestirme. Para hoy escojo unos pantalones ajustados hasta las rodillas y con volantes desde ahí, color salmón. Una blusa blanca que deja mi tripa al aire y una coleta tensa con gomina. Para hoy voy a usar un maquillaje casual: Base, mascara de pestañas, colorete y pintalabios color salmón. Me tomo el Té y me calzo unos tacones blancos, que llevaba sin usar  mil años. Para hoy tengo preparado un banquete a coste de mi bolsillo, para todos los empleados incluidas limpiadoras y seguridad. 

Cuando aparco en el aparcamiento de mi bebe, me pongo todavía mas nerviosa. Espero que no hayan pillado a Remedios, se supone que es una sorpresa, pero a ella se le da tan mal mentir... Hoy es Viernes y ultimo día, estarán como locos. Espero que les guste. 

Cuando entro, Remedios me guiña un ojo. Es nuestra señal, de que gracias a dios todo va como lo hemos planeado. Lo que quiere decir, que hay media carta hecha especialmente para nosotros, esperando en la sala de juntas número tres. Que es la que menos se usa y la mas grande. 

- Ves a revisar todo y me mandas un mensaje cuando este todo listo – Le digo a Remedios.

- Voy – Dice saliendo se su puesto y perdiéndose por los pasillos.

Camino hasta los cubículos de mis trabajadores y les hago una señal para que me presten atención. 

- Bien chicos y chicas... Asido un año duro, hemos tenido que renunciar a muchas cosas... Pero aquí estamos, en todo lo alto. Con subidas de sueldo y con un mes de vacaciones – Se oyen las risas y vitoreos y aplausos – Me alegro mucho de haber contratado a gente tan enérgica y trabajadora como vosotros. Sois la batería de esta empresa – Una lágrima se desliza por mi rostro – Gracias a vosotros he conseguido mi sueño, así que quiero que hagamos algo juntos esta ultima temporada ¡Seguirme! – Digo al recibir el mensaje de Remedios.

- ¿A donde vamos? – Preguntan.

- Seguirme y punto.

Cuando llegamos a la sala de juntas tres, las exclamaciones son abrumadoras. A quedado tal y como quería, La comida descansa sobre la larga mesa y los regalos para todos sobre el mueble oscuro. Sin pensárselo dos veces se lanzan a por la magnifica comida, que el chef Jonson nos ha preparado con esmero. Mientras devoramos la comida, hablamos de diversos temas. Se les ve felices, sin tensiones... Simplemente siendo ellos mismos, sin importar que la jefa esté aquí y he de admitir que eso me agrada. Para mi son como mi familia. 

- Bueno jefa ¿Y esas bolsas? – pregunta Jack.

- Son para vosotros – Me miran confundidos – Os he comprado algunos regalos, no son nada del otro mundo... Pero me apetecía daros algo.

- ¿Que son? – Preguntan al unisono.

- Abrirlos y descubrirlo vosotros mismos.

Obviamente todos se levantan y cogen una bolsa. Son color plateado y tienen un lazo negro para cerrarlas. Les he regalado a todos lo mismo. Soy malísima haciendo regalos, lo sé. Dentro de todas las bolsas hay una escapada relajante a una casa en la playa, en la montaña o en un pueblo rural. Para que la gente pueda desconectar por un fin de semana con todo pagado. A lo mejor me estoy pasando de generosidad, pero es que cuando les contrate, lo estaban pasando terriblemente mal algunos... Por lo que les tengo muy mimados.