CAPÍTULO DIEZ.

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Al día siguiente, las cosas en el trabajo marcharon bien. Jeonghan parecía estar de bastante buen humor, tanto así, que inclusive ese día todos los modelos parecían sorprendidos de que el diseñador no les gritase por simplemente existir.

Eso por supuesto incluía también a Joshua, quien más que sorprendido, se encontraba confundido y por demás asustado. Aún no acababa de comprender cómo era que su ensayo había terminado con él a horcajadas sobre su jefe dedicándose una apasionada sesión de besos y honestamente no quería detenerse a hablar o pensar acerca de ello aún si el pensamiento invadía su mente a cada segundo.

No sabía que pasaría con Yoon Jeonghan a partir de entonces, y es que el diseñador tampoco había tocado el tema esa mañana, simplemente se había limitado a hacer sus actividades matutinas habituales antes de partir al trabajo. Como si nada hubiese sucedido, aunque Joshua sabía que Jeonghan también pensaba en ello puesto que durante todo el camino su jefe había permanecido con una sonrisa poco habitual dibujada en su rostro.

Aún así, y pese a lo increíblemente emocionante que había resultado aquello, Joshua no deseaba llegar más allá, después de todo conocía los rumores que giraban en torno al diseñador con respecto a sus conquistas y él no deseaba ser parte de un juego en el cual saldría perdiendo, así que lo único en lo que podía pensar era en cómo sería convivir con Yoon a partir de entonces. Le aliviaba un poco pensar que, al menos por esa noche, no tendría que ir a casa del diseñador y que, luego del evento que ya estaba a pocos días, volvería a ser simplemente un asistente como cualquier otro.

Durante el ensayo, Joshua trataba de aplicar lo dicho por Jeonghan el día anterior, incluida aquella mirada provocadora que había desencadenado aquel extraño suceso. Intentaba con todas sus fuerzas de no pensar en eso, pero sabía que fallaba cuando Jeonghan le indicaba que debía comenzar de nuevo.

Finalmente, luego de varias intensas horas de ensayo, la pesada jornada terminó para alivio del novato modelo. Como cada día, todos se despidieron luego de cambiar sus prendas y luego se eso cada quien se iba por su lado.

Joshua por su parte había pensado en lo dicho por su jefe el día anterior acerca de ir a beber algo, y es que ahora que lo pensaba, le hacía falta distraerse un poco luego de tanto trabajo en esos días, así que, pensando también en lo que Junhui le había propuesto antes, se le ocurrió una idea interesante.

Junhui salió de su vestidor con esa tranquilidad que lo caracterizaba, pero en cuanto vio a Joshua esperando por él afuera, una sonrisa divertida se dibujó en sus labios.

—Pero que sorpresa, no esperaba visitas de admiradores el día de hoy. Debo ser afortunado porque este fanático es realmente lindo—dijo el chico aún con esa sonrisa y acercándose más a Joshua.

—Yo… quería saber si…

—Oh, vaya, eres de esos que se quedan sin palabras al verme. No te culpo.

Joshua sonrió avergonzado.—Lo siento. Yo solo… quería saber si aún estaba en pie tu invitación para ir a algún bar cercano…

Las cejas del modelo se levantaron con clara sorpresa ante aquellas palabras, pero su expresión inmediatamente fue sustituida por una nueva sonrisa divertida.

—Estoy sorprendido. Realmente jamás pensé que aceptarías mi invitación.

—¿Por qué?

—Ya sabes, siendo el nuevo pasatiempo de Yoon Jeonghan, suponía que no te dejaría siquiera mirarme a mí a otros modelos fuera del trabajo. Pero ya que eres tú quien me lo pide, supongo que no habrá problema—expresó satisfecho antes de tomar la mano del novato y llevarlo consigo fuera del edificio, no sin antes dedicarle una sonrisa al diseñador quien, con seriedad, los miraba alejarse.

RUNWAY 🖤 YoonHongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora