Capítulo 22

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Desvelada, a las seis de la madrugada por culpa de alguien que tuvo la idea de hablarme a estas horas, durante mis preciadas horas de sueño. ¿Quién fue? No lo sabía pero en cuánto desbloqueara mi móvil lo descubriría, y no me haré responsable de mis respuestas  a no ser que el/la culpable tenga una buena razón. No es que yo sea una dormilona, pero como mínimo debo dormir entre ocho y siete horas y dado que llegué a casa a las dos y media, pues por ahora llevo dormido tres horas y media.
Desbloqueé rápida y ansiosa la pantalla, y ahí estaba el culpable de desvelarme, el causante de la mayoría de mis problemas. Era extraño tener un mensaje de Niall a estas horas.

"¿Llegaste bien a casa?"  Decirme que es una broma porque tengo tentación de matarlo.
"A buenas horas te preocupas ¿no crees? "
"Tienes razón. Es que mi mente ha estado ocupada pensando en otro tipo de cosa."
"Sigue sin ser excusa para que me hables ahora. No estás respetado mis horas de sueño."
"Lo sé, y tu tampoco respetas mi mente, por ti aún sigo despierto…"
"Buenas noches Niall."
Tecleé rápida y cerré mis ojos.

 Era demasiado temprano para comenzar a darles vueltas a mi cabeza de qué era exactamente lo que pretendía conmigo y qué quería yo. Desde luego ser herida no entraba en mis planes y debía ser cuidadosa en qué tipo de juego entraba y joder ya le estaba dando vueltas e instantáneamente mi sueño comenzó a disminuir. Intenté pensar en otra cosa, lo primero que me pasó por mi cabeza fue cuándo anoche Niall y yo nos escapamos corriendo del colegio, justo después de que me dijera que le agradaba la idea de estar solo y yo respondiera con un simple: »A mí no.« Reconozco que a veces puedo ser realmente borde y antipática pero no soy yo, a ver si soy yo aunque en el fondo no piense de esa manera. Después de mi respuesta, la luz procedente de una linterna se acercaba por el pasillo lo que significaba que el conserje nos debió escuchar por lo que tuvimos que escapar por la ventana y para nuestro favor los perros del conserje nos comenzaron a la ladrar ¿la opción? Correr. Después de la escapada no localicé a Niall y dado la hora que era decidí volver.

***
Estaba en el supermercado, a mamá se le había olvidado que hoy venía su amiga Rachel a cenar con su marido. Mientras ella limpiaba cada rincón de la casa intentando dejarla lo más impecable posible yo me encontraba aquí buscando lo que venía en la lista, lo tenía ya prácticamente todo, solo me faltaba el maldito Aceite de Oliva Virgen Extra, digo maldito porque llevaba quince minutos buscándolo y…¿Qué pasaría si le llevo el Aceite de Oliva Virgen pero sin extra?  Vale el sabor varía pero yo no tengo culpa de que se haya acabado o que lo hayan escondido. Rodeé los ojos y por fin divisé lo que buscaba, iba a cogerlo, pero otras manos se interpusieron en mi objetivo. Subí mi mirada para encontrarme con la bestia en persona.
-Hola.-Dijo Caroline mostrando una sonrisa forzada
-Hola.-Respondí igual de fría.
-¿Qué tal te va robando novios? ¿Has conseguido alguno más?
-A ti desde luego no hace falta que te los robe, ya los espantas tu sola.
-¿Disculpa?-Dijo ofendida.
-Pues déjame hacer la compra tranquila y te perdono.
-Tú eres la que me tiene que dejar.
-Caroline… a ver cómo te lo digo.-Hice una pausa. -Eres muy pesada. 
-Cállate niña.- Será estúpida.-¡Ah! ¡¿Estás loca?!-Gritó. Su cara era de pánico, fue impulso tirarle tomates a la cara.
-Perdón, se me escaparon.-Dije irónicamente.
-Ya, claro. Sabes, yo también soy un poco despistada.-Dijo mientras andaba de un lado a otro.-¿Te gustan las fresas?
-¿Por qué...- Maldita perra, con lo ricas que están, las desperdicia tirándomelas.
-Quizás así te enfades menos.
- Entonces espero que te guste el pimiento.-Se lo tiré.
-¡Y a ti las zanahorias! - Quiso golpearme con ellas pero se las quité de las manos antes de que lo hiciera.
-¡Estás loca! No merecen que tus sucias manos las desprecien así.
-¡Tu eres la despreciada aquí! - De nuevo intentó tirarme zanahorias pero un hombre bastante alto y vestido de negro se las arrebató de sus manos.
-Ups.
-Yo solo…-Intentó justificarse la pelirroja.
-Os vais fuera.-Dijo el encargado señalando a ambas.
-No, espere tengo que …..
-Irte. -Me interrumpió y no me dejó terminar mi compra. Asentí y fuimos hasta el parking con malas caras.

Intenté no pensar en la reacción de mamá cuándo viera que no había completado la compra, simplemente sería mala, muy mala. Subí el volumen de la radio acompañando la melodía que sonaba con mi voz, aunque no estaba segura si la combinación era buena, hoy quería evitar pensar tan solo hacer las cosas sin pensar un día. Puedes intentar planear las cosas, pero nunca ocurren tal cual lo crees porque surgen los percances, cosas inesperadas y te lo cambian todo, algo que veías blanco perfectamente puede llegar a ser negro o viceversa. En mi caso, puedo cambiar mi punto de vista pero tenía unos ideales intocables, al menos antes de que llegara Niall, desde entonces soy todo menos estable. ¿Debería comenzar a preocuparme? Sí, debería.
"Tengo una propuesta para esta noche y no aceptaré un no por respuesta. Te llamaré luego." Me envió un mensaje Zac.

Versión de Niall

Estaba en casa de Louis preparando el salón para la mini fiesta de los jugadores. La casa de Louis no era la más grande pero a la hora de limpiar parecía que se trataba de la mansión de Paris Hilton. Y lo peor no era lo amplia que se hacía al limpiar, sino que contábamos con la ayuda de los demás para limpiar y solo había venido Harry y yo.
-Joder con Zayn, siempre tarda.-Comentó Harry.
-¿Se ha vuelto a equivocar de calle, verdad? Aquí ya no se puede mudar uno tranquilo.-Se quejó Louis.
-No, eso no es.-Le contradijo.-Dice que le ha surgido un imprevisto.
-Como no.-Rodeé los ojos.
-Tendría una cita pendiente con su espejo.-Rió Harry.
-Mas o menos..-Dijo Liam entrando por la puerta.
-¡Hombre Liam! Qué raro que hayas llegado tarde, si siempre te adelantas.-Le dije.
-Ya es que no encontraba aparcamiento. Ah y Zayn está en la puerta flirteando con una chica.
-Este chico no tiene remedio.-Negó Louis con la cabeza.

Salimos a la puerta de Louis dónde efectivamente nuestro querido amigo Zayn se encontraba coqueteando con una chica.

-Me encanta Italia, es tan linda como tú.-Decía un Zayn con tono seductor.-Tengo familia allí.-Añadió. Cuando Zayn entraba en acción, hasta que no conseguía el número de la chica no paraba.
-¿Enserio?- Dijo una chica rubia de ojos color miel.
-Ahá.
-¡Venga tío que tienes que limpiar! -Le gritó Louis, a lo que Zayn contestó con una mirada asesina.
-Eh bueno tengo que irme. ¿Qué te parece si me das tu número y quedamos?
-Claro. -Respondió y comenzó a dictarle los dígitos correspondientes a su teléfono.
-¿Te llamas?
-Ingrid.
-¿Sabes? Tu nombre significa belleza. Te viene bien y todo.-Le guiñó un ojo. Liam,Louis,Harry y yo enarcamos una ceja al ver los recursos que nuestro amigo usaba para ligar. La chica rió y finalmente Zayn entró a casa de Louis, no sin antes despedirse de la chica con un beso al aire justo antes de entrar.

Nos repartimos las tareas de la casa por sorteo. Yo tenía que encargarme de guardar las cosas valiosas en un armario que se cerraría con llave y de limpiar los cristales, cosa que Zayn quería hacer pero se entretendría mirando su reflejo y tardaría un año en terminar. Mientras limpiábamos Zayn comenzó a contarnos cosas sobre la chica. Ingrid era italiana pero estaba aquí de intercambio en nuestro instituto. También nos contó que ella estaba apuntada a danza contemporánea del colegio, la cual era la razón de que estuviera aquí, ya que hicieron un concurso sorteando una beca para el intercambio. Era razonable que le hubiera gustado a Zayn, la chica era bastante guapa y el acento italiano le hacía ver más sexy, según Zayn.

 2 horas después…

Habíamos terminado de preparar la casa de Louis y los demás volvimos a nuestras casas para comer, eran las tres y aún nos quedaba comprar las cosas para la pequeña fiesta o reunión del equipo que empezaba a las ocho por lo que nosotros quedamos a las seis y media para comprar la bebida y la comida. Para colmo después nos tocará a nosotros recogerlo todo porque si los padres de Louis se enteraban del desastre que se montará nos denuncia y a su hijo lo echa de casa.

Aunque lo que realmente me tenía nervioso era sí Zac traería a _____ a la fiesta. Pensé en la opción de llevar a Caroline pero no estábamos bien y llevarla solo traería problemas, quizás si iba podría distraerme con ella e intentar no ponerme celoso por culpa de Zac pero no serviría seguiría igual de celoso o incluso más porque podría hacer que _____ no quisiera ni mirarme. Pero ese Zac… era una tortura que pretendía fastidiar a todos, en especial a mí y a mi primo. Vino buscando algo que aún no ha encontrado y no le permitiré que lo encuentre, debería haberse quedado dónde estaba. Tal vez esta tortura no dure demasiado y pronto se vuelva a ir, y en el caso contrario seré yo quien se encargue de ponerle fin ¿Cómo? Eso aún no lo sé.

Confused Love |Niall Horan|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora