✨ENCANTADOR✨*draron*

Amanecer

El sol apareció lentamente, inundando la sala de una segadora luz, qué les hizo despertar de su profundo sueño.

- Buenos días- susurró el rubio con una sonrisa en su rostro

-B..bu... buenos días- se sonrojó el pelirrojo al notar la extraña escena en la que se encontraban.

El rubio dio un pequeño beso en los labios del pelirrojo sintiendo como una calidez le inundaba el cuerpo, se sonrieron mutuamente y se quedaron observándose por unos minutos, hasta que reaccionaron y asustados se vistieron lo más rápido posible, intentando evitar que alguien los encontrara desnudos en la mitad de la biblioteca.

Salieron apresurados a sus casas pensando en excusas creíbles para explicar por qué no habían pasado la noche en sus habitaciones, ya que era casi imposible que sus amigos no hubiesen notado su ausencia.

Caminaban apresurados por los pasillos rogando porque nadie los viese, se separaron y cada quien tomo un camino diferente para llegar a sus casas.

El Gryffindor llegó a su habitación respirando pesadamente evitando hacer movimientos o sonidos fuertes, se alivió al notar que sus compañeros aun dormían e intentó acomodarse en su cama.

Harry fingía dormir, mientras escuchaba como su amigo volvía a su cama, últimamente actuaba de manera extraña, también sentía que Hermione le estaba ocultando algo aunque no tenía una idea muy clara de que.

Se dirigían al comedor por el desayuno, el día había iniciado "normalmente" según Hermione y Ron, pero Harry estaba confundido, tenía dudas y una sensación de inconformidad que relacionaba con el desaparecimiento de Ron la noche anterior, últimamente el pelirrojo se comportaba de forma inusual, parecía ser más distraído de lo normal y su mirada se perdía fácilmente.

Hermione parecía actuar como si no lo notara y eso le hacía sentirse excluido, ellos escondían algo y él estaba dispuesto a averiguar el misterio que rodeaba a sus amigos

Él Slytherin no había corrido con la misma suerte del pelirrojo y al llegar a su casa, se encontró con Blaise y Pansy esperándolo, ambos con una mirada de intriga y preocupación a la vez.

-¿qué te pasa?- preguntó Pansy preocupada

-no debería importarles, ahora tengo hambre y deberíamos ir a desayunar- intentó dirigirse a la salida apresuradamente

-Malfoy, ni lo pienses- habló Blaise deteniéndolo

-¿qué carajos quieren?- rodó los ojos y se giró hacia ellos

-¿dónde estabas? ¿Haciendo que?- el rubio se sonrojo al recordar todo lo que había hecho con el pelirrojo la noche anterior e intento apartar la mirada con la esperanza de que sus amigos no lo notaran.

-¡¡estabas con el Gryffindor!!- gritó Pansy imaginado el escenario por el sonrojo de su amigo

-¿estabas con el Gryffindor?- Blaise ladeo la cabeza esperando respuestas y observándolo con insistencia.

-¡sí!, estaba con el maldito Gryffindor, ¿están felices? ¿Podemos ir a desayunar?

Inconformes con aquellas respuestas abandonaron la sala común de su casa y se dirigieron al comedor, pensando en una forma de pedir más información al rubio, no iba a ser fácil encontrar la pieza faltante del misterioso rompecabezas, pero estaban decididos a descubrir quién era el Gryffindor que había logrado enloquecer a Malfoy de esa manera, en definitiva esa persona era digna de respeto.