Preguntas Frecuentes

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Y así es como llegamos a la recta final del semestre, los últimos días. Llegué temprano a la escuela con un mensaje de Chris que decía que tenía que contarnos algo, se sentía la ausencia de Becca, pero de seguro, ella estaba mejor. Como siempre, Sam llegó, nos distrajimos en las clases y, siguiendo la rutina, platicamos algo preocupados sobre el mensaje de Chris.

Finalmente, llegó el receso, Chris entró a nuestro salón con una cara de pocos amigos y esperamos a que salieran todos para platicar.

-¿Qué pasa, brother? -le pregunté.

-No, ya no es nada, no te preocupes -dijo Chris, esperando a que saliera la última chica del salón.

Sam lo notó sospechoso, así que me hizo una seña de que saldría para que pudiera hablar con él a solas. Ella fingió que iría al baño y entonces Chris se sentó en el escritorio del profesor con la cabeza agachada, me le acerqué.

-Mis papás me van a sacar de la escuela -dijo Chris deprimido.

-¿Qué? ¿Por qué? Estamos por terminar el semestre -pregunté.

-Tuve un problema con ellos, en especial con mi papá, digamos que no concordamos en algunas cosas, me mandará a vivir con mis abuelos a Texas.

Chris casi se pone a llorar cuando entró Sam al salón, no me tomó mucho entender de qué trataba el asunto.

-¿Qué tienes, Chris? -preguntó Sam.

-No, no es nada, Sam -dijo Chris.

Sam lo abrazó y él se soltó a llorar, me molestaba bastante que la gente aún no pudiera utilizar dos gramos de su cerebro y aceptar que cada quien es dueño de lo que hace y ama. Pero como se suponía que ni Sam ni yo sabíamos nada de eso, solo me uní al abrazo.

-Vamos a comer. ¿Sí? -dijo Chris.

Sam y yo asentimos. Chris salió primero y luego nosotros, Sam me tomó del brazo, tampoco se veía muy animada.

-¿Qué pasó? -me susurró Sam al oído.

-El papá de Chris es un imbécil y lo va a sacar de la escuela.

-Mierda.

-Sí.

Bajamos a la cafetería y nos sentamos en el lugar de siempre.

-Pensándolo bien, vámonos de aquí -dijo Chris.

-¿Por qué...? -pregunté, cuando una voz un tanto estúpida me interrumpió.

-Miren, el marica sigue aquí -dijo George... El examante de Chris, acompañado de su novia, Verónica.

Sam y yo nos miramos extrañados.

-Lárgate, imbécil -dijo Chris.

-No me digas qué hacer, mariposita -dijo George, humillando a Chris.

Me quise parar para pelear, pero Sam me detuvo.

-Oigan todos, por si alguien está en extrema necesidad, aquí nuestro amigo Chris estará más que dispuesto en hacerles un blowjob sin problemas. ¿No? -gritó George a todos en la cafetería.

-Vámonos -le dijo Verónica-. Ya déjalo.

-Pero si nos estamos divirtiendo. ¿No? -le preguntó George a Chris, burlándose.

De nuevo me quise parar, pero Sam me detuvo apretándome la mano. De pronto, Chris se levantó molesto y golpeó en la cara a George. Al parecer, había mucho que no sabía y entonces recordé al principio del año cuando Becca mencionó algo respecto a los dos, al parecer la pelea llevaba un buen tiempo cocinándose.