Todos los estudiantes salían de la recién reunión que dio la universidad con noticias extraordinarias sobre los acontecimientos recientes.
El que alumnos sobresalientes de cada carrera sobresaliera en sus estudios, les era grato a los directivos y les era recompensado por ello. Algo que al parecer a todo el mundo le emocionaba por ganar sus vacaciones de invierno totalmente pagadas para dos personas.
Y al parecer, uno de sus mejores amigos, NamJoon, quién le retraía la mirada cada que lo miraba de lejos, se había ganado la oportunidad de viajar con alguien a donde él quisiera por sus logros académicos.
Taehyung se esforzaría todavía más para que le pagaran su viaje a Londres para sus vacaciones de fin de año, ya que como se les comentó, aquellos obsequios bien merecidos eran entregados dos veces al año.
Taehyung miró a su alrededor buscando a su mejor amigo que desde que este amaneció, estaba empeñado en no dirigirle la palabra a cómo diera lugar. Logró verlo caminar entre unas cuantas personas donde se acercaba a un grupito de chicos, que sí el peliazul se acordaba, eran los amigos de su roomie. Tan pronto como lo vio sonriente se preguntó en qué momento fue que YoonGi convivía con mucha más gente que no fuera él, y claro que no le molestaba, sólo que sentía raro el hecho de no tener al mayor a su lado como siempre lo tenía cada que encontraban un espacio libre para juntarse.
Y ahora que lo pensaba, cada espacio libre que había tenido desde que comenzó a juntarse con cierto pelinegro que justo caminaba a su dirección con una pequeña sonrisa, lo pasaba con alguien más que no era YoonGi.
JungKook saludó a Taehyung llevándoselo por los hombros siendo observado por cinco pares de ojos curiosos —o al parecer todavía muchos más que lograron darse cuenta que la pareja no se saludó, los habían mirado extrañados—, porque como sabía todo el mundo, aquella pareja conformado por un lindo rubio y un pelinegro atractivo, era la pareja más visual que habían visto. Pero todavía no conocían la verdad.
—¿JiMin? —Habló Yeji—. ¿Por qué tu novio no te saludó?
El rubio al escucharla solo desvió su mirada a algo más interesante que su cuestionamiento, así como lo era la mano de Seokjin en la espalda de YoonGi.
El último nombrado al darse cuenta de que miraba, se apartó del lado de Seokjin, despidiéndose de él y los demás con mucha rapidez.
—Todo el mundo está extraño hoy —JeongIn los miró a todos inquisitivo.
—¿Enserio? No me había dado cuenta —Yeji rueda los ojos divertida.
—No pasa nada, mejor me voy a clases, chicos —Abraza a los dos chicos y a Yeji le da un pequeño beso en su mejilla derecha—. ¡Hasta al rato!
Salió corriendo agitando su mano en el aire con una sensación rara en el pecho.
—¡No olvides qué hay que planear tu cumpleaños! —Gritó Seokjin, atrayendo las miradas de varios presentes que seguían en la planta central de toda la universidad.
—¡Falta un mes para eso! —Le gritó de vuelta provocando una risa en Seokjin, ¿a él que le importaba que faltara un mes?
—¡¿Y qué?! —JiMin negó ante eso y chocando por accidente con alguien más alto que él, se percató de quién se trataba, apuró su paso desapareciendo por uno de los pasillos bajo la mirada de cierto chico amante de la biología. Porque a pesar de todo, nunca podría quitarle los ojos de encima, por más que quisiera.
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