Si hiciera un top con "momentos más irreales de los que después me arrepentiré", definitivamente este momento estaría, nunca hubiera imaginado a Sasuke usando solo una camiseta e invitándome a entrar luego de que me descubriera espiándolo. La camiseta que vestía, era del equipo de futbol, el escudo de la preparatoria y los colores eran demasiado visibles para notar que eran de Konoha, y aunque el nombre del propietario original no pueda verlo, sé que no es de Sasuke, y apostaría porque dice "Uzumaki N." podría preguntarme ¿Por qué la tiene Sasuke? Pero obtendría una respuesta tan obvia que sería casi insultante, además, justo ahora me gustaría pensar que tiene esa camiseta de hace mucho tiempo y no que acaba de estar con Naruto. No tuve tiempo de pensar mucho en eso, porque otra cosa que tampoco nunca imagine fue que yo fuera a estar espiando a Sasuke Uchiha mientras se masturbaba en nombre del chico que nos gusta a ambos, y mucho menos pensé que aceptaría su invitación de entrar. Cerré la puerta aunque ni siquiera me lo pidió, pero me quedé de pie junto a ella, en realidad aun me siento un poco mareado, no sé si es el alcohol o solo la situación, además ver a Sasuke así es muy hipnótico, me miró divertido, es curioso que nunca haya visto a Sasuke sonreír auténticamente a menos que esté con Naruto, o, como en este caso, drogado.
_ Bueno, creo que te debo muchos favores_ se sentó para verme de frente, dejó sus piernas abiertas y entonces descubrí que tenía puestos unos bóxer negros que contrastan perfecto con su piel pálida_ no respondí_ Bueno... ya sabes lo que pasó con Neji ¿no?_ de nuevo, no respondí_ bueno, es por eso que ya no ofrezco mamadas a cambio de silencio, pero ¿Qué te parece si tú lo haces? ¿Puedo pagar tus favores así?
No respondí tampoco, pero mi cuerpo se movió solo y cuando llegué a estar a centímetros de él, me ordenó que me arrodillara, lo hice sin pensar si quiera en la posibilidad de desacatar sus órdenes. Dios, se puso de pie y quedé de frente a su entrepierna, alcé la vista y me encontré con sus ojos oscuros, me invitó a que bajara sus bóxer, lo hice para encontrarme con su pene, ya lo había visto una vez por error cuando le envió una fotografía a Naruto, pero ahora lo tenía frente a mí, húmedo, rosado, y protegido por escaso bello negro, abrí la boca y recordando los viejos tiempos de "asesorías de matemáticas", comencé mi trabajo, lo introduje por completo en mi boca llenándolo por completo de saliva.
_ Bien, bien, bien_ apenas articulaba, puso sus manos sobre mi cabeza y empujaba un poco mi cabeza, al mismo ritmo que yo hundía su miembro en mi boca.
Lo saqué de mis labios_ No te atrevas a llamarme Naruto_ advertí, pero ciertamente aunque sonó así, no era el tono con el que quería que se expresara.
Fue lo que un destello de conciencia me permitió decir, sabiendo que de escuchar a Sasuke llamándolo a él, no habría podido continuar, no tanto por el hecho de que me ofendiera, sino porque me recordaría su romance, el hecho de que le estoy dando un oral al chico que tiene un romance con quien me atrevería a decir es casi el amor de mi vida, y que además es novio de una de mis mejores amigas, toda esa culpa recaería en mi justo ahora, y no es mi ideal recordar eso, y menos de la boca de alguien que ya escuché gemir por Naruto.
Continué con mi trabajo luego de la advertencia, bese el glande un poco, recorría con mi lengua todo el largo, lo introduje de nuevo en mi boca con un ritmo constante, con mi mano derecha jugaba con sus testículos mientras que con la izquierda acariciaba sus muslos, no me atrevía a más, succioné un poco sus bolas y sentí que tiró de mis cabellos, regresé a succionar únicamente y con dedicación el glande.
_ Oye_ me llamó y apenas alcé la vista empujó mi frente para correrse en mi cara_ Era mejor así_ dijo antes de dejarse caer de nuevo en la cama_ ahí hay pañuelos, Gaara_ me señaló su mesa de noche.
Me limpié la cara y lo mejor era salir de ahí, tener un malamente buen recuerdo de la fiesta e irme, pero volvió a hablar, no entendí que dijo así que le pregunte si podía repetirlo.
_ Dije_ alzó la voz_ que apuesto que te gustaría montar esto_ repitió mientras acariciaba a su miembro por encima el bóxer que se había vuelto a poner.
_ No es una buena idea, Sasuke_ dije pero no salí de la habitación.
_ Como quieras_ se rio, sospecho por efecto de las drogas.
Entonces no pensé, solo vi los posibles escenarios en donde me iba y llegaba a casa lamentándome, sin embargo, de hacerlo con Sasuke hoy, si volvería a casa lamentándome por haberlo hecho y no por perder la oportunidad. Puedo lamentarme de tener sexo con Sasuke, o puedo lamentarme por solo haber iniciado y acobardarme después.
_ Sí.
_ ¿"si" qué?
_ Quiero hacerlo.
_ Bien_ se levantó de la cama, caminando sobre ella y llegó hasta el cajón de la mesa de noche_ siéntate y quítate la ropa_ me ordenó mientras él ni quiera me miraba.
Me acerqué torpemente a la cama y me senté, mientras él seguía buscando algo en su cajón me desprendí de mi pantalón a cuadros, lo dejé en el piso y me quité el suéter miel, tenía una camiseta lisa blanca pero no me la quité.
_ Aquí vamos_ dijo mientras se acercaba a gatas sobre la cama a mí_ abre las piernas.
Lo hice lentamente, aún estoy nervioso, y no es solo por lo improbable que suene para mí tener sexo con Sasuke, sino por todo lo que esto implica. Estaba sentado con las piernas abiertas frente a Sasuke, me sostenía ligeramente con los brazos para poder observarle, tan pronto mi sexo se vio expuesto, él acercó su rostro y comenzó a dar besos húmedos por mis muslos, cerré los ojos, y sentí como introdujo la lengua en mi entrada, dejé caer mi cabeza a la cama y me limité a acariciar su cabello y de vez en cuando ejercer fuerza para que mantuviera el contacto, introdujo dos dedos en simultaneo y estuvo muy bien, le pedí que siguiera y ya en este punto ni siquiera me importa si mis gemidos son escuchados, que es muy poco probable. Sentí que se detuvo, alcé la mirada confundido y lo vi colocándose un preservativo, momentáneamente pienso en si en verdad no esta tan inconsciente que le da tiempo de pensar en esas cosas, o si está tan acostumbrado a tener sexo en ese estado que se amaestro a él mismo para cuidarse incluso entonces, no acabé de razonar cuando él ya estaba introduciendo su miembro en mí, tan placentero que no pude esperarlo, estaba haciéndolo lento con los ojos cerrados, pero me vi en la necesidad de jalar del cuello de la camiseta del equipo de futbol que no se quitó y acercarlo a mí con brusquedad, fue una estocada violenta y se quedó quieto, me miró pero era extraño, no era el mismo Sasuke que yo veo en la escuela, era un Sasuke diferente, no me gustaría decir que más frágil pero si sin tantas capas de protección, no podía ver su rostro, era más culpa, así que solo acerté a besarlo, un beso húmedo en el que ninguno de los dos dudó en meter la lengua de inmediato, sus estocadas seguían, sentía como entraba y salía tan rápido excitante que no podía más que dejar que las palabras murieran en mi boca, tampoco es como que quisiera hablar ahora. Se separó de mis labios, levantó mis piernas y me embistió con más fuerza, me aferré a las sabanas, y sentí el orgasmo minutos después, él terminó en seguida. Con las respiración tan agitada como la tenía, apenas me incorporaba, planeaba buscar mi celular, tengo la sensación de que escuche que sonó, pero me estaba levantando cuando Sasuke me detuvo, me dio vuelta y quede a gatas, entendí que iba a pasar, cuando sentí que me penetraba de nuevo mi cuerpo se entregó por completo, dejé la cadera levantada y el resto de mi cuerpo se sumió en el colchón, seguía entrando y saliendo con violencia, de alguna forma me gustaba, busqué mi propio miembro y comencé a bombearlo, él me sostenía la cadera.
No estoy seguro de que paso después, no muy bien, me empezaba a sentir muy cansado y vi a Sasuke tendido a mi lado.
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Un sol que no me pertenece
FanfictionGaara es un estudiante de preparatoria que recién se integra, conoce a Naruto y termina enamorado de él, sin embargo el amor no es correspondido. se aborda como es su convivencia dentro y fuera del colegio, y las relaciones que el rubio llega a mant...