Anne pov's
-No dejo de pensar en la posibilidad de una fiebre del oro. Siendo tan... febril.
-Es preocupante. Necesitamos más información- Le respondí a
Hayley.
-Si tan solo pudiéramos leer esos artículos- Dijo en un suspiro.
Con la última oración que dijo Hayley, mi cerebro se iluminó.
-Hayley- La llamé, a lo que ella me miró -¿Y si nos escapamos para ir...- me interrumpió, sabía lo que iba a decir.
-¡Para ir al periódico!- Me completó la oración.
Ambas reímos.
-¡Exacto! ¡Así vamos a investigar!
-¡Chicas!- Nos gritó el hermano de Hayley a nuestras espaldas y corriendo hacia nosotras.
-¿Qué pasa?
-Ire con Thomas a visitar a los chicos. ¿Puedo confiar en que no harán estupideces?
Con Hayley nos miramos y sonreímos, fue como si estuviésemos conectadas.
-Claro, confía en nosotras- Afirmó Hayley volviéndo a mirar a Alex.
-Genial. A las siete y media nos encontramos aquí.
-Perfecto, adiós.
Hayley me agarró del brazo y nos dimos media vuelta para comenzar nuestra investigación.
--¿Quién es Thomas? -- le pregunté a Ley en un susurro.
--Un amigo de él.
(...)
Entramos al periódico. Había un señor, durmiendo. Lo despertamos y nos puso atención.
-Buenas tardes, señor. ¿Podría decirnos dónde están sus archivos?- Habló Hayley.
-¿Archivos?- Preguntó muy confundido, creo que aún seguía dormido.
-Donde guarda los periódicos viejos- Aclaré.
-Conozco bien el concepto de archivo. Lo que me confunde es su ignorancia sobre las relaciones espaciales. Usen sus jóvenes ojos. ¿Les parece que tenemos espacio para mantener un archivo de periódicos?
-No hay archivo- Susurré para mi misma.
-Aquí tenemos a una verdadera Sherlock Holmes.
Se ve que no hablé lo suficientemente bajo.
-Excelente poder de deducción, jovencita.
-En ese caso, ¿recuerda algo sobre la historia del oro en Cabo Wolfe?- Le preguntó Hayley, para no irnos con las manos vacías.
-La edad y la memoria no son compatibles. Pero quizá tengan suerte con Malcolm Frost. El cubrió la historia.
-¡Un auténtico reportero!- Dije haciendo notar mi emoción.
-Un naturalista- Corrigió -Escribió los artículos porque estaba preocupado. Pero mejor hablen con él. Frecuenta el bar que está en la otra manzana- Nos explicó.
-¡Muchas gracias!- Le agradecimos Hayley y yo a la vez.
Estábamos por irnos, pero el señor nos paró.
-¡Chicas! Sean discretas- Nos pidió -Él nunca se recuperó.
Con Hayley asentimos y salimos de el periódico.
-¿Nunca se recuperó de qué? ¿Del oro? - Le pregunté a Hayley mientras caminábamos rápidamente.
-La tía Jo nos dijo que fue un fiasco.
ESTÁS LEYENDO
TUS OJOS MÁGICOS
Fanfic-𝘊𝘳𝘦𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘰𝘺 𝘦𝘯𝘢𝘮𝘰𝘳𝘢𝘥𝘢 𝘥𝘦 𝘦𝘭𝘭𝘢, 𝘢𝘮𝘪𝘨𝘰- 𝘥𝘪𝘫𝘰 𝘦𝘭 𝘫𝘰𝘷𝘦𝘯 𝘤𝘰𝘯 𝘶𝘯 𝘳𝘰𝘴𝘵𝘳𝘰 𝘥𝘦 𝘱𝘳𝘦𝘰𝘤𝘶𝘱𝘢𝘤𝘪𝘰́𝘯.
