Tres sesiones de terapia después, Grace nos pidió no ir por primera vez, Sam de algún modo estaba contenta porque pensaba que tenía algo que ver con el chico Greg y, para ser honestos, me alegraba la idea de que estuviera alegre. Oh, por cierto, su canción favorita era Believe de Cher.
Sin embargo, no todo era como estábamos esperando, traté de marcarle al celular un par de veces a Grace para ver cómo estaba, pero no obtenía respuesta, sabíamos perfectamente qué días le tocaba terapia, así que decidimos ir sin avisar a una de sus sesiones.
Sam y yo arribamos, evitando a la mamá de Grace y subiendo a oncología por el otro lado, entonces la vimos, sí estaba con Greg esperando con ella, pero había algo extraño, no se veía muy sonriente y traía una sudadera con gorra. En un momento le pidió a Greg que la esperara para ir al baño. Sam me hizo señas de que la seguiría porque no se veía precisamente que estuviera bien.
Esperé unos minutos y Greg también, sin embargo, pasó un buen rato, los nombraron que podían pasar, pero Greg no lo hizo sin ella, entonces me acerqué a donde Sam había ido para ver si todo estaba bien. Caminé por los pasillos del hospital que se doblaban en una esquina cerrada, estaban los baños y, más allá, una rampa para empleados, se escuchaban voces ahí.
-Sam. ¡Mírame!
-No te ves mal y es normal, es lo que pasa, son medicamentos muy fuertes. Pero cuando termina el tratamiento, vuelve a crecer.
-¡No mientas! No voy a volver ahí, no así.
-Tienes que. Es tu tratamiento.
-No quiero que me vea así, pude cubrirme un poco con la sudadera, pero con esto no puedo.
-Comprenderá, está en tratamiento igual que tú.
-Él todavía tiene todo su cabello.
Sentí una presión en el pecho y falta de aire en los pulmones, me acerqué caminando hacia ellas.
-Grace... -dije.
La chica se echó para atrás para que no la viera.
-Vete, Jace. Por favor -me pidió-. No quiero que me veas así.
-Tranquila -quise calmarla-. No pasa nada.
-Sí, sí pasa. ¿Verdad, Sam?
-No, Grace -negó Sam.
Grace me abrazó aún con la sudadera puesta.
-No quiero ser fea -dijo.
-Tú no puedes ser fea -le respondí.
Sam se veía un poco desanimada, como si quisiera hacer algo, pero no pudiese. La miré sonriendo, tratando de alegrarla, me sonrió a medias de vuelta.
-¿Prometes que serás sincero? -preguntó Grace.
-Promesa.
Grace se quitó la sudadera y en su cabeza, en partes de su bonito cabello, hacían falta espacios, mechones que se habían caído y que dejaban verle la piel. También sus cejas, que siempre tenía cuidadas, estaban faltas en algunos lugares.
-No te ves mal -lo dije.
-¿Lo dices en serio? -preguntó Grace.
-Sí -contesté.
-¿Ves? -dijo Sam-. Te dije.
Sam se quitó su gorra y le habló a Grace.
-Mira, estos cortes son buenos porque no hay mucho de donde perder cabello, y si cae, siempre puedes raparlo y se ve bien. Te lo digo yo -sonrió, Grace lo hizo de vuelta.
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Preguntas Frecuentes
Teen FictionEste no es tu típico cliché de friends to lovers, en realidad Sam y yo no podríamos ser más diferentes y solo somos amigos por esto del Apocalipsis Zombi. ¡De verdad! Nada ocurrirá entre nosotros. Como decía, este es mi último año de preparatoria...