Richard Parker.
Escuché la voz de Margoth y de verdad qué me sorprendió y me causo gracia su rostro, esperando a ver qué iba a decirle y que había sucedido anoche.
— ¿Que hago aquí en tu cama?— estaba analizando si cargaba ropa o no, y le dedique una mirada tan perversa qué pudo pensar cualquier cosa.
Flashback
Al llevarla a mi habitación, le quite la camisa y la ayude a ponerse una mía, verla tan ebria y siendo así, era algo qué es parte que podría acostumbrarme pero ser ella cuando no es ebria me encanta más. Cuando terminé de ayudarla, me levanté para acostarme en el sofá estaba caminando hacia la puerta cuándo esa voz, esa dulce voz que alteraba casi todo y me llenaba.. Si señores, me llenaba Margoth Collins está haciendo lo mejor de conquistarme sin que ella sepa...
— ¿A dónde vas?— sus ojos se entrecerraba pero se notaba que estaba aguantando mi respuesta.
— Collins, dormiré en el sofá para que puedas descansar mejor.
— No me dejes, quédate no hagas lo mismo que va a ser mi padre.— cruzó los brazos y varias lágrimas salieron de su rostro, ver está facción de Margoth es inevitable, es extraña y me causa que no quisiera verla llorar.
— Vale me quedó.— me acerque y me senté al lado de la cama— Pero ¿Porque dices eso de tu padre?
— Ay Richard, me quiere mandar a España
Apreté los dientes, y estaba analizando ésa situación no puede ser..
— ¿Porque?
— Mi carácter, que estoy rebelde y un poco grosera— hizo comillas al final, y volvió a reír— No quiero irme, tengo muchos motivos para quedarme— jugo con sus manos, y bajo la mirada.
Si parecía un tonto viendola, pero era incapaz de dejarla ir no podía no era normal acostumbrarse a alguien en tan poco tiempo, no es normal sentir celos, ir a buscar a esa persona, no era normal nada de ésto, renunciar a tu orgullo o ego por esa persona pero creo que estaba decidido seguirla incluso si esa chica estuviera loca, porque lo está.
— ¿Cuáles son tus motivos Collins?
— El principio eres tú, Parker no me quiero ir quiero enamorarme 24 días de tí— sonrió.
Moví la cabeza varias veces, no podía creer la respuesta pero era buena, diría que fue la mejor respuesta había escuchado, nuestras miradas conectaron y si esos ojos color ámbar me tenían desesperado, me comían desde la primera vez que la Vi, para después cerrar los ojos y quedar profundamente dormida hay señorita estás alcanzando demasiada locura en mi.
Fin del Flashback.
— Umm— mordí mi labio divertido, y le pique el ojo— Estuviste como nunca Collins.
Inmediatamente sus cachetes se pusieron rojos, estaba evitando reír pero de verdad tenía que hacerlo se tapo la cabeza con la almohada y empezó con sus quejas.
— No puede ser, estás cosas pensé que sucedían en los libros.
— En los libros se define más los detalles.
— Imbécil— me lanzó la almohada
Ambos reímos pero es que tan ebria estaba que no puede creer lo que le decía.
— No tranquila, para tu suerte no paso nada.— le di varias palmadas de aliento.
Solo quedamos en silencio en esa cama, pensé que haría un peor escándalo pero de verdad que Collins me sorprende esa chica. Ella se sentó en la cama y estaba temblando, inmediatamente consideré que iba a vomitar y rápido fui a buscar un balde y se lo pase.
— Graci...— No pudo terminar la palabra porque empezo, pero al notar mis ojos se pusieron como platos, estaba vomitando sangre.
— Estás sangrado también, tenemos que ir l médico— le dije poniéndome una camisa rápidamente, ella callada viendo la sangré le quite el balde para ayudarla a levantarse pero se había desmayado.
Por Dios cómo puede pasar esto.
(*)
Estaba de un lado a otro afuera de la habitación, estaba desesperado porque no me habían dado señales de Margoth, estaba muy mal y se encontraba demasiado caliente. Me crucé de brazos, hasta que por fin había llegado el papá, ese señor su rostro se veía peor no podía, cuando lo llame por lo de su hija no lo creyó. Me hizo un breve gesto con la cabeza, y después estiró su mano la acepte
— ¿Y mi hija como está? ¿Que sucedió?— su inquietud era enorme, se notaba que quería llorar no sabía porque querían mandarla lejos pero creo que por parte de eso que dijo Margoth con su discusión fue más que obvia.
— Ella la fui a buscar porque estaba muy mal, me dijo que no quería ir a su casa entonces se quedó conmigo— al decir lo último me miró serio, pero antes que pensará cualquier cosa prosegui— ella se quedó en mi habitación y yo en el sofá, cuando subo en la mañana al verla pensé que iba a vomitar y se fue en sangre.
Se sujeto la cabeza, y sin tanto poder y rezar por ella el doctor salió tenía cara de pocos amigos yo solo quería señales de que fue una farsa alarma y que de verdad no fue nada.
— Señor Collins, su hija ah sufrido una delicada recaída por causa de que no ha querido cumplir para nada con su tratamiento— ambos nos miramos para volver a prestar atención a el doctor, me invadió por un instante el miedo.
— Que podemos hacer doctor— dijo el padre con esperanza que de su hija testaruda hiciera caso.
— Si no cumple con el tratamiento no mucho, puede ponerse peor y en este caso morir.— la frialdad de sus palabras no podían ser peor, luego me observo, y me señaló— Tú ¿Richard? — asentí— Ella quiere hablar contigo.
Me daba un poco de pena, por su padre pero el acepto y me dió una pequeña palmada.
— Vaya jóven, ella tiene más esperanza con usted que conmigo.
Fueron vidrios lanzando a mi dirección y fíjate que marcan..
Holaaa.
Espero disfruten el capítulo por motivos, sentí que está canción era perfecta para esta escena.Jsjsjj buenas sigan en lo que estaban:v
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Dame 24 Días.
Ficção AdolescenteJuro qué no te arrepentirás de un nosotros, serás parte de mi igual que yo para ti incluso no sea nuestro momento.