Recuerdos de otra vida

Recuerdo #19

Al final las cosas no eran tan complicadas como parecían. Más que algo complejo y enredoso, su trabajo iba a ser ocupado y absorberle mucho tiempo... Y estaba bien.

Irasue: ¿Cuánto tiempo necesitas para volver aquí?

Sesshomaru: (Molesto) No pienso tomar el cargo de todas tus empresas.

Irasue: Tendrás que hacerlo. He estado en esto por cinco años. No puedo estar al mando por tanto tiempo. Sería extraño para la gente común.

Sesshomaru: Sólo usa otro color de cabello, despide a todos y cámbiate el nombre.

Irasue: No es mala idea. Pero... Quiero vacaciones... Quiero viajar por el mundo y ver cómo ha cambiado. Sabes que lo hago cuatro veces por siglo.

Sesshomaru: Toma tus vacaciones y luego vuelve aquí.

Irasue: ¿Por qué eres tan holgazán?

Sesshomaru: (Gruñe) No lo soy.

Irasue: Pelafustán... Sólo estás encerrado y verdaderamente, además de estar llorando frente a ese altar, no sé en qué más inviertes tu tiempo.

Sesshomaru: Y no te importa.

Irasue: (Suspira) Creo que sí necesitas la muñeca inflable.

Sesshomaru: (Molesto) ¿Podrías dejar de hablar de tus aparatos modernos?

¿En verdad?... Tal parecía que no comprendía del todo a qué se refería... Y esto de verdad comenzaba a tornarse divertido... ¡¡Y es que Sesshomaru es tan fácil de molestar!!

Irasue: Te conviene más una muñeca de silicona de tamaño real.

Sesshomaru permanece en silencio, analizando las palabras de su madre... ¿Muñecas de tamaño real?

¡¡Maldición!! ¡¡Ahora entiende a lo que ella se refiere!! ¡¡Mujer enferma y corrompida!!... ¿Y por qué su madre sabía eso?

Sesshomaru: (Se pone de pie) ¡¡Deja de hablar estupideces!! No necesito esa porquería.

Irasue: (Ve sus uñas) ¿Por qué no consigues una novia mientras tanto? Puedes hacerla sufrir unos años.

Sin decir nada más, Sesshomaru camina hacia la puerta... Tal parece que ya piensa marcharse.

Irasue: ¡Sesshomaru!... ¡¡Era broma!!... ¡No aguantas nada!

Sesshomaru: (Furioso) Sabes que no me agradan tus bromas de mal gusto.

Irasue: ¡¡Sessh...!! (Él cierra la puerta).

Sabe que el sentido del humor de su madre es por de más cruel. Sin embargo, ella sabe bien lo mucho que le duele esta situación, y que lo hiciera a propósito le enfurecía de sobremanera... Porque de ninguna manera podría tocar a un objeto inanimado con esa intención, mucho menos tener a su lado a una mujer que no fuera Rin... Y ella lo sabía.

Con disgusto total camina hacia el ascensor... Para colmo de males, cuando la puerta se abre es Nazuna quien sale de allí... Voltea a ver hacia otro lado ignorándola completamente.

Afortunadamente desciende solo... Por fortuna nadie interrumpe sus pensamientos... Sus recuerdos de aquél tiempo pasado.

---Recuerdo #19---

Una semana demoraron ese par de indeseables en el palacio de su madre, sin que el hecho de que Meisho le siguiera un par de veces fuera impedimento para buscar a Rin... Al fin la estúpida no tenía idea de a dónde iba, por qué se ausentaba ni a quien buscaba.