Keyla
Vinicio se queda ultimando detalles con Cassidy sobre el plan y yo salgo del galpón a tomar aire. Hace mucho calor ahí dentro y no me hace bien. Por suerte aquí está ventoso, me sentiré mejor en espacio descubierto.
―¿Te encuentras bien? ―Veo que Tyner sale también―. Te ves pálida.
―Estoy bien, solo necesito un poco de aire e hidratarme.
Camino en dirección al auto, que está estacionado a escasos metros de nosotros. Abro la puerta del vehículo, entonces saco una botella de agua de allí. Me doy la vuelta, así que noto que me ha seguido.
―Eso es acoso ―recrimino molesta.
―No puedo dejar a una embarazada sola por ahí, es peligroso, más si estamos generando un plan en contra de unos mafiosos.
―Por algo el lugar es aislado ―digo sin importancia y bebo un sorbo de mi botella.
―Me tratas así y tú eres la traidora. ―Sonríe sin humor―. Qué hipócrita eres.
Suspiro.
―Tienes razón.
Enarca una ceja.
―¿Qué es ese cambio de actitud?
―Solo intento evitarte ―aclaro.
―¿Disculpa?
―Me odias y yo no siento nada por ti actualmente, pero hay algo que todavía nos une.
―¿De qué estás hablando? ―expresa confundido.
Tomo su mano y jala un poco de esta, se detiene cuando la apoyo en mi vientre.
―Es tuyo.
Sus ojos se abren en grande.
―¿Qué estás diciendo? ―exclama impactado―. Vinicio dijo...
―Vinicio me dio tiempo para darme valor, ya no soy la Keyla de antes, ahora sí siento que tengo alma y que quizás pude hacer las cosas de otra manera.
―Keyla...
Bajo la vista.
―No quiero que sientas culpa porque me disparaste, porque pudiste haber lastimado a este bebé. La persona a la que le tiraste esas balas ese día es como si hubiera muerto, ahora tengo otros sentimientos.
―Entiendo.
Se hace un silencio, abro mi boca despacio cuando decido hablar.
―Bueno. ―Me alejo―. Hay que seguir con el plan. ―Me giro para guardar la botella.
―Está bien, te perdono. ―Oigo detrás de mí.
Me quedo callada un momento.
―No deberías. ―Sonrío.
―Si no te perdono, seguiría siendo un amargado y la verdad, estaría bueno ser el de antes.
Doy la vuelta a mirarlo.
―Sería bueno, tú mereces volver a tener tu sonrisa.
Veo que Vinicio sale del galpón, entonces me acerco a paso rápido hasta él y le sonrío, por lo tanto también me regresa el gesto.
―Keyla, busquemos donde quedarnos ―me aclara mi pareja, entonces asiento risueña. Se acerca a mi boca y me da un leve beso, tocando mi barbilla con sus dedos al hacerlo―. ¿Ya hablaste? ―susurra por las dudas.
―Está todo aclarado ―respondo y me agarro de su brazo―. Vámonos.
Nos despedimos, entonces nos dirigimos al vehículo, una vez damos unas cuantas vueltas por las calles, encontramos un hotel. Vinicio frena el coche en el estacionamiento del hospedaje. Pedimos una habitación, cuando ya estamos en el cuarto, me recuesto en la cama, por su parte él se sienta a mi lado, apoya su mano en mi pierna. En un momento pensé que quería fornicar, pero al siguiente se pone a hablar del plan. No me quejo, ambas opciones son buenas para mí. Las hormonas me ponen más cachonda, pero esas no evitan mis ansias de venganza. Me acomodo manteniéndome acostada de un lado y lo escucho mientras él no deja de acariciar mi pierna.
―Repasemos, la persona más fácil de encontrar es Trix ―habla de la doble de Susan―. Una vez la ubiquemos, utilizaremos el localizador que nos dio Cassidy, pero antes hay hacerle notar a tu enterrador que volviste.
Asiento.
―Sí, así mueve sus fichas. ―En este caso Trix.
Entonces utilizaremos las nuestras y así sucederá al fin el jaque mate.
Vinicio acerca su rostro y me besa.
―Eres muy inteligente.
Siento el tacto de sus labios y lo sigo besando, me abrazo a su cuello.
―Gracias, es un don.
Se inclina subiéndose sobre mí, agarra la almohada y la pone a mi espalda para cuidarme, luego nos seguimos besando. Abre mi blusa, entonces mete sus manos a apretujar mi sostén. Mis dedos descienden a su pantalón, le bajo la cremallera y le presiono el pene.
Nos reímos, somos unos calenturientos.
Aunque no me arrepiento de mi elección, somos tal para cual.
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Perversa Oscuridad: Reina
БоевикSecuestrada, obligada a estar en la prostitución, pero Keyla no solo buscará sobrevivir en ese calvario, también intentará ser la reina de este y cumplir su venganza. "Estuve esperando cautelosa para hacer mi jugada". Libro independiente de Perversa...