Hayley pov's
Ka'kwet se había ido a una escuela. Con Anne teníamos planeado ir a visitarla medianamente seguido. Y Mary... Mary falleció. A todos nos lastimó mucho, más a Bash. Se había casado con ella hace tan solo 2 años. Pero insistía en que tenía que mantenerse fuerte por Delphine, él no quería "traumarla".
(...)
Anne golpeó la puerta de la escuela. Una monja abrió la ventanilla, no parecía muy contenta.
-¡Hola!- La saludamos Anne y yo al unísono.
Ni bien nos escuchó, cerró la ventanilla en nuestras caras. Nos sorprendimos al ver que nos abrió la puerta.
-Buenos días. ¿Puedo ayudarlas?
-Buenos días, hermana. Este es el internado para indios, ¿no es así?- Pregunté.
Asintió.
-¡Qué maravilla! Por casualidad, estábamos en la zona y vinimos a ver a nuestra amiga, Ka'kwet.
-No tengo idea de quién es. Los niños reciben nombres cristianos cuando llegan.
-Llegó hace poco de la Isla Príncipe- Intenté explicar.
-Es muy inteligente y sociable- La describió Anne -Tiene una gran sonrisa y hoyuelos.
-Igualmente, no hay visitas a esta hora. Los niños están en práctica de coro.
Podíamos escuchar como cantaban.
-Qué maravilla. Cantar fortifica el espíritu. ¿Le dirá que vinimos a verla? Soy Anne. Anne con una E, y ella es Hayley.
Nos dimos media vuelta y nos fuimos.
-La próxima la veremos- Le dije.
-Sí, así es- Me afirmó.
Anne pov's
-El señor es mi pastor, nada me faltará. En lugares de verdes pastos me hacen descansar. Junto a aguas de reposo me conduce. Él reconforta mi alma. Me guía por senderos de justicia por amor de su nombre. Aunque yo pasé por el valle de la sombra de la muerte, no temeré a mal alguno porque Tú estás conmigo. Tu cara y tu cayado me infunden aliento.
Me acerqué a la tumba de Mary y dejé un ramo de flores, de sus favoritas. Ya no estaba escuchando al padre. Solamente estaba recordando mis momentos con Mary, no podía recordar ni uno malo. No tenía fuerzas para levantarme, quería quedarme allí, con ella.
De pronto sentí como unos brazos me rodeaban, creí que era Hayley. Cuando pasé mis manos por su cuello para abrazarla, me di cuenta que no era Hayley, era Alex. Me ayudó a pararme y me llevó a donde estaban todos nuevamente. Seguíamos de la mano. Alex se hacía pasar por un Billy Andrews, pero en realidad era todo lo contrario. Era respetuoso, amable, servicial y cariñoso, y bueno... lindo.
Hayley pov's
-Como prometí, hoy practicaremos para el baile del condado. El señor y la señora Lynde aceptaron ayudarnos en esta tarea.
Ni bien terminó de hablar entraron unas cuatro personas.
-Como "El gallardo sargento de blanco" se baila en grupo de seis, pensé que sería mejor hacerlo así. Recuerdas a mi hijo.
El hijo de Rachel se sacó el sombrero en frente de ella y se lo colocó en el pecho.
-Es un placer verla de nuevo.
-Gracias... a todos por venir a ayudar- Se dio media vuelta para vernos -¿Comenzamos?
Lynde y su esposo se pusieron en el medio y nos enseñaron a bailar.
-Ese es el esquema- Terminó Rachel agotada.
-¿Por qué no lo intentan ustedes? Fórmense en grupos de seis. Niño, niña. Niño, niña- Explicó Stacy.
En mi ronda, estaban: Diana, Jane, Gilbert, Moody, Charlie y yo.
Moody y Jane estaban enfrentados, luego Gilbert y yo y por último Charlie y Diana.
Cuando Rachel nos dio la señal, todos comenzamos a bailar. Lo hacíamos pésimo, uno iba para un lado, el otro para el contrario. Definitivamente algo no estaba bien.
-Basta, ¡deténgase!- Gritó la señora Lynde -Eso fue... un comienzo. Tomemos un descanso. Recuperaré el aliento y ustedes también.
Todas vimos como Ruby se fue preocupada al guardarropas. Claramente, las chicas y yo la seguimos.
-¿Qué pasa, Ruby?- Le preguntó Diana.
-¿Te sientes mal?- La interrogué.
-Está temblando- Comentó Cori.
-Cuéntanos.
Tartamudeo al principio, pero luego nos dijo:
-¿Y si estoy embarazada?
Todas nos quedamos en silencio.
-Según mi madre, si me acerco a un chico, podría embarazarme, y si un chico me toca, sin dudas, quedaré embarazada. Debo estarlo. Todas podríamos estarlo.
Las chicas se empezaron a asustar diciendo "¿como puede ser?" "Esto no me puede estar pasando" yo me quede en silencio, sabía perfectamente que lo que estaba diciendo Ruby no tenía ni un poco de lógica.
Josie se dio vuelta y le gritó a Stacy:
-¿Cómo pudo dejar que esto pasara?
-Niñas, por favor, cálmense- Las intentó tranquilizar -Les aseguro que no quedarán embarazadas por bailar.
-¡Nos tocaron mucho!- Justificó Ruby.
-No funciona así. No es... externo.
Todas miraron a la profesora confundidas.
-Hay muchos pasos para concebir. Primero, el cortejo. Luego el matrimonio, claro. Después ustedes y sus esposos pueden... con su consentimiento recorrer ese camino tan preciado hacia la maternidad. Juntos- Intentó explicar. Pobre, parecía muy nerviosa -¿Queda claro?
Cuando todas se callaron, decidí responder yo.
-Sí, señorita Stacy. Quedó claro.
-Bien.
-Tengo miedo a bailar- Dijo Ruby.
-No lo hagas. Puedes sentarte si quieres.
Stacy se fue y nosotras la seguimos.
Lo volvimos a intentar, esta vez salio mejor.
Narrador omnisciente
En el baile, Gilbert y Hayley no se despegaban la mirada del uno al otro. Parecían conectados, y lo estaban. En una parte, el joven cambio el baile solo para agarrar de la mano a la protagonista. Ella se dio cuenta, pero no hizo nada para evitarlo.
Encajaban justamente el uno con el otro. No podían dejar de mirarse. Ella reía mientras él le hacía caras "graciosas".
Cuando terminó el baile, todos se fueron. Menos Hayley y Gilbert. Se quedaron ahí parados, un frente al otro. Cuando la chica despertó, y cortó su conexión tan notable, lo esquivó y salió. Pero antes, Gilbert la agarró de la muñeca, frenandola.
-¿Sí?
-Yo... quería preguntarte si te gustaría venir a la feria de condado conmigo.
Una sonrisa se formó en el rostro de la protagonista y respondió con un dulce:
-Sí, quiero.
El muchacho la soltó, se despidió de ella con la mano y ambos salieron por caminos diferentes.
ESTÁS LEYENDO
TUS OJOS MÁGICOS
Фанфикшн-𝘊𝘳𝘦𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘰𝘺 𝘦𝘯𝘢𝘮𝘰𝘳𝘢𝘥𝘢 𝘥𝘦 𝘦𝘭𝘭𝘢, 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘰- 𝘥𝘪𝘫𝘰 𝘦𝘭 𝘫𝘰𝘷𝘦𝘯 𝘤𝘰𝘯 𝘶𝘯 𝘳𝘰𝘴𝘵𝘳𝘰 𝘥𝘦 𝘱𝘳𝘦𝘰𝘤𝘶𝘱𝘢𝘤𝘪𝘰́𝘯.
