B R O K E N

Capítulo 43 | La vida que siempre busque |

Wanda sintió el ácido líquido subir por su garganta. Abrió rápidamente los ojos, lanzó a Bucky aún lado y corrió al baño, colocó una mano sobre su boca para tratar de contenerlo pero fue imposible y las arcadas comenzaron. Se sostuvo el cabello y devolvió toda su cena. Con asco bajó la palanca del inodoro y se incorporó, miro al lavabo, tomó su cepillo de dientes y justo cuando estaba por tomar la pasta de dientes, al tocarla está se transformó, convirtiéndose brevemente en un pedazo de carbón. Parpadeo rápidamente para enfocar nuevamente la vista y observó cómo volvía a ser pasta. La tomó con cuidado y se lavó los dientes confundida.

Miro al reloj de la mesita de noche, 2AM, un somnoliento Bucky la esperaba sentado en la cama-¿Te encuentras bien?

-Si, creo que fue demasiada pizza- Bucky asintió con la cabeza, nunca la había visto comer casi una pizza entera sola. La miro con ternura al verla sobarse la barriga, así que estiró sus brazos hacia ella y Wanda sonrió

-Ven preciosa.

La castaña subió a la cama y se acurrucó en los brazos de su esposo, minutos después sintió el pequeño bulto de pelos que dormía en su cama algunas noches. Alzó levemente la cabeza y observó como Magnus se acurrucaba en sus pies. Sonrió y volvió a acostarse en el pecho de James, quedándose profundamente dormida.

Por la mañana, el olor a comida inundó su nariz. La cama estaba vacía, bajo las escaleras y el olor se hizo más fuerte, una animada Wanda tarareaba una canción mientras preparaba panqueques, Magnus estaba sentado cerca comiendo uno que seguramente le había robado- Buenos días preciosa- le susurró acercándose a ella, abrazándola por la cintura y depositando un beso en su hombro. Ella se giró con una linda sonrisa y besó cortamente sus labios.

-Buenos días Sargento.

-¿Cómo te sientes?

-Mucho mejor- dijo entregándole un plato con algunos panqueques y un tazón de frutas. Definitivamente se sentía mejor y no había cambiado nada de realidad, supuso que había sido porque estaba medio dormida cuando sucedió, así que no le dió importancia. Mientras que Bucky la observó preparar sus panqueques, capas de mermelada entre ellos, con crema batida encima y chocolate picado. Y para rematar, ciruelas.

-Eh.. Wan.. ¿No crees que es demasiada azúcar?- le dijo, ella se detuvo al notar la gran cantidad de chocolate que los cubría, y asintió con la cabeza, dejándolos de lado. Bucky esperaba que quitara algo de crema batida o mermelada pero no, con esa gran cantidad de azúcar los comió. Wanda despertó con un inusual antojo de algo dulce y supuso que era por lo de anoche, así que el azúcar no molesto en absoluto su paladar. Era empalagoso y dulce y lo disfruté completamente. Sintió la mirada acusadora de James y trató de desviar el tema-¿Qué harás hoy?

-Entrenaré a los nuevos reclutas. Hoy te veré hasta tarde...- dijo tomando la mano de Wanda y acariciándola con su pulgar- ¿Y tú qué harás?

Ella sonrió, pocas veces llegaba tarde o la pasaba todo el día fuera de casa y ese era su gesto para disculparse. Apretó su mano, en señal de respuesta.

-Iré con Sarah, está aburrida del reposo- dijo mientras preparaba otra orden de panqueques cargada de mermelada y jarabe, estaba muy rara, comía demasiado últimamente. Negó con la cabeza y la dejó ser feliz, al fin y al cabo ¿Quién no ama la comida?

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-¿Y? ¿Cómo va el pequeño Shawn?- le preguntó a Sarah mientras le entregaba una taza de té. Estaban en la terraza de la casa de Robert, sentadas en el pequeño comedor.

-Demasiado inquieto, dice la ginecóloga que quiere salir antes...- habló acariciando su gran barriga de ocho meses- Y la verdad yo también quiero que salga, ya estoy aburrida de estar aquí encerrada.