Capítulo 10: Autoestima

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El avión a esas alturas ya había cruzado una buena parte entre los continentes de América y Europa. La gran tecnología del jet daba muchas ventajas, por lo que Los Caídos lograron darse cuenta de en qué país parecían estar una de las instalaciones de La Agencia.

—¿Dónde estamos? —preguntó Yasser, que se había dignado finalmente a salir de su habitación, más no le dedicó la mirada a nadie y se mantuvo silencioso como siempre, cosa que extrañó un poco más a todos, sobre todo a Arasu, que no podía creer que era la misma persona que quiso matarlo hace tan sólo unas horas.

—Estamos en Suiza —respondió Hyrik con tranquilidad—. Nadie espera que una agencia clandestina que haga tantas cosas cuestionables en las sombras esté en Suiza, todos esperan que sea en Estados Unidos o Rusia —se tocó la cabeza varias veces con su dedo índice—. Los Fundadores pensaron bastante bien en donde dejar las instalaciones, y aunque sospechen sobre que ahí estamos, cosa que pocos saben, no nos van a encontrar fácilmente.

Hyrik sonaba bastante orgulloso de eso. El hecho de saber sobre La Agencia y un poco sobre sus empleadores era interesante, importante el hecho de saber quiénes eran los que suministran todo eso.

—Yo la hubiera construido en Corrientes —comentó Castel.

—¿Dónde? —preguntó Himeya.

—¿Ven? Nadie sabe dónde queda —concluyó para luego llamar a Nathaniel, quien estaba rezando por un poco de sueño, y que se vio interrumpido—. ¿De verdad te comiste todo de golpe?

—¿Fuiste vagabundo, verdad? —preguntó Nathaniel tras un bostezo, a lo que Castel asintió aunque prefiere decir que se independizó de sus padres—. Entonces sabes lo horrible que es comer de la basura por tanto tiempo... Quiero disfrutar de la comida, porque no sé si volveré a tener que comer de eso.

—No tienes idea del hambre que tengo ahora —susurró Castel mientras se estiraba un poco, lamentando que el refrigerador estuviera vacío, la fruta que le había robado a Ronin apenas fueron un aperitivo.

El más joven del grupo analizó con la mirada a cada uno de los miembros de la Iniciativa. De izquierda a derecha, Hyrik el jefe. Se veía más estoico de lo normal. Todavía se preguntaba, ¿qué se oculta debajo de tantas ropas que literalmente no dejan nada de piel visible? Era algo que lo intrigaba... Sólo sabía su nombre, Hyrik Wyx y que es un doctor de La Agencia.

Luego estaba Arasu. Vestía con una sudadera oscura y su cabello negro atado como una cola de caballo. Se mantenía serio y miraba a todos, analizándolos.

En tercer lugar Himeya, el de la cicatriz . Su primera impresión, y aunque no lo confirmaba, le hacía ver que por el momento era el más poderoso... «Bueno, cualquiera capaz de disparar rayos láser es alguien de temer». Curioso también, debía poseer un gran poder además demostró que puede ser un buen líder y no era amargado como Krieg.

Y hablando del Diablo, venía ahora el anteriormente mencionado. Durante todo este tiempo no se ha quitado el pasamontañas, ese extraño pasamontañas que tiene una gran cantidad de costuras de un lado a otro. Le hace recordar a criaturas relacionadas con el terror... Siempre había un carnicero que tenía costuras en la piel. Un lado del pasamontañas era negro, y parece ser el original, mientras que el otro era rojo. Lucía bastante perturbado, no miraba a nadie directamente. ¿Qué fue lo que pasó con él y por qué tuvo esa crisis?, pensó el rubio.

Por último estaba Nathaniel, uno de los que mejor se llevaba. Muy pálido, pero amante del negro como Hyrik y Krieg. Es un punto intermedio: No es tan amargado como Krieg, pero no lo suficientemente sociable como lo son Hyrik o Himeya.

—Bienvenidos a La Agencia —dijo Hyrik. Fue a la cabina del piloto y empezó a descender a toda velocidad. Un gran bosque, colosal y frondoso, todos vieron que había una parte despejada de menos de 500 metros. El Agente maniobró el jet y prácticamente hizo que levitara. Aterrizaron tranquilamente. Los 500 metros en los que aterrizó la Iniciativa se mantuvieron por varios segundos y empezó a hablar:

Iniciativa Caídos: Ciber-Amenaza™Donde viven las historias. Descúbrelo ahora