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Marinette y Adrien tomados de las manos iban entrando al salón de clases, algo llorosos pues acababan de pelear con un akumatizado que casi desapareció a Chat Noir por unos instantes.

Solo fue cuestión de segundos para que Lady Bug realmente enojada lo derrotará.

Aún así después de darse cuenta que lo pudo haber perdido, se puso a llorar tendidamente en el abrazo de su amado, mientras regresaban a la escuela a seguir con su jornada.

En cuanto pasaron la puerta, el profesor que les estaba iba a impartir la clase señaló a la ojiazul.

-Dupain, a la dirección. Ahora.

Marinette miró con algo de espanto aquello resignandose y despidiéndose de su amado con un beso al aire.

El chico con la misma expresión en su rostro, no pudo quedarse callado.

-¿Por qué tiene que ir con el director? No hizo nada malo.

Su azabache aún no se recuperaba de lo sucedido minutos antes, no iba a estar bien.

-Preguntas al final de la clase.

Su ceño se frunció de enojo al ver como el profesor no quería darle respuestas.

Bien, si quería respuestas, era momento de ir a buscarlas.

Iba a ser que lo manden con el director. ¡Iba a portarse mal!

Teniendo su plan ya en mente, se levantó de su asiento y salió del salón mientras el maestro seguía hablando.

Seguro con eso ya sería mandado con el director.

Y esperando a que la clase terminara y sus compañeros salieran, tomó del brazo a Nino que iba saliendo y le preguntó.

-¿El maestro se enojó porque me salí? ¿Sabes si ya me esta esperando el director?

El de gorra dio la negativa y le respondió.

-Nathaniel había pedido permiso previamente, y como el profesor no estaba viendo, pensó que tu eras el chico al que dejó salir. Por cierto, Nathaniel te odia.

Adrien se maldijo en sus adentros, sabiendo que era momento de ponerse creativos.
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El portero entraba a los baños con su mandíbula en el suelo, al ver en el estado en el que se encontraban.

-¿Quién hizo esto?

Dijo mirando como los espejos, los pisos y las puertas de las cápsulas, estaban tapizadas de papel de baño extrañamente limpio.

El Agreste salió de un baño y sonrió lanzándo un papel al aire.

-Yo lo hice.

El portero miró a todos lados, revisando si no había nadie dentro de las cápsulas y abrió la boca.

-Ya enserio ¿Quién lo hizo?

Dijo preguntado a los que estaban en el pasillo de afuera, haciendo que Adrien mirara aquello con enojo.

-Yo lo hice. El papel está limpio porque me dio asco agarrar de los sucios.

El portero rodó los ojos y se fue directamente a checar las cámaras de seguridad, provocándole una úlcera gástrica a Adrien al después enterarse que por ese día habían fallado.

¿Por qué no podía ser malo?
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Adrien estaba dándose por vencido.

Solo quería saber qué estaba sucediendo con Marinette.

¿Por qué el universo no se apiadaba de ese rubio enamorado que quería saber de su Lady?

Con una sonrisa miró como Mendeleiev iba entrando con su normal cara de enojo, haciendo que las esperanzas de Adrien revivieran.

Buscó algo en su mochila y victorioso lo tomó en sus manos.

-Radiante, despreocupado, de ensueño, Adrien, la fragancia.

Y sin más comenzó a esparcir su aclamada fragancia en todo el salón, sorprendiendose de que la maestra no se mirara un mínimo de enojada.

-¿Por qué no se enoja?

La mujer solamente se sentó en su escritorio y sin mirarlo le contestó.

-Kim huele feo, además, este no es el laboratorio de química, es un salón normal en el cual no hay problema de no seguir protocolos.

Adrien miró con furia pura como la profesora mas amargada de la escuela se mostraba más compasiva de lo normal y salió corriendo del salón en dirección a la oficina del director sin importarle haber sido o no mandado.

-¡Marinette!

La puerta fue abierta de golpe por el rubio, que miró atónito como el director Damocles y Marinette ambos con controles en mano, jugaban videojuegos en la computadora de la oficina, practicando para el torneo.

-¡Agh Adrien, me hiciste perder!

Se quejó Marinette con enojo mientras el director festejaba.

-Generalmente lo regañaría por entrar sin tocar la puerta, pero esta vez se lo agradezco. Es más, queda perdonado de lo que lo haya traído aquí.

El rubio pasmado finalmente habló.

-Espera ¿No te regañaron?

Preguntó roboticamente mientras ella negó con los ojos en la pantalla.

-Para nada, al contrario, dijo que si gano 20 rounds seguidos, puedo llevar a 5 personas conmigo. Y tu, ¿por qué estás aquí?

-Nada serio.

Adrien simplemente dio un suspiro aliviado, feliz de haber tenido el impulso de ir, porque el siguiente plan era incendiar la escuela.

Continuara...

Oigan, apenas me cuenta que en mi país cambiaron el horario AJJAJAJAJ.

No si sea en todo el mundo, pero por lo menos en México así fue y yo ni en cuenta.

En fin, disfruten.

A La Medida (Abril Mes Del Adrinette)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora