That's Why I Love You (traducido al español)

capitulo 14

POV Clarke

Lexa volvió a desaparecer al día siguiente, diciendo que tenía que hablar con sus generales. Me colé en su tienda cuando se fue, con cuidado de evitar a cualquiera de sus guardias.

Su cama estaba desordenada y deshecha. Velas se encontraban junto a su cama. Los papeles estaban esparcidos sobre la gran mesa frente a su cama. Me acerqué, hurgando en ellos. Sabía que probablemente no debería haberlo hecho, pero quería saber todo lo que pudiera sobre ella. Ya sabía quién era ella. Ya sabía qué tipo de persona era. Pero no tenía ni idea de quién era su familia, o cuándo comenzó su entrenamiento para ser Comandante.

Mientras miraba a través, un médium familiar me llamó la atención. Saqué el trozo de pergamino y lo miré. Era el dibujo que le había hecho en Polis, en el que dormía. Le sonreí. Ella lo había guardado.

De repente escuché un ruido sordo y miré detrás de mí, sorprendida. Lexa estaba allí, tratando de calmarse y fingir que no se había tropezado. Lexa me miró con expresión culpable, sabiendo que la habían sorprendido mirándome.

Ella sonrió y se acercó. Traté de guardar el dibujo, pero ella ya lo había visto. Su rostro palideció y su sonrisa se desvaneció.

"Yo ... yo te lo iba a dar." Dijo rápidamente. Era obvio que no era por eso que lo había guardado.

"¿Si?"

Lexa asintió vigorosamente, tratando de convencerme.

"¿Para terminar?"

Las mejillas de Lexa se pusieron de un rojo brillante y sonreí al verlo.

"Si ... si quisieras. No tienes que hacerlo, solo pensé ..." Lexa tropezó.

"Lexa". Dije, deteniendo su habla nerviosa. Ella me miró con ojos vacilantes. "Me encantaría terminarlo".

"Bueno." Ella murmuró.

"Y luego puedes quedártelo. Porque sé que no lo tenías sólo para devolvérmelo". Dije con una risa.

Ella se miró los pies. Me golpeé mentalmente por mencionarlo. Traté de pensar en algo para aliviar su vergüenza. Y luego pensé en lo que había hecho antes de dejar Polis. Me sentí un poco culpable, sabiendo que Lexa podría extrañarlo.

"Cogí una vela". Solté. Ella me miró.

"¿Qué?"

"Antes de irme de Polis." Dije con un suspiro. "Tomé una vela de tu habitación y la puse en mi bolso. No sabía si volvería, y el Arca no usa velas de todos modos, así que tomé una. Y luego la encendí la primera noche que estuve allí ".

Me encontré con los ojos de Lexa. Sonreía de oreja a oreja.

"¿Cogiste una vela?"

"Si."

"¿Por qué? Podrías haberte llevado cualquier otra cosa. Te habría dejado llevar tu cama contigo si quisieras." Ella dijo con una carcajada.

"Bueno, primero, no sabía eso en ese momento. Y segundo, las velas me recuerdan a la torre. Tienes tantas alrededor que las velas son lo primero que me viene a la mente cuando pienso en la torre". Dije. No me refiero a la torre. Quise decir Lexa.

Ella asintió. "Bueno, puedes tener tantas velas como quieras. Puedes tener cualquier cosa".

Sonreí y asentí. "Gracias."

"Por supuesto." Hizo una pausa antes de que su sonrisa se apagara. "Desearía no tener que sacar esto pero tenemos que discutir lo que sigue".

Asentí. Había estado esperando esto.

"¿Quieres ir a casa y ayudar a Arkadia? O puedes volver a Polis conmigo. Estoy segura de que quieres estar aquí con tus amigos y tu madre, así que lo entenderé si decides quedarte". Ella murmuró.

Sonreí y sacudí mi cabeza. "Me voy a casa."

Lexa parecía un poco derrotada cuando respondí, especialmente porque no dudé.

"Para Polis". Dije. Ella me miró con ojos sorprendidos. "Te dije ayer que Polis es mi hogar ahora".

Ella asintió mientras su sonrisa regresaba. "Muy bien. Nos iremos en dos días. ¿Es tiempo suficiente para decir adiós?"

Di adiós. Eso es lo que me dijo Octavia antes que Lexa y yo ... Y antes de que le dispararan. Antes de que ella casi muera en mis brazos. Me despedía de Lexa para ir a Arkadia.

Y ahora era al revés. Me despedía de todos en Arkadia y volvía a casa. Con Lexa.

"Si." Le dije a ella.

Lexa me miró profundamente. "¿Estás segura de que estarás bien sin tu madre y tus amigos?"

Asentí. "De lo único que estoy segura es de que no estaré bien sin ti".

Ella sonrió. Y luego, solo porque ella era tan hermosa en ese momento, me incliné. Le tomó un momento darse cuenta de lo que estaba pasando hasta que presioné mis labios sobre los suyos. Agarró mi mano y la entrelazó con la suya mientras yo sostenía su cintura y ella sobre mi cuello, acercándome más.

Cuando nos separamos, sus ojos permanecieron cerrados. Y luego se abrieron revoloteando y miraron fijamente la mía.

"¿Por qué no terminas ese dibujo?" Dijo, sonriendo.

Me reí y luego ella se río y fue el sonido más hermoso del mundo.

Una vez que terminé con el dibujo, se lo mostré. Me tomo un tiempo terminar porque ella seguía inclinándose hacia adelante y besándome, o tomando mi mano, o riéndose de lo estúpida que se sentía. Le aseguré que se sentía increíble.

Ella miró el dibujo y lo miró, hipnotizada. Así era como me sentía cada vez que la veía.

"Clarke ..." susurró. "Esto no es realmente lo que parezco. No soy eso-eso-"

"Hermosa." Terminé. "Y sí, lo eres. No te hice justicia."

Ella se sonrojó y negó con la cabeza.

"Ojalá pudiera dibujar para poder mostrarte lo hermosa que eres para mí ...", dijo, apagándose.

"Muéstrame cada vez que me mires, Comandante Ojos del corazón ". Dije riendo.

Ella rió. "Supongo que tienes razón. No puedo controlarlo"

"Y no te atrevas." Dije inclinándome hacia adelante. "Me encanta."

Sus mejillas se sonrojaron y me devolvió el dibujo.

Negué con la cabeza. "No. Guárdalo."

"Clarke, yo ..."

"Guárdalo. Probablemente iré a visitar a mi mamá y a mis amigos de vez en cuando y quiero que tengas eso. Como yo tengo tu vela".

Ella sonrió suavemente. "Está bien. Pero intentaré ir contigo, si puedo. Diré que es asunto de la Comandante. Arkadia es uno de los clanes, después de todo. Y cuando te vayas de Polis de nuevo, podrás llevarte cualquier cosa que te recuerde a Polis. .No tiene que ser solo una vela ".

"Eso sería genial. Y no quiero que me recuerden a Polis. No tanto como quiero que me recuerden a ti"

Dejó el dibujo sobre la mesa, mirándolo con amor. Luego me atrajo hacia ella y rodeó con sus brazos mi espalda, inclinándose para enterrar su rostro en mi hombro. Sonreí y pasé mi brazo alrededor de su cuello, colocando una mano contra su cabello y pasando mis dedos por él.

Abrazarla podría ser casi mejor que besarla. Ella era tan cálida e irradiaba a mi alma. Mientras apoyaba la cabeza en mi hombro, sintió como si mi hombro fuera la almohada que necesitaba. Sentí que solo yo podía darle esto, y me encantó.

"Tú también eres mi hogar". Ella murmuró en mi cabello. Sonreí y cerré los ojos, sintiéndome segura en los brazos de ella .

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Estaré publicando capítulos : lunes , miércoles y viernes