[Brais]
- Brais- Silas me viene insistiendo desde que salimos de la casa de los Waltton- Hermano- entramos al penthouse- lo siento si, no sabia que ella iba a ir, Cat me dijo que no iba- respira- Brais deci algo.
- Algo- le digo, él voltea los ojos- Silas, no te diré nada, ella te gusta ¿no?
- Si obvio.
- Listo- levantó los brazos.
- Pero Brais, lo de Venus- no lo dejó terminar.
- Lo de Venus es pasado y va para los tres¿okey?- los señalo con el dedo, ellos asientan con la cabeza- entonces no quiero saber nada de Venus.
Me dirijo a mi habitación, me sacó la zapatos y la camisa, me meto al baño, no logro sacármela de la cabeza, su sonrisa, sus ojos, su fragancia, no me puedo quitar su mirada cuando sus grandes zafiros se clavaron en mi , fue sorpresa, logré ver algo de alegría, pero después se lleno de odio, decepción, ella me odia, me mantuve callado toda la noche, porque si abría la boca, todo terminaría en una discusión, se lo terca y orgullosa que es, la conozco, cuando fingió esa sonrisa después que me vio, cuando le dijo a Silas que no lo metería en la misma bolsa, se refería a mi; pero no me contuve cuando dijo lo del whisky, ella detestaba el alcohol, saber que fue mi culpa que ella, probara algo que detesta, me molesta.
Ir a desayunar mañana a su mansión es algo que no me agrada, no quiero volver a donde todo paso, logré esconder cada recuerdo, volver sería abrir esa herida.
Me cepillo los dientes, y me colocó un pantalón para dormir, el viaje me dejó agotado, no alcanzó a apoyar mi cabeza que siento como el sueño acumulado me gana.
Entro a la habitación y ella esta en el suelo llorando, me agacho a donde esta y la abrazo.
- Tranquila- le digo mientras acaricio su cabello.
- No te vayas, por favor no me dejes, te amo demasiado, mas de lo que quisiera, no te vayas- me dice entre sollozos con su cabeza en mi cuello.
- No me voy a ir princesa, no te vas a librar de mí fácilmente- la apreté mas a mi- yo también te amo.
Todo se vuelve negro, y me encuentro en la sala de espera en el hospital, estoy solo, asta que una enfermera me guía asta una habitación, al entrar la luz esta baja y Venus esta en una camilla, me acerco, la toco y esta helada, su piel mas blanca, los labios que entes eran rojos, tienen otro color, coloco mi mano en su pecho y no siento su corazón.
- Venus- la agarro- Venus no, no,no, princesa no me dejes- las lagrimas se me escapan de los ojos- no te vayas, no dejes de luchar, princesa te amo, por favor no te vayas- la aprieto contra mi, ya no está su aroma , acaricio su cabellos- Venus por favor no me dejes- se me quiebra la voz.
Me levanto de un salto de la cama, estoy sudando, el corazón me late a mil, fue un sueño, se sintió tan real, miro mi teléfono, marca las cinco de la mañana, me voy al baño, lavo mi cara.
Me estoy terminando de arreglar, un pantalón negro, remera blanca y unas zapatillas negras.
- ¡Ya llegó Jorge!- me grita Silas desde afuera de la habitación- ¡Vamos!- salgo de la habitación.
- Porque tanta desesperación, ya te aceptaron- le dice Chad.
- No nos invitó a desayunar cualquiera, es Venus- dice obvio y Chad me mira.
- Ella es como la jefa de los hermanos, si dice algo, se hace, y no cualquiera recibe una invitación de ella- le explico.
- Además Venus hace dos años que no vive en su mansión- okey yo tampoco entiendo eso- chicos, ella recién llega y nos invitó a su casa- sigo sin entender.

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Verdades©
Roman pour Adolescents"Si dos personas están destinadas a estar juntas, se encontraran al final del camino, aun tras mil tropiezos" Ellos volvieron, después de dos años, se tuvieron que volver a ver la cara, por un suceso que los involucra, otra vez el destino los volvi...