RE: A través de mí (Haise/Kaneki y tú)

28.- Las consecuencias de una tragedia

Kaneki despertó unas dos horas después de (T/N) haberse marchado, le extrañó no verla a su lado, así que decidió vestirse e ir a buscarla; volvió al lugar donde se resguardaba toda la escuadra, pero no la encontró, caminó por los alrededores y nada, incluso se alejó un poco buscándola pero no había señales de ella, y al preguntarle a sus subordinados se enteró que Ryu también había desaparecido desde temprano, era muy raro, comenzó a imaginarse cosas y solo deseó no tener razón y por ello decidió esperar, las horas pasaron y no había señales de ella, cada vez estaba más preocupado, tenía que encontrarla y rápido. Buscó a Sasha, qué desde ayer había estado recostada y con pocos ánimos de hablar, ella tendría que darle la respuesta que buscaba.

—¿Qué quieres Rey?— preguntó Sasha con la mirada baja.

—Información, ayer dijiste que Mutsuki quería ver a (T/N) en el lugar de la amenaza ¿Sabes dónde es?

—¿Para qué quieres saber? No es importante.

—Lo es, tengo que ir lo más rápido posible ¡Dímelo!— exigió.

—¿Por qué la insistencia?— Lo piensa y levanta la mirada —la líder se fue ¿Verdad? Fue a salvar a Ikki y por eso estás tan nervioso.

—Tienes que decirme su ubicación pronto.

—No lo haré, primero porque yo tampoco sé dónde es y segundo porque aunque lo supiera, estoy segura que ella no querría que te lo dijera, pues por algo se fue a escondidas, no quiere verte correr riesgos por esto, sería peor.

Kaneki frunció el ceño y golpeó la pared más cercana, ¿Qué debía hacer? No podía sólo ir a buscarla sin saber el rumbo, debía pensar en los lugares más probables para aumentar sus posibilidades, además tampoco era 100% seguro que ella haya salido en busca de Mutsuki, después de todo ella había asegurado que no lo haría; pero la conocía lo suficiente para darse cuenta que todo aquello fue una faceta, que seguramente quería que todo rastro de preocupación se desvaneciera en él, para hacerlo bajar la guardia y así ella pudiera salir sin que se diera cuenta, ella no podía sólo darle la espalda a un subordinado, no podía hacerlo, aunque fuese lo correcto dado la situación. Pero ahora ¿Qué podía hacer él?

—Rey, confía en ella, es fuerte.

Kaneki no respondió; no era cuestión de solo confiar o no, se trataba de ser realista, (T/N) fue directo a una trampa hecha para atraparla o quizás matarla, eso no es algo que siempre se pueda combatir solo con fuerza. Tal vez Sasha había visto salir a su líder de situaciones de alto riesgo, pero ninguna como esa.

—Rey— llamó un ghoul entrando al lugar —volvió el chico que había sido capturado por el Oggai.

—¿¡Ikki!?— preguntó Sasha velozmente.

—¿Vino solo? ¿(T/N) no está con él?—cuestionó Kaneki.

—No Rey, está solo.

Tanto Kaneki como Sasha corrieron al lugar donde se encontraba Ikki; estaba visiblemente triste, perdido en su mente, con la mirada apagada pero fija en una rosa de cristal que protegía entre sus manos

—¡Ikki!— Exclamó Sasha yendo hacia el chico —¿Estás bien?

—¿Dónde está (T/N)?— fue lo primero que Kaneki atinó a preguntar.

El semblante de Ikki cambió para peor, y es que estuvo un largo rato escondido, esperando a que su líder saliera de aquella batalla y lo alcanzara para volver, pero eso nunca pasó. Estuvo alejado, pero aun así podía escuchar el bullicio de la batalla, pasó un tiempo para que eso se detuviera, señal de que ya todo había terminado, pasaron más de treinta minutos y ella no volvió.