Be Brave-Levi Ackerman

54: "Doom"

—Véngate—

No quiero.

—Paradise te necesita—

¿Después de despreciarme como a una escoria?

—Yo te necesito—

Tu solo me ordenas.

—Morirán todos—

¿Me debería importar?

Sentí bajo mis pies el suelo arenoso y de pronto todo se veía extraño. Un gran árbol brillante estaba frente a mi y parecía que este me llamaba.

—Claro que te debe importar. Tu traicionarás a todos los que alguna vez creyeron en ti—

Yo nunca...

—"A toda la gente de Ymir, mi nombre es Eren Jaeger. A través del poder del titán fundador, les estoy hablando a todos ustedes. Todos los muros en Paradise fueron destruidos, todos los titanes dentro de ellos han comenzado su marcha. Mi objetivo es proteger a isla Paradise, donde he nacido y fui criado, sin embargo, el mundo desea la aniquilación de la gente de Paradise..."

—Cuando llegue el momento, (T/N) Knox, instrumento de los que vinieron antes. Tendrás que detener todo esto antes de que el mundo recuerde nuevamente nuestros pecados—

—¡Despierta!—

(...)

Sentía mi corazón acelerado a más no poder. La voz de Eren aún resonaba en todos los rincones de mi mente y no podía borrar de mi cabeza las imágenes del retumbar, miles de titanes colosales marchando y destruyendo todo a su paso. Cuerpos calcinados, y lo peor, yo manchándome las manos con la sangre de mis compañeros.

En un punto de mi vida pensé que únicamente me temían por las habilidades que poseía, muchos me tacharon de débil y yo también lo hice, pero quienes sabían que era yo en realidad no estaban equivocados. Solo que yo aún no lo había visto.
Mi verdadero ser aplastaría todo a su lado. Cuando tocara su mano todo se iría al carajo.

Literalmente.

—(T/N)—la voz de Levi me asustó y no quise mirarlo.

No contesté y volvió a insistir.

—¿Qué te está pasando mocosa?—suponía que mi sobresalto había perturbado su sueño. Estaba recostada a su lado.

—¿No lo escuchaste?—tenía la vaga esperanza de que no fuera la única.

—No sé de que carajo me estás hablando—

Me estaba preocupando mi estabilidad últimamente.

—Desde que heredé el titán martillo de guerra, escucho cosas raras—

—¿Qué cosas?—pasó una de sus manos vendadas por mi espalda y me abrazo ligeramente. No me quise mover para no irlo a lastimar.

—Voces, bastante claras para mi gusto. Hay muchas cosas que no se del titán que poseo, todos están conectados de alguna manera—

—No parabas de susurrar—

—Lamento despertarte—dije apenada dándome la vuelta y dejando ahí la conversación para que descansara.

—Ma chèrie...no me escondas más cosas—acusó—Ya no creo dormir más por hoy, así que háblame—su voz era ahogada al estar pegado a mi espalda.

—No te estoy escondiendo nada—solo mis preocupaciones, pero eran de cosas que ya sabía.

—Tu lenguaje corporal grita que algo te preocupa—apreté la mandíbula intentando reprimir mi angustia.