Con amor, un Homofobico - [Hyunlix] [✓]

XI

Me paré justo en frente de la ventana de Hyunjin, golpeando suavemente con mí mano para llamar la atención. El pelinegro tardó unos segundos antes de abrir la ventana con ambas manos y sin ni siquiera dedicarme una mirada rápida, volvió a hacer lo que sea que estaba haciendo.

Le miré de arriba a abajo sin ningún disimulo, Hyunjin llevaba puesto unos pantalones ajustados a sus piernas y me sorprendió que incluso la camisa azul mangas cortas que llevaba, le quedará tan malditamente bien. ¿Porque de pronto tenía tantos pensamientos en mí cabeza y porque una ola de inseguridad me invadió?

—¿Vas a ir así? —La pregunta salió de mí boca como si estuviera pidiendo auxilio en medio de una isla perdida en el mapa.

Pero realmente me sentí horrible vestido cuando la persona que me acompañaba iba tan bien. ¿Cuando había trabajado tanto su cuerpo? ¿Porque le estaba mirando el cuerpo a un hombre?
Aparté la vista preocupado de lo que ocurría en mí cabeza y regañandome mentalmente por lo que sea que estaba transitando por ella sin ningún disimulo o culpa.

—Si. ¿Está mal? —Hyunjin se dió la vuelta, recién ahí viendo mí vestimenta, una sonrisa se formó en su rostro.—Pecas...

—Esta bien. Dilo. —Mis ojos se blanquearon, Hyunjin siempre se burlaba de mí forma de vestir y está era su oportunidad perfecta sabiendo que mi vestimenta iba desde un pantalón negro hasta una remera blanca ajustada al cuerpo con una camisa roja abierta, para nada a mí gusto, que mostraba la remera sin disimulo.

En mí mente, veía al pelinegro diciendo algo como: "¿Cuántos años tienes? ¿85?"; O incluso algo como: "¿En tu armario no existen los colores?"

—Te ves bien. —Acotó, sacando la sonrisa de su rostro y dándose la vuelta rápidamente. ¿Y eso porque...?

—Tu te ves bien. —Solté de golpe, mordiendo mí lengua por decir en voz alta lo que había pensado. Hyunjin aún dado vuelta, se congeló en su lugar.—Es decir, como siempre.—Palabras incorrectas, Felix.—Ya sabes, un cumplido de amigo. Nada más. ¿Sabes que? Voy a esperarte afuera.

Me acerqué a la ventana saliendo por esta y dejando que la luna iluminará el claro sonrojo que se instaló en mis mejillas. "¿Un cumplido de amigo?" ¿Que mierda había sido eso y porque me sentía tan nervioso de pronto?
Pasé las manos frustrado por mí rostro, últimamente no estaba pensando con claridad y en eso afectaba mucho mis pocas horas de sueño.

Me apoyé en la casa de Hyunjin con la cabeza pérdida en el mismo cielo oscuro que descansaba encima de mí cabeza mientras el pelinegro terminaba de arreglarse. Unos segundos después salió, con ese aire lleno de felicidad y estusiasmo.

—Ya estoy. Debía avisarle a mis padres.—Aseguró, saliendo por la ventana y mirándome con una media sonrisa.

Asentí, tomando el manubrio de mí bicicleta. Hyunjin hizo lo mismo con la mía y ambos nos subimos a ellas para dirigirnos a la estación de tren.
Luego de tomar el tren y llegar a la ciudad, la sonrisa de Hyunjin creo que era más brillante que la mismísima noche. Nos dirigimos a la dirección que nos había dado Mínho en un papel y una vez que estuvimos a dos cuadras y las luces se veían desde nuestro lugar, pude notar cierta incomodidad en HyunJin.

Me dí la vuelta para dedicarle una mirada confundida, parecía súper feliz y de pronto su alegría se había esfumado.

—Hay... Demasiadas personas. —Aseguró, soltando un fuerte aire por su boca y tragando duro luego de eso. Una mueca se formó en mí rostro.

—Si te sientes abrumado en algún momento, prometo volver contigo lo antes posible a casa. —Le transmití la confianza con un fuerte apretón en su hombro, Hyunjin asintió siguiendo andando hasta el inicio de la fiesta.