✨ENCANTADOR✨*draron*

Secreto II

Unieron sus labios en un beso lento y cariñoso, deseando detener el tiempo para que durara eternamente.

Después de varios minutos se separaron y se observaron fijamente.

-¿y que se supone que debemos hacer ahora?- habló Ron mientras se estremecía con los ojos grises que le miraban

-¿qué quieres hacer tu?

-no lo sé, tal vez ¿conocerte mejor?

-Tal vez yo también quiera eso- se acercó y le dio un pequeño beso en los labios- ¿quieres ser mi novio?- preguntó finalmente el rubio.

-yo...-se quedó mudo intentando buscar las palabras adecuadas para aceptar la propuesta.

-entiendo si no quieres aceptarlo, tampoco quiero presionarte ni nada por el estilo, si quieres podrías...

Lo labios contrarios se unieron con los suyos impidiendo que siguiera hablando.

-¿esa respuesta es suficiente para ti?

-más que suficiente- sonrió, le beso nuevamente y terminó acariciando su mejilla.

Ron estiro los brazos como si de un bebé se tratase, pidiendo un poco de afecto por parte del rubio quien estaba perplejo ante las acciones del delgado chico.

-jaja ja-¿qué haces?

-¿no quieres darle cariño a tu novio?- hizo un puchero y cruzo los brazos mientras apartaba la mirada de los ojos grises que lo miraban incrédulos.

-¿es enserio?- el rubio Abrió los ojos sorprendido por las reacciones inesperadas.

-no, no lo es- habló firme y se levantó indignado dándole la espalda, con la intención de irse de allí.

-espera- corrió intentando alcanzar al contrario quién apresuraba su paso, cuando por fin lo acorralo le abrazo la cintura con fuerza y apoyo su rostro en el hombro de este.

-puedes pedirme todo el cariño que quieras- susurró en el oído del pelirrojo, quién se estremeció al escuchar la grave voz tan cerca de él, decidió girarse para poder verle, aun manteniendo un puchero en sus labios.

Las miradas se intensificaron y sus deseos de volver a unir sus labios se volvieron incontrolables, querían besarse hasta quedar exhaustos, con los labios hinchados como prueba de la atracción que se tenían, del deseo que les inundaba las venas.

era un beso pasional, lento como hasta ahora habían sido todos sus besos, el rubio levantó al pelirrojo del suelo tomando sus piernas para que rodearan su cintura, el otro se aferraba con fuerza al cuello del Slytherin, intentando acercarse más a él, como si sus cuerpos necesitaran fundirse, convertirse en uno solo.

Ron podría haber mandado todo a la mierda en ese momento y pedirle de una vez por todas a el rubio que le miraba con deseo que lo tomara, que se unieran, que aunque aún no se hubiesen enamorado que fingieran amarse por ese momento, solo para calmar el deseo que le hacía sentir que le hervía la sangre, aún con la fría brisa de la noche.

El beso se intensificaba cada vez más, los roces entre ellos también aumentaban y varios gemidos salían de sus labios, pedían más contacto con la piel ajena, se nublaban sus ojos y apenas podían visibilizar que era lo que hacían.

Negar que se deseaban seria como negar la existencia misma, necesitaban desesperadamente sentirse el uno al otro, tocarse, solo tener muy claro que no estaban soñando, grabar la piel del otro en sus mentes, su olor, color, forma, querían poder reconocerlo todo.

Entre gemidos del Gryffindor el rubio introducía su mano a través de la camisa de este, intentando tocar todo lo que más podía, suspirando por el contacto con la cálida piel.