Capítulo 17

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Sabía que lo admitirían en la universidad. No había manera de que no fuera así, pero aunque estaba seguro de que lo lograría, también se veía a sí mismo emocionado hasta las lágrimas cuando la confirmación llegara.

Y no podía ser más contrario.

— ¡Estoy tan orgullosa de ti, mi Gyunie!

Su madre le llenaba de besos el rostro mientras el teléfono de su abuela marcaba y marcaba número tras número, lo que le hacía pensar que incluso esos familiares que sólo habían estado el día de su nacimiento ya estaban enterados. Y él simplemente sonreía para no arruinar el ambiente tan alegre de su madre y tirarle abajo sus planes de fiesta.

Porque sí, su madre estaba organizando una fiesta.

— Serás el mejor veterinario de Corea, hijo.

Le recocijaba escuchar tan feliz a su padre, realmente lo hacía, pero él no estaba tan alegre como ellos y eso lo frustraba en demasía.

Debería estar saltando por todas partes, celebrando con sus amigos y recibiendo ese viejo teléfono que su abuela le había extendido más de ocho veces y lo había devuelto excusándose con que el pequeño Gyu estaba hablando con alguien más. Mentiras piadosas, no demasiado duras.

Tal vez debió haber hecho el mínimo esfuerzo de soportar un par de horas de fiesta. Se dijo a sí mismo que tendría tiempo de reprochárselo una vez que se encontrara lejos de las copas chocando, las carcajadas exageradas y esas personas que si bien se hacían llamar primos y tíos, no eran más que desconocidos.

Y así caminó durante la noche, alejado por completo de lo que se suponía sería una fiesta de celebración para él, aunque de todas formas no esperaba demasiado: esas cosas nunca duraban mucho y eso, por primera vez, estaba bien.

Si se aburría de andar vagando como alma en pena siempre podía ir a parar al sofá de Yeonjun y Soobin.

Quiso golpearse al compararse con un alma en pena, y quiso golpearse más cuando se encontró a sí mismo fuera de la escuela, esa a la que Taehyun jamás llegó a dar la prueba.

De repente, con el silencio y las estrellas de fondo, sus pensamientos preguntaban a gritos por él.

erumpere ⇢ 𝒕𝒂𝒆𝒈𝒚𝒖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora