La tarjeta de San Valentín

Cap 8. Y el castigo

Cap 8. Y el castigo

Para la mayoría de las personas sentirse en control era una parte importante de su vida, sabes que esperar, tienes certeza de tus acciones. Hoy Erizo sentía que todo se derrumbaba.

La campista agitada llego a la cabaña de Betsy y enérgicamente comenzó a llamarla —Betsy es una emergencia necesito tu ayuda— Nadie respondía, un cartel apareció mágicamente y decía "Estoy en la cabaña de Alice".

Afortunadamente para Erizo estaba bastante cerca y en menos de un minuto llego a la cabaña de Alice, la puerta estaba entreabierta así que decidió pasar.

—Betsy necesito tu ayuda; ¿Betsy? —repetía Erizo, hasta que escucho la voz de Betsy en un gran sillón giratorio que estaba de espaldas así que no la pudo ver

—tranquila cuéntame que pasa—Afirmo Betsy

—es grave, la he regado y en grande— exclamo vencida Erizo, soportando con su mayor esfuerzo en no soltarse a llorar.

—Bien, pero para poder ayudarte solo cuéntame la verdad, solo la verdad y con lujo de detalles— Exclamo la voz calmada de Betsy, aun sin dejarse ver.

Erizo no aguanto más y comenzó a contar todo, con gran precisión en los detalles, en sus estudios encontró una poción que le daría a su usuario valor, que había tomado ingredientes de la isla y había tomado prestados algunos de los que tenia guardados Betsy en su alacena, que la poción se la dio a escondidas por la noche a Oscar y ahora esta persona ya no era su Oscar, ella quería a su Oscar de regreso— Trataba de explicar mientras se le hacia nudo la garganta.

Claro no conto nada de su interés romántico, ya sería demasiado para su pobre corazón en un solo día.

Eso explica mucho — se expresó Betsy con un tono triste, aun sin dejarse ver.

Betsy estaba desilusionada y su voz lo reflejaba

—Erizo no puedo expresar el pesar de mi fracaso como mentora, pero tranquila el problema de Oscar tiene solución puede tarde unos días pero estará como antes en menos de lo que... —Betsy fue interrumpida por un azote de la puerta.

—Aja, no necesito mas pruebas, ya tenemos a la culpable —Exclamo Susie quien tenía una expresión de odio y satisfacción.

—espera, ¿Qué esta pasando Betsy?— Pregunto una asustada Erizo.

El gran sillón negro se comenzó a girar lentamente mientras una risa malvada se entonaba con mas y mas fuerza. Era Alice quien portaba un esmoquin negro un parche en el ojo y en sus piernas una gatita blanca que no podía ocultar su vergüenza.

—Bienvenido, señor Bond— Anuncio Alice en su rol de villana.

—Lo siento Erizo —exclamo la gatita quien se cubría la cara con su sombrerito de bruja.

Susie se acercó a Erizo, la abrazo y le dio un beso en la mejilla —Erizo estoy tan orgullosa, ese caos fue tan poético— exclamaba orgullosa.

—Ok, lo que sigue — Afirmo seriamente Susie.

— Es culpable, te sentencio a ser quemada en la hoguera —Exclamo Susie, con un simple movimiento de sus dedos Hizo que erizo apareciera amarrada en un poste a la mitad de la sala rodeada de leña lista para hacer una gran fogata.

—Unas ultimas palabras— expreso Susie, quien intentaba prender un encendedor.

Al fondo Alice seguía con su risa malvada.

—Esto no enciende— Susie tiro el encendedor y se fue a otra habitación.

— esto no es gracioso, era solo una poción, pensé que me ibas a ayudar.— gimoteaba Erizo

—Miren encontré mi viejo trincho y mi antorcha— Susie estaba tan feliz.

Estaba por prenderle fuego a la madera cuando el llanto de Erizo la detuvo.

—Joder, niña no dejas que uno se divierta — se quejaba Susie mientras tiraba su trincho favorito y su antorcha y se recostaba en un sillón.

—Alice ya termino, puedes dejar de reír como loca— Le reclamaba Susie a su compañera.

—Solo estoy en papel — Alice le saca la lengua y con su varita toda la sala vuelve a la normalidad.

Betsy abrazo y calmo a la afligida Erizo, al ver que esta se había calmado Susie comenzó a hablar.

—Erizo, estas consciente que eres una aprendiz, si hay pociones fáciles con increíbles resultados, pero esas ya te las estaba proporcionando Betsy, pero otras son muy peligrosas, sabes pudiste matar a Oscar— explicaba Susie de la manera más seria que podía mostrar.

Erizo entro en pánico, y volvió a llorar arrepentida —Dime que no le va a pasar nada por mi culpa— trataba de hablar Erizo entre llantos.

Betsy la abrazo nuevamente, en el tono más maternal posible reconforto a la pobre chica —Tranquila Susie ya se encargo de todo, ayer lo fue a ver y nos conto que estaba bien, ella nos conto que solo estaba un poco nervioso.

—Peroooo— intervino Alice —creemos que la poción estaba defectuosa, ya que afecto a todos los campistas que no tuvieran la suficiente magia, Incluso tuvimos que mandar a Lucy con los yetis unos días en lo que observábamos el problema; tranquila todos se ven bien, pero me gustaría tener a Oscar en observación un par de semanas.

—Muchas gracias— Erizo abrazaba a Susie,

—no estaba consciente de todo lo que pudo haber ocurrido por mi egoísmo— Erizo medio podía expresar.

—Nooo¡¡¡, aléjate me vas a llenar de mocos— gritaba Susie, mientras sus compañeras se reían de ella.

—Nosotras nos encargaremos —Aseguro Susie— pero eso no te salvara de tu castigo, eres aprendiz de bruja y te considero como una de nosotras, así que debes ser castigada.

— Erizo, deberás reponer lo robado, y buscar materiales extra en toda la isla tu sola sin ayuda, buscaras cada ingrediente en todos los lugares que se te indiquen y claro las lecciones de magia serán el doble de intensas, no les contaras nada a los demás, lo menos que queremos ahora es que entren en pánico o te quieran ayudar—Termino de amonestar a Erizo

Susie volteo a ver a Betsy —Erizo es tu aprendiz, y también debes tomar responsabilidad, deberás acompañarla todo el tiempo y asegurarte que cumpla todo al pie de la letra, así que estas libre de toda responsabilidad del campamento hasta que termine el castigo de Erizo.

—Ajammm— interrumpió Alice

—Espero no arrepentirme de esto —Pensó Susie

—Betsy cometiste varios agravios contra Alice así que como parte de tu sentencia acompañaras a Erizo como cualquier compañera campistas, así que bienvenida al campamento de verano —Susie de mala gana dicto la sentencia.

—Ho cierto!! —Exclamo Alice, saco su varita y transformo a Betsy en su yo mas joven. —Te lo mereces— exclamo Alice mientras miraba a su compañera con satisfacción, sabia que su pobre gansito ha sido vengado.

—Vamos compañera de cabaña, tenemos mucho trabajo por delante— Afirmo Betsy resignada, desapareció con Erizo usando su magia.

—Bien todo solucionado, encontramos a la responsable, los campistas están bien, evitamos una nueva demanda —exclamo Susie

—¿En cuanto a Oscar? Pregunto Susie

—Yooo, me encargo de los campistas— Afirmo Alice— Apareciendo 3 clones diferentes de cada consejera del campamento —Por cierto estoy ocupadísima, no me molestes, adiós —desapareció sin dejar que Susie comentara.

Alice reapareció —Por cierto, Oscar es un excelente asistente, llévalo contigo y que te ayude con las labores diarias del campamento, bay— Alice desapareció sin poder dejar hablar a Susie otra vez.

—Susie saco cuentas y comenzó a contar con los dedos, si efectivamente era lo más sencillo por hacer, —bueno tendré que buscarle un bozal a ese pequeño besucón. — Suspiro resignada Susie.