Capítulo 2.

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Stiles.

Como decía anteriormente, planeaba arruinar mi boda y largarme de este lugar, pero no quería abandonar a Isaac y Liam. Planeaba llevarlos conmigo. Aún faltaban detalles que debía arreglar, quizá tomaríamos un vuelo o camión a algún otro estado lejos de Nueva York.

Comencé a plantearles la idea a los dos Omegas mencionados, probablemente comenzaríamos buscando trabajo al llegar a nuestro destino indefinido. Pues teníamos que trabajar para vivir y dudo mucho que mis padres me fueran a mantener después de "defraudarlos como Omega". Pero no podían culparme, nadie soportaría vivir sometido.

- Vámonos de aquí... Lejos, dónde nadie pueda encontrarnos. - dije suspirando mirando el atardecer mientras bebía una cerveza.

- Soy huérfano, abusaron de mi, no terminé siquiera la preparatoria y no he conocido el verdadero amor. Pero los tengo a ustedes. - Dijo Liam mientras terminaba su cerveza también.

- Mi padre me golpea, mi madre nos abandonó, soy pobre y probablemente lo que ningún Alfa desea. - dijo Isaac con tristeza, el no tomaba alcohol, el sabía el efecto que este tenía en su padre.

- Entonces vámonos, el día de mi boda. Arruinaré todo como declaración de guerra a mi padre. No seré su maldito perro faldero. ¿Están dentro?. - pregunté inspirado.

- Definitivamente. - Musitó Isaac.

- Por supuesto, cualquier cosa es mejor a este basurero. - Dijo Liam mientras reía.

Faltaban unos días para mi boda, mi padre me tenía listo un traje de boda blanco... Era horrible en mi opinión, así que fui con un amigo que era diseñador, le dije que necesitaba que en el momento en que fuera a decir "acepto" el traje de volviera pedazos y revelase algo más provocativo.

Yo iba a ser el centro de atención, yo quería eso. Por primera vez todo gustaría en torno a mi y en como me burlé de ese maldito Alfa enfermo. Pero debía arreglar unas cosas antes, específicamente con los bastardos que me golpearon en mi primer día de entrenamiento.

Fui a comprar un bate de baseball, pero no de madera como los anteriores... Iba a marcar historia y lo iba a hacer excepcionalmente, así que compré uno de titanio. Esos malditos la iban a pasar mal. Desafortunadamente creí que lo haría el día de mi boda pero las cosas se adelantaron.

Mientras guardaba el bate en el casillero varios de esos idiotas se acercaron a mi, uno me apretó el culo y otro me lamió el cuello. Me dijo "Así que te casas mañana eh... Deberíamos adelantar tu despedida de soltero y estrenarte". - Claramente no lo iba a permitir por lo cual le arañé la cara.

Entonces me encerraron en el casillero, quien les lideraba les pidió a sus amigos que vigilaran las puertas y que cada quien tendría su turno. Por suerte dejé el bate dentro del casillero sin que ellos se dieran cuenta, así que lo tomé. Comencé a golpear la puerta con el bate hasta romper el seguro.

La puerta se abrió con fuerza, dejándole ver a esos alfas un Omega enojado. Ahora imaginen el pavor que sentían. Un Omega entrenado, furioso y con un bate metálico. Ellos sabían que esto no iba a resultar bien. Y no se equivocaban.

Al que orquestaba todo este asunto lo golpeé en la cabeza, a los demás en el estómago, a otros les rompí una pierna, un brazo o la nariz. Mi premio fue llevarme uno de los colmillos del Alfa que planeo todo el asunto.

Al llegar a casa mi padre me gritó como siempre, le expliqué la situación y por primera vez comprendió. Supongo que no quería que me enojase y mandara a la mierda la boda. Pero esa decisión la había tomado ya desde lo de Liam.

𝐔𝐧 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚 𝐋𝐢𝐛𝐫𝐞 | 𝐒𝐭𝐞𝐫𝐞𝐤 𝐀𝐔 |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora