TUS OJOS MÁGICOS

06.01 | 𝑪𝒐𝒎𝒑𝒂𝒏̃𝒆𝒓𝒂 𝒅𝒆 𝒂𝒍𝒄𝒐𝒃𝒂

  - Hey, Hayley- La llamó su hermano mientras iban camino a la escuela.

-¿Si?.

-¿Puedes disculparte con Gilbert? Sabes, nos quiero que cada vez que traigas los bocadillos sea incómodo.

-¿Perdón? El tendría que disculparse conmigo- Contestó indignada.

-Coincido con Hayley- Comentó la pequeña.

-Vamos Hayley, no seas complicada.

-No soy complicada, solamente se cuando me equivoco, y esta vez no me equivoqué- Hablo por última vez y entró a la escuela.

-Sabes que nunca le pedirá perdon- Le dijo Coraline a su hermano.

-Había que intentarlo.

-¡Hayley!- Gritó Diana acercándose a ella -¿Sabes salgo de Anne?.

-No, ¿Por qué? ¿Le pasó algo?- Preguntó esta preocupada.

-Ella siempre llega temprano, es que no esté aquí.

-Capaz se retrasó, no esperes lo peor.

-Chicas- Se acercó Ruby -Vengan que necesitamos su ayuda con la madera.

Las chicas rápidamente fueron, el invierno se acercaba, necesitaban mantenerse calientes. Los chicos cortaban la madera. Una vez la madera cortada, los más pequeños de la escuela la recogían y se la llevaban a alguien más grande, quien después se con llevaba a Moody. Este colocaba la madera en la estufa que estaba en el centro del aula.

-Es tan lindo- Dijo Ruby mientras observaba a Gilbert que cortaba la madera.

-Pero no fuerte- Comentó la protagonista.

-¿Que quieres decir?- Le pregunto Tillie.

-Mira, no puede cortar la madera en 2.

-¿Y tu sí?- Le pregunto la chica morocha que tenía algunos rulos.

-Supongo que si.

-Te reto a que vayas y cortes tú la madera- Le propuso la rubia alta.

-Esta bien- Acto seguido, se acercó al chico.

-¿Hay algo en que pueda ayudarla, señorita?- Le pregunto este dejando la hacha a un lado.

-Sí, ¿Me prestas la hacha?.

-¿Perdón?.

-Que si me prestas la hacha, quiero intentarlo.

-Este un trabajo muy duro para una señorita como usted.

-Si te estoy pidiendo la hacha es porque creo que puedo hacerlo.- Dijo intentando convencerlo.

-Lo siento, pero no puedo- dijo por último y siguió con su trabajo.

Se volvió a donde estaban las chicas quiénes se estaban riendo.

-Te dije que no podrías.

-No lo sabes. Lo podrías saber si tan solo ese patán me hubiese dejado agarrar el hacha.

-Es tan caballeroso- Comentó Ruby volviendo su mirada al joven.

-¿Caballeroso?- Preguntó extrañada Coraline.

-Sí, no dejo a Hayley agarrar el hacha por si se lastimaba.

-Oh por dios, si que te gusta- Agregó Hayley.

Ese día de escuela pasó muy lento, para la protagonista. Ya que su "amiga" no había venido, supuso que era porque estaba enferma, y no le prestó mucha atención.