Número de palabras: 2493
Las noches veraniegas en Tokio eran realmente cálidas, o al menos eso era lo que recordaba Daichi de los veranos anteriores en la ciudad.
Ahora mismo, sin embargo, la temperatura se sentía mucho más fría y gélida, aun cuando no debía ser menor a 19°c.
Aun cuando estaba por ver al chico del que estaba enamorado desde la preparatoria... después del estrepitoso rechazo de sus sentimientos, aunque quizá esa era la razón por la que la noche se sentía más fría a medida que se acercaban a la casa de los tíos de Koshi.
No obstante, prefería pensar que la baja sensación térmica se debía a que el barrio ricachón donde se hallaban tenía aire acondicionado incorporado, por muy tonto que sonara. Quizás estaba pasando demasiado tiempo con los tarados de sus amigos y la estupidez se le estaba pegando.
Cerca de las 8 p.m. Bokuto, Daichi, Kuroo y Ushijima llegaron a la residencia Sugawara, después de perderse una que otra vez en el trayecto.
Luego de atravesar una alta reja color hueso, que permitía el ingreso al frondoso jardín de hortensias, camelias y otras variedades de flores que Sawamura no reconocía; los recibió una enorme puerta de roble oscuro.
—¿Deberíamos tocar el timbre? —preguntó Daichi cuando un abrumador silencio los rodeó.
—Estamos esperando que te prepares mentalmente para ver a ese rompecorazones —aclaró Kotaro, ganándose un fuerte codazo en el estómago, cortesía de Tetsuro.
Kuroo le regaló una gran sonrisa —al estilo del gato de Cheshire— mientras alzaba los dos pulgares, a su lado Ushijima asintió para darle apoyo moral.
A estas alturas, hasta una frase fuera de lugar al estilo de "la que no es puta no disfruta y la que no es perra no prospera" de Oikawa habría sido más útil que ese pobre intento de darle ánimo.
Incluso se habría conformado con un comentario que tuviera todo menos sentido por parte de Tendo, eso al menos habría apaciguado un poco el ambiente. Lástima que ninguno de los dos pudo asistir al encuentro.
Oikawa porque ya había programado una cita con Iwaizumi. Si, programado. Hajime odiaba que Toru llegara de imprevisto a, en sus propias palabras, «perturbar su paz». La solución a la que llegaron fue acordar las fechas previamente para que el moreno se prepara mentalmente.
A Oikawa le gustaba decir que esa era la excusa del mayor para calmar sus nervios por tener una cita con el magnífico Oikawa Toru. Todos lo dejaban pensar eso, incluso el bocaza de Bokuto.
Por otro lado, Wakatoshi había dicho que Satori no había querido ir porque no estaba de humor para salir, Daichi comprendía lo que estaba sintiendo el pelirrojo así que no le cuestionó nada.
De hecho, el mismo Sawamura se estaba obligando a mostrar su cara en la casa de Sugawara, pues las ganas de verlo eran superiores al temor de que su interacción se viera entorpecida por su estúpida confesión.
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Miradas Compartidas - Haikyuu!! [Omegaverse]
FanfictionMiradas nerviosas desde la distancia. Nombre, Shirabu Kenjiro; estado: en una relación con sus estudios y el profundo enamoramiento por su senpai Ushijima Wakatoshi. Miradas que anhelan ser correspondidas. Nombre, Akaashi Keiji; estado: "felizmente...