Capítulo 46: No sé que título darle.

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La noche había sido larga y algo tensa por momentos, pero la pasamos genial hablando y contándonos cosas el uno del otro. La hora pasaba volando así que decidimos dormir de una vez, ya que si era por nosotros, nos desvelaríamos sin dudar.

La mañana fue tranquila, podía notar que había muchísima más confianza entre nosotros, más que nada él consigo mismo. Adoraba su sonrisa, me encantaba verlo feliz.

Dabi: ¿Hoy trabajarás?

— Mmh.. Supongo que sí.. Pero el turno es hasta la noche, por ahora tengo todo el día para molestarte.

Dabi: Vaya.. Qué mala noticia.

— Uhm, ahora te quejas, bien que me extrañas cuando no estoy.

Dabi: Uy, noticia de última hora.

El timbre sonó, ambos volteamos a la puerta y yo recién en aquél instante había recordado algo que debí contarle antes a mi pareja.

— Ahm.. Cariño..

Dabi: ¿Esperabas a alguien?

— Había olvidado decirte..

Me levanté y caminé hasta la puerta con una leve risa, abriéndola y dejando a la vista a nada más y nada menos que...

Hatsu: ¡_____!

Chiasa: Gracias por dejarme robar tu tiempo, es que hoy tengo un día atareado y mi esposo no estará..

— No te preocupes, con gusto la cuidaré. Avisame cuando vuelvas.

Chiasa: Claro, ¡muchísimas gracias!

Se retiró, mientras oía ruidos de la cocina, cerré la puerta y caminé rápido para ver qué sucedía. Nada fuera de lo normal, los dos molestándose.. Era adorable.

Hatsu: ¡Hahahh, te atrapé maleante!

Dabi: ¡Suéltame mocosa!

— Uhm.. ¿Qué hacen?

Hatsu: ¡Intentó esconderse de mí!

— ¿Cómo es posible? –llevé la mano hasta mi pecho con expresión de sorpresa.– ¿Lo castigamos?

Hatsu: ¡Le haré trenzas en su loco cabello!

Dabi: ¡_____ dijiste que me amabas! No me dejes a manos de ésta psicópata-

Hatsu: ¿Qué es eso de sicópata?

— Nada nada, vamos, tengo unas colitas lindas para el cabello de.. Dab.. Dai..

Hatsu: ¡Vamos Dabi!

— ¡¿Cómo sab--!?

Dabi: Se lo dije yo la última vez que la vi. Creí que sería la última.

Hatsu: ¿Por qué? A mí me caes bien.. Y no me importa que estés lastimado.

La pequeña se sentó en el suelo, subiendo un poco la pierna del pantalón hasta la rodilla, mostrando una especie de raspadura. Realmente esa niña me enternecía.

Dabi: ¿Qué haces..?

Hatsu: Mira, yo el otro día estaba jugando y me caí. ¿Ves? Estamos igual.

Dabi: Ya veo.. Deberías dejar de ser tan inquieta. Ten cuidado con eso.

— Mi vida.. Qué lindos.. –susurré sosteniendo mis mejillas.–

Hatsu: Ah, y esos ganchos te quedan geniales.

Dabi: Son grapas, no ganchos.

Hatsu: ¿Como el que es para unir hojas?

Dabi: Digamos que éstas son algo distintas.

〖 Me vuelves loco 〗 (Dabi x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora