Hay un dicho, aquel dicho no muchos lo creen, no muchos se atreven a decir que es verdad, pero lo confirmaron esa noche. Los muchachos cenaban en la mesa del Consejo, que de por sí, les correspondía, y los vikingos murmuraban sobre el padre de su ahora jefe, por supuesto que Hipo no era ajeno a esto, golpeo la mesa llamando la atención de la gente, asustando a sus amigos.
~¡Ya callense!
Grito evitando las lágrimas, evitando mostrarse más débil de lo que su tribu lo 'consideraba'. Estaba harto.
~Ustedes perdieron un jefe... Yo perdí a mí padre, al hombre que me enseño todo lo que se ahora. Callense, cierren la boca, porque a mí me duele más que a nadie su partida.
Derramó lágrimas, se sento nuevamente, la gente se quedo callada, dejó de hablar de Estoico, continuaron cenando, menos Hipo. Astrid lo saco del gran salón para abrazarlo, los chicos se les unieron al abrazo, cayeron de rodillas sin seprararse del abrazo. Cada quién vió a Estoico como una figura paterna, de alguna u otra forma aprendieron algo de el que sus padres no les enseñaron, algo así como un tío de no sangre.
Tenían que darle apoyo a Hipo, demostrarle que estaban ahí para él, derramar lágrimas con él. Algo así paso cuando perdió su pierna, según el le dolía y la sentía, su unico alivió fue enterrar algo sobre el pié metálico, Patapez nombro eso como miembro fantasma. Pero si de amistad hablamos, Hipo siempre estubo para ellos, a pesar de todo lo que le hicieron antes, el se quedo ahí, ahora más que nunca les tocaba a ellos asumir el rol de mejores amigos y familia del Abadejo.
~Todo irá bien Hipo..
Acarició el pelo de su prometido, Patapez acariciaba la espalda del castaño, Patán tenía su mano sobre el hombro de su primo, y los gemelos hacían tontadas para animarlo. Pero sus esfuerzos eran en bano, Hipo mentalmente estaba herido, estaba mentalmente inestable, mentalmente por así decirlo, muerto.
~Hipo.
Las caras de los demás relefaron preocupación, el castaño busco el refugio de los brazos de Astrid, en cuando los encontro se acurruco en ellos como si fuera un bebé, los chicos se miraron mutuamente, Hipo abrió los ojos por fin, continuaron haciendo lo que segundos antes hacían, darle su apoyo, Patapez acariciando la espalda del castaño, Astrid abrazandolo y acariciando su cabello, Patán con su mano en el hombro y los gemelos intentando levantarle el ánimo.
Incluso el más fuerte se puede derrumbar, puede caer, puese sentirse inútil.
'Incluso el mejor heroe, el mejor guerrero, caerá. La muerte vendrá, las heridas aparecerán, las lágrimas caerán.'
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𝘾𝙖𝙨𝙩𝙡𝙚 𝙊𝙣 𝙏𝙝𝙚 𝙃𝙞𝙡𝙡.
Fanfictionㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ~Tu nombre es Astrid, ¿no?ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ