14

3.8K 480 141
                                        





Minho es un alfa feliz, la Luna le sonríe y muestra su benevolencia enviando a un hermoso omega como Han Jisung para estar a su lado, para amarlo y hacerlo feliz. El alfa está tan emocionado con el inicio de su relación con el omega mayor qué mantuvo una sonrisa tonta en su rostro todo el día, no importó que uno de los clientes fue demasiado grosero y le hizo tomar las medidas de una pared unas diez veces, nada podía arruinar su día.

Al terminar su jornada dio una vuelta por un centro comercial cercano, Jisung saldría un par de horas más tarde que él por lo que decidió ir a comprarle flores y chocolates, el alfa menor es realmente un amante de las clásicas técnicas de cortejo, las cartas, las flores, los pequeños regalos, salidas a comer, tal vez un café por la mañana en fin de semana, una golosina, un beso en la mano o la frente, una caminada agradable por el parque, aquellos dulces y sencillos detalles que enamoran aún más.

Justo como esperaba, tuvo el tiempo suficiente para comprar flores y dulces de sabores frutales. Jisung caminaba algo lejos del edificio de la agencia cuando vio a Minho mirando a su dirección, caminó disimuladamente y trató de ser discreto al notar que el jovencito escondía algo en su espalda.

Tal vez el alfa no calculó bien el tamaño del ramo de flores que compró, porque no podía esconderlo del todo, Jisung reía para sus adentros al verlo tan risueño, todo parece un sueño del que espera no despertar pronto.

—Hola, —dijo Jisung al llegar junto a él, —¿Saliste temprano hoy?

El joven alfa asintió, —te compre un regalo, —informó sonriendo.

Jisung simuló sorpresa elevando un poco las cejas, después sonrió y llevó su mano derecha al cabello oscuro del menor.

—¿Chocolates? —bromeó sonriendo para después señalar que podía ver el ramo de flores

Minho cerró los ojos como reprendiéndose por ser tan indiscreto, regresó su mirada al omega y se acercó rápido para robarle un pequeño beso en los labios que aturdió un poco a este, miró a todos lados algo paranoico, pero se relajó al ver a Minho mostrar el ramo de flores.

—¿Te gustan los lirios? —preguntaba el joven Lee dejando ver el lindo ramo de lirios blancos.

—Me gustas más tú —respondió con atrevimiento, la valentía para decir tal declaración se fue al ver la reacción tan honesta del joven alfa.

Minho se sintió de pronto algo tímido, sus mejillas se sentían calientitas dejando ver un leve color cereza en ellas, tuvo que desviar la mirada unos segundos conteniendo las ganas que sentía de besar a Jisung sin contenerse, de llevarlo a su departamento y embriagarlo con su aroma, besarle el cuerpo entero.

—Hyung, a veces es bastante atrevido, —comentó aún sin mirar a Jisung que no estaba muy tranquilo, no sabía de donde había sacado tal pensamiento solo salió de sus labios y ya, pero no se arrepiente, la reacción de Minho la ha grabado perfectamente en su memoria.

Minho recuperó su postura y entregó a Jisung el ramo de flores, también se acercó a dejar un beso en la mejilla de este.

Caminaron un rato por el parque hasta llegar a un supermercado donde compraron lo necesario para preparar la cena juntos.

Jisung dijo que no podría quedarse por mucho, porque debía volver a casa y hablar con sus padres.

Minho le da ánimo, también le ofreció acompañarlo para que no estuviera solo frente a sus padres al momento de decir algo tan importante para ellos como el hecho de que Jisung ahora tiene un alfa.

❥ Treinta Y Dos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora