FLAWLESS | Oliver Wood

XXI

WHITE CHRISTMAS

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Al día siguiente Lara despertó contenta, llena de energía porque era navidad, la fecha más esperada. Desde pequeña había amado la navidad y valle de Godric, su antiguo hogar, había hecho que cada navidad fuera especial e inolvidable y aunque esta navidad la pasará en su nuevo hogar aún estaba acompañada por sus seres queridos.

Se incorporó lentamente de la cama y mientras se estiraba escuchó un suspiro que venía de atrás. Había alguien acostado en el lado derecho de su cama, cubierto completamente con mantas y ella no lo había notado. Lara entró en pánico y sin tener mucha idea de qué hacer destapó al intruso despacio, rogando mentalmente para que no se despertara.

—Buenos días Lari —murmuró Tonks con los ojos cerrados

—Tonks —dijo Lara entusiasmada— ¿Hace cuánto estás aquí?

—Llegue a medianoche con mamá y papá —dijo Tonks, tirando las mantas a un lado y levantándose de la cama— Supongo que no me has notado por el sueño tan pesado que tienes. Pensaba en darte una sorpresa, pero tú eres la que me ha sorprendido con la carta de ese tal Oliver W

—¿Carta?, Tonks debes estar equivocada, no he recibido ninguna carta de algún Oliver W —arrastró sus dientes sobre el labio inferior mientras disimuladamente escaneaba la habitación en busca del papel— Solo recibo cartas de Leah

—Acaso buscabas esto —dijo Tonks, levantando la almohada en la que hacía segundos descansaba y alzando el papel que por un momento casi cae sobre la cama— Cuéntame sobre eso

—Es solo un chico con el que tal vez salí un par de veces nada más y es por eso que nadie más debe saberlo

—Comprendo —sonrió adormilada, cambiando su color de pelo castaño a su clásico rosa chicle— Imagino que es alguien del equipo de Slytherin, aunque me haría ilusión que tal vez fuera algún Hufflepuff, pero estoy pidiendo

—Es de Gryffindor en realidad —murmuró Lara, bajando la cabeza

—¡Por Merlín!, vaya que me has sorprendido con eso, creía que para este punto no podrías hacerlo —habló Tonks— Mujer pero que cosas te han hecho los gemelos maravilla

—Es el capitán de Gryffindor y Fred y George no tienen que ver con nada de esto —aclaró Lara— Fue tan repentino, se sintió tan natural salir con él y bueno besarnos... han sido dos o tres veces, pero me he sentido más que bien, ha sido muy agradable

—¡Oh, mi pequeña chica!, suenas como si al pensar en él miles de golondrinas cantaran y una colmena de mariposas revolotearan en tu interior

Lara inevitablemente se sonrojo ante sus palabras y temió porque fuese muy evidente que empezaban a nacer sentimientos ms allá de lo que esperaba tener por el león pues nunca imagino que la enganchara tanto, tarde o temprano sería como el resto de los chicos con los que había salido que a la 3 o 4 cita ya la habían terminado aburriendo, pero tan solo imaginarlo le hacía arder el corazón como si estuviera sanando una cortada que llevaba varios días al aire libre.

—Feliz navidad, Tonks —soltó después del repentino silencio creado por ella que se había quedado sin palabras

—Feliz navidad mi chica —Tonks se acercó a su prima y la envolvió en un fraternal abrazo que Lara devolvió de la misma manera

Las chicas en muy pocos unos minutos bajaron a la sala de estar y se encontraron con los adultos en el camino de abajo también. Se posicionaron al rededor del árbol sentados y empezaron con el intercambio de regalos iniciando con Marius que recibió el regalo de su esposa y continuando con Tonks que le entrego su regalo a su madre.