{ 11 }

587 54 14
                                    

Third Reich miró hacia la persona que le agarraba, sorprendido

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Third Reich miró hacia la persona que le agarraba, sorprendido. No se esperaba que hiciera eso, y menos tan inesperadamente.

—Te voy a matar, maldito.—Dijo el italiano.

Italia Fascista agarró también a su hijo bruscamente por el brazo, mientras el menor protestaba porque no sabía qué pasaba ni por qué su padre parecía tan enfadado.

Third Reich estaba exactamente preguntándose lo mismo. ¿Qué quería su amigo, y por qué se mostraba tan molesto y enfurecido?

El italiano mayor no respondió a ninguna de las preguntas de ninguno de los otros dos. No habló hasta que no llegó a una pared libre de gente y alejada de la mesa de juntas de ONU.

Les acorraló a los dos en la pared evitando así que pudiesen escapar. Le lanzó una mirada asesina a ambos, haciendo que sintieran aún más miedo.

Third Reich miró de reojo a Italia, para ver si él tenía alguna idea de qué ocurría, pero se encontró con otra cara asustada.

Third Reich sintió que se iba a desmayar al darse cuenta de una cosa. ¿Y si Italia Fascista había descubierto aquello que tanto se había preocupado por ocultar? ¿Quién se lo había contado?

¿Italia, acaso? Era el único que lo sabía. Al menos que él supiera. Miró con algo de odio a Italia. ¿Por qué había dicho aquello? Él había mantenido su parte del trato y no le había contado a Italia Fascista que Italia había estado saliendo con Argentina durante casi un año.

De todos modos, el alemán no tenía ningún problema en contar él también el secreto de Italia si este no había cumplido con lo que dijo.

Italia Fascista trató de calmarse respirando hondo, pero se notaba que seguía furioso.

—¿No creéis que ya va siendo hora de que me lo contéis?—Preguntó el padre de Italia. Third Reich se puso blanco. Sí, definitivamente, Italia Fascista lo sabía. Quizás no todo, pero lo sabía.

Su mente comenzó a imaginar miles de formas de las que su amigo y aliado le mataría.

Miró a Italia. Él también parecía muy nervioso, pero no tanto como el alemán.

—¿Contarte el qué?—Preguntó Third Reich, tratando de fingir que en realidad nunca había pasado nada y que el mayor se estaba equivocando. Italia Fascista alzó una ceja con desconfianza.

—Lo de hace dos años. Y vosotros dos sabéis perfectamente a lo que me refiero.—Respondió el padre de Italia. Le dirigió una mirada asesina a Third Reich, esperando que por fin confesara. El alemán ya no pudo contenerse y se giró hacia Italia, molesto.

—¡¿Por qué se lo contaste?! ¡Yo no dije nada a nadie sobre lo de Argentina y tú! —Protestó Third Reich. Italia se puso pálido al oír eso último. Quería mandarle callar para que no se entendiera lo que decía, pero fue muy tarde. Italia Fascista miró a su hijo, extrañado.

—¿Qué pinta ese argentino aquí?

—¡Italia y Argentina eran pareja hasta hace unos meses!—Confesó finalmente Third Reich. Desgraciadamente, lo dijo demasiado alto, y por ello no sólo lo oyó el padre de Italia, sino que también muchos otros países de la junta. El italiano menor se puso muy rojo y quiso matar al alemán.

Italia Fascista asesinó a su hijo con la mirada.

—Luego me explicarás eso. Pero ahora quiero saber toda la verdad de lo que pasó hace dos años.—Habló el italiano mayor, mientras el menor veía como Third Reich se volvía a poner pálido.

Se notaba de lejos que tenía miedo.

—Eso... Fue un tontería, no tiene nada de especial... C-casi ni me acuerdo...—Mintió el nazi, deseando salir de allí cuanto antes. Italia Fascista le dirigió una mirada de desconfianza, mientras  Italia se mantenía quieto y callado.

—¿Seguro? Por lo que me han contado no fue sólo una tontería.—Dijo el fascista, mientras incomodaba aún más a su aliado.

—Papá, no pasó nada...—Insistió su hijo, tratando de que su padre le creyera, pues no le parecía que dar explicaciones sobre aquel tema fuera lo más apetecible ni para él ni para Third Reich.

Aquel comentario sólo enfadó más a Italia Fascista.

—¡¿No?! Contadme lo que pasó. Contádmelo todo. Confesad. No os esforcéis por fingir que no pasó nada o que no os acordáis. Sé perfectamente lo que ocurrió y sólo estoy pidiendo una simple explicación. Decir la verdad no es tan difícil. Vamos. —Sonrió, mostrando sus afilados dientes.

Italia y Third Reich se miraron durante varios segundos, en silencio, sin saber qué decir ahora o cómo explicarle aquello a Italia Fascista.

Finalmente, el italiano menor suspiró, temblando de miedo.

—E-está bien... Lo admito. —Hizo una pausa, comenzando a sonrojarse demasiado.—R-Reich y yo... Fuimos pareja hace cinco años.

Italia Fascista sonrió maléficamente y miró con ojos de loco a su aliado.

—Y esa es la razón por la que te mataré, aliado.—Third Reich se asustó. Italia Fascista en sus ataques de ira podía llegar a realizar una verdadera masacre.

El alemán vio cómo Italia Fascista agarraba aún más fuerte la navaja que llevaba en el bolsillo de su abrigo.

—Espera—pidió Third Reich, sabiendo que el italiano mayor era perfectamente capaz de matarlo allí mismo, delante de todo el mundo.—¿Y si te doy una explicación?

—La espero—respondió su aliado soltando un poco su navaja, sin agarrarla ahora tan fuerte. Third Reich se quedó callado, pensando en alguna explicación que sonara razonable, pero no encontraba ninguna.

Pasaron diez segundos de silencio incómodo, hasta que Third Reich sonrió con nervios y falsamente para hablar.

—Eh... Bueno... ¿Q-qué te voy a d-decir? Nos e-enamoramos y... Eso—explicó el alemán lo mejor que pudo.

Italia Fascista volvió sonreír mostrando sus dientes. Ninguno de los otros dos había visto sonrisa que diera más miedo. El italiano mayor parecía no ser capaz de pensar en esos momentos.

Sólo hizo un comentario antes de marcharse.

—Blinda tu puerta esta noche.

—Blinda tu puerta esta noche

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
A chiste ❀ ~ España × Italia ✔︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora