That's Why I Love You (traducido al español)

capitulo 23

POV Clarke

Regresé a la habitación de Lexa pensando en la conversación que había tenido con ella. Trató de ocultarlo, pero era evidente que estaba asustada. Pensé que ella estaba únicamente preocupada por mí y mi seguridad, pero supongo que estaba equivocada.

Cuando abrí la puerta, me encontré con ojos marrones cálidos y entusiastas. Raven estaba descansando en el sofá, leyendo uno de los libros que me regaló Lexa. Tenía una de las mantas de Arkadia sobre su regazo. Puse los ojos en blanco. Excelente. Cuervo llegó a mis regalos antes que yo.

Ella me miró cuando entré. "Oye, Clarke."

"Raven, ¿qué estás haciendo aquí?"

"Oh, sólo una lectura ligera". Dijo Raven, sin dejar de hojear la página. Se lamió el dedo y pasó la página.

"¿Por qué estás en la habitación de la Comandante?"

"Bueno, parece como si fuera tu habitación, ahora." Dijo Raven, mirando la pila de materiales de arte sobre la mesa. "Y puedes llamarla Lexa delante de mí, Clarke. No me importa".

Sacudí la cabeza con incredulidad.

"Entonces, ¿tuviste una buena noche?" Preguntó Raven, sonriendo. Seguí sus ojos hasta la cama de Lexa, donde había algunas de nuestras ropas esparcidas.

Gruñí y me acerqué, recogiéndolas. No tenía ni idea de lo que hacía Lexa con la "lavandería", así que la volví a guardar en su armario. Al menos estaban lejos de miradas indiscretas.

Cuando salí, le arrebaté el libro a Raven, lo guardé en la estantería y le arranqué la manta. Se acurrucó en una bola y chilló.

"Vamos, Clarke. Tengo frío." Raven se quejó.

"Entonces regresa a tu habitación y usa tus propias mantas". Dije, doblando la manta y tirándola encima del sofá.

"Pero mira ... no tengo ninguna de estas elegantes mantas de Arkadia que Lexa te trajo tan adorablemente. En cambio, tengo restos de animales". Dijo Raven, mirando las pieles de la cama de Lexa.

Puse los ojos en blanco. "Están limpias".

"Todavía." Raven refunfuñó.

"Yo ... no sé si Lexa se sentiría cómoda contigo aquí".

"Ella está bien con eso." Dijo Cuervo, levantándose y volviendo a la estantería.

"¿Qué?"

"Sí, les dijo a sus guardias que Octavia, Lincoln y yo podíamos entrar aquí y relajarnos. Y luego les dijo que si intentaban echarnos, no nos dejaran ir". Dijo Raven, sacando otro libro.

Suspiré con frustración. Eso sí parecía Lexa.

"¿Entonces qué quieres hacer?" Preguntó Raven, hojeando el libro. Me crucé de brazos y pensé.

"Apagar todas las velas de este piso". Dije con una sonrisa traviesa.

Raven cerró el libro de golpe y me miró diabólicamente. "le entro."

Deslizó el libro de nuevo en el estuche y agarró la manta, envolviéndola alrededor de ella como una capa y metiéndola en su camisa para que se quedara.

"Hagámoslo."

Raven y yo recorrimos la habitación, apagando todas las velas lo más rápido que pudimos. Raven tuvo la idea de contar exactamente cuántas velas tenía Lexa. Finalmente, la habitación se llenó solo de luz solar. Sonreímos triunfalmente y chocamos los cinco.

Salimos apresuradamente de la habitación en un ataque de risitas y comenzamos con velas justo afuera del pasillo. Ni siquiera habíamos salido del pasillo y ya habíamos volado sesenta y tres.