Dame 24 Días.

Capitulo 16.

Margoth Collins.

Cuando desperté lo único que quería era ver a Richard, era curioso porque cuando quede en shock y luego llegar aquí fué que solo sentía refugio en él.
Si supieran que en esa fiesta, no paso nada con Boris no me interesaba y me alteró demasiado esa chica llamada Bea me comentará de Richard que era suyo, y no podía creerlo lo único que mis pensamientos pudieron quedar fue qué el vino por mi así como en los cuentos, en los libros románticos esos Click. Que hacen que quieras que te sigan pasando, y sientes seguridad hacia me sentía con él. Alguien había abierto la puerta con cuidado, yo estaba concentrada viendo el techo me sentía tan débil, que cualquier cosa me hacía poner mal.

— Vaya Collins como que te gusta estar aquí metida— la voz de Richard hizo qué volteara a observarlo, le sonreí.

— A tí como te gusta coquetear con chicas en el hospital, seguro que muchas ya están locas porque Richard Parker las miré.

  Su mirada era pérdida, pero aún así me pico un ojo, y movió los hombros indiferente.

—  Si supieras que la única chica qué quiero tener más loca eres tú.

— Oh por dios— me tape mi rostro con mucha pena, como puede decir eso— estás equivocado estoy un poco loca por tí

El se acercó más a mí, y me tomo de la mano esa conexión fue tan fácil, nuestros ojos se cruzaron y para creer que en este instante como en las películas salen personas cantando... Era falso..

— ¿Así que, es el momento de que por fin me digas ¿Nos enamoramos en 24 días?

— Pensé que ya estaba hecho, yo ya estoy enamorada de ti Parker— su mirada  cambio en ese rostro tan rudo, alzó una ceja y se acercó a un centímetro de mi boca.

— ¿Ah así?— su nariz estaba tan cerca de la mía— entonces¿Porque no me eh dado mi primer beso con mi chica?

Justo su boca conecto con la mía, era realmente imposible que el era la persona que tenía que haber esperado tanto ese besó fue dulce, lleno de ternura y simplemente Perfecto. ¿Será que Richard? Era eso que me faltaba para completar mi pequeño momento de felicidad, mi pequeña burbuja que flotaba por cada parte, y era imposible explotar, culpo a todos esos que me dijeron que el amor apestaba.

Porque de verdad que no, no apesta.

Sé alejó de mí un poco, y ambos sonreímos, pero de pronto su actitud cambio y se puso serio.

— Margoth, necesito que hagas algo por mí o más bien por tu padre— contesto, y ya sabía por dónde venía todo ésto— Necesito qué cumplas con ese tratamiento de verdad hazlo bueno por los dos.

Lo consideré, y suspiré un poco para que no se cometiera molestias por mi culpa.

— Está bien lo haré.

— ¿En serio?

— Sí.

Nos quedamos callados unos segundos, pero el sonido de su celular interrumpió.

Hola ¿Que pasó?

Miro serio.

¿De verdad? Umm bueno voy para allá te quiero.

Colgó,y no dejo de observarme tomando mi mano y mi curiosidad.

— Es mi hermana, tengo un asunto que resolver sobre mi casa— me depósito un beso en mi frente, y me sonrió— Día 12 estoy enamorado de una chica que su forma de ligar es en un hospital.

Rodeé los ojos antes su chiste pero me causo demasiada gracia que le devolví la sonrisa.

Cuando iba a salir, volvió a girarse a mi.

— Collins ¿Que flores te gustan?.

— Umm los girasoles ¿Porque?

— No solo pregunto, cuídate sol.

¿Sol? Vaya que el siendo romántico puede ser algo extraño.

Pocos minutos después entro mi padre, si vendrán quejas, regaños y muchos afectos explosivos de su parte.

— Papá.

— No hija— alzó ambas manos tranquilamente— Quiero disculparme por nuestra pelea y de verdad qué si no quieres cumplir con tu tratamiento por más que me cueste.

— Papá, si cumpliré con el tratamiento— repetí.

— No te voy a obligar, y duele pero.— se detuvo y me vio— ¿Vas a cumplirlo?— pregunto.

Asentí, el se me acercó y me implantó un beso en la frente dedicándome una gran sonrisa.

— Me alegra cariño, quien te hizo tomar esa decisión.

— Richard Parker— pronuncie con mucha decisión.

— Debería agradecerle.

— Supongo qué sí.

— Voy a avisarle al doctor tú decisión.

Salió de la habitación y me dejó esperando mis ancias.