Complicado • Minisong

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Recostó de nuevo sobre la cama a Hyeongjun besándolo suave pero con un toque de sensualidad y pasión.

Separó lentamente sus blancas piernas llevando tres dedos a la boca de Hyeongjun para que los lubricara con su saliva. Hyeongjun recibió los dedos como si su vida dependiera de ello, los lamía desesperado mojandolos lo suficientemente bien para prepararlo.

Minhee llevó un dedo a su entrada simulando pequeñas embestidas con el, minutos después metió un segundo dedo haciendo movimientos de tijeras para dilatarlo mejor. Hyeongjun solo quería pasar la parte dolorosa para seguir con lo demás así que no se quejaba, además no dolía tanto como la primera vez.

Introdujo el tercer dedo provocando un pequeño quejido de dolor por parte de Hyeongjun pero tiempo después se acostumbró y de su boca salían de a poco gemidos por el placer que sentía, lo que le dijo a Minhee que que estaba listo.

Sacó sus dedos dejando un vacío en Song que no duró mucho, Minhee se introdujo rápidamente y sin previo aviso.

Sabía que debía quedarse sin hacer movimientos hasta que su menor se pudiera acostumbrar mejor a su tamaño hasta que comenzó a mover sus caderas inconscientemente debajo de el para sentir más contacto.

Los dulces gemidos de Hyeongjun salian perfectos de sus labios ligeramente separados, como música para los oídos de Kang.

Minhee tomó las piernas de Hyeongjun y las enredo en su cintura, dándole un mejor ángulo para hacer las embestidas cada vez más rápidas.

Hyeongjun estaba perdiendo la cordura, Minhee lo mataría si seguía así pero siendo honestos no le molestaría. Se aferraba a las sábanas, sus piernas temblaban y comenzó a tener pequeños espasmos en respuesta a los movimientos del alto.

Minhee estaba en el paraíso, los sonidos de Hyeongjun, su calor y la forma en que lo apretaba eran suficientes para tenerlo de esa manera, todo se sentía tan bien, tan especial y tan perfecto.

Sonidos obscenos inundaban la habitación, el sudor cubría sus cuerpos, mechones de cabello caían en sus caras luciendo bastante seductores para ellos, el sonido de sus pieles chocando y los movimientos provocados eran bastante calientes como para soportar por mucho tiempo.

Tomó la mano de Hyeongjun siguiendo con sus movimientos, se sentía cerca y aumentó la velocidad en forma brusca golpeando a cada segundo su próstata.

Subió a sus labios para besarlo nuevamente, sus lenguas jugaban y producian sonidos.

Sin soltar la mano de su novio lo masturbó un par de veces con la que tenía libre y no tardaron en llegar a su máximo punto.

Ambos se corrieron al mismo tiempo soltando un largo gemido, bastante agudo por parte de Hyeongjun, se había corrido por segunda vez, estaban agitados y muy agotados, estaban tumbados en la cama, una vez más habían sido unidos con la persona que más podían amar en su vida.

Volvieron a besarse, está vez de forma tierna mientras trataban aún de regular sus respiraciónes.

— Te amo Minhee— se recostó sobre su pecho.

— También te amo Junnie— dió un pequeño beso en su cabeza, la cual después comenzó a acariciar.

— Solo quiero dormir hasta mañana— dijo haciendo un puchero.

— Está bien, hagamos eso— sonrió dando un beso en su mejilla.

— Gracias— besó de igual manera— Por todo Minhee, descansa.

— También descansa— cerraron los ojos quedando dormidos de inmediato.

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Hyeongjun despertó primero, quiso despertar a Minhee pero este solo dió un gruñido pidiendo cinco minutos más.

Quizo ponerse algo cómodo pero al no encontrar nada en su armario que le hiciese sentir bien tomó una sudadera que llevaba Minhee en su mochila y fue a la cocina para preparar algo, tenía mucha hambre ya que al día anterior ni siquiera cenaron.

— Se te ve bien mi sudadera— mencionó Minhee entrando a la cocina. La sudadera le quedaba algo grande a Hyeongjun tapando por encima de la mitad de sus piernas, dejando ver las pequeñas marcas que Minhee dejó en el.

— Oh, lo siento, solo me sentí cómodo con esto— puchereó inconscientemente— ¿Quieres desayunar?—.

— Está bien, no me molesta, te vez lindo— dijo con su mirada fija en el pero sus piernas captaban más su atención— Y si, si quiero desayunar—.