12.02 | 𝑼𝒏 𝒑𝒐𝒄𝒐 𝒎𝒂𝒍𝒐

2.2K 191 11
                                        


Hayley's pov

-Mamá, por favor.

-No, Hayley. No irás sola.

-No iré sola. También van Anne y Cole.

-No lo sé.

-¿Qué tengo que hacer para que me dejes ir?- Pregunté arriesgándose a hacer cualquier cosa.

-Tu hermano debe acompañarte.

-¿¡Qué!? No, mamá. Es una fiesta, iré con mis amigos. No con mi hermano mayor.

-Esta bien. No hay fiesta- Avisó volviendo a pelar las papas.

Bufé y lo reconsidere. Solo tendré que ir con Alex en el viaje, no creo que quiera venir a la fiesta. ¿Qué podría pasar?

-Esta bien. Le iré a avisar a Alex- Anuncié dirigiéndome a la escalera.

Sentí como mi mamá victoriosamente sonreía, odiaba perder una discusión contra ella.

-Alex- Lo llamé entrando a su habitación.

Para mí sorpresa, Gilbert seguía allí. ¿Se iba a quedar a dormir?

-¿Qué quieres?

-¿Recuerdas que te nombré la fiesta de la tía de Diana?

-Sí. ¿Qué pasa con eso?

-Mamá me dejará ir solamente si tu me acompañas.

-Ni lo pienses. A parte, con Gilbert mañana íbamos a ir a Cherlottetown.

Claro, seguro se quedaba a dormir para mañana irse a primera hora.

-Mucho mejor. Me acompañas en el tren y luego nos dejas en la casa de Josephine.

-Ni lo sueñes. Vete de aquí.

-Por favor, Alex. Los dos obtendríamos lo que queremos.

-No y punto. Fuera.

Listo, me quedé sin fiesta. Mi primera fiesta.

Gilbert pov's

Creo que Alex era un poco malo con Hayley. No le costaba nada acompañarla hasta la casa de la tía de Diana.

-Creo que debes aceptar. Parecía ilusionada por ir- Le aconsejé.

-No, Gil. Debe de aprender que las cosas no son siempre como desea.

-Sabes, si es por mi, no me molesta acompañarla.

-No, no es por ti. Solo que no quiero ir a esa fiesta junto a gente extraña.

-No debes de ir a la fiesta. La dejamos en la casa y al siguiente día la recogemos.

-No lo sé.

-Solo... piénsalo.

-Esta bien. Ahora, ¿podemos dejar de pensar en mi hermana?

-¿En qué quieres pensar? ¿En Anne?

-Estúpido, no me gusta. Nunca podría gustarme la mejor amiga de mi hermana. Sería asqueroso.

-Te encanta- Corregí riendo.

-No me encanta. Mejor volvamos a hablar de Hayley. ¿Cómo puede ser que te guste mi hermana?

-No me gusta.

-Hermano, acepto su relación. Aunque es algo raro que mi mejor amigo y mi hermana estén juntos, lo acepto.

-Tarado- Susurré.

-Este tarado es tu mejor amigo- Respondió orgulloso.

Solamente rodé los ojos y reí. Ambos nos quedamos en silencio por segundos, hasta que volvió a hablar.

-Sabes, capaz debo acceder a lo que me dijo Hayley.

-No es una mala idea- Agregué.

-No, no lo es.

Anne's pov

-Bienvenidos mis queridos. Esta será la escena del crimen- Explicó mostrando el salón.

Era bellísimo. Tenía un gran espacio para cientos de invitados y atractivas flores colgadas por cualquier lugar a donde te dirigías.

-Había soñado con fiestas, y aunque creo que tengo mucha imaginación, nunca había evocado nada como esto.

-Estoy muy emocionada por oír tocar a Cécile Chaminade- Gritó Diana corriendo hasta donde estaba el piano.

-La señorita Barry no escatima en gastos para que la gente supere el invierno- Nos contó uno de los tantos mayordomos

-Que maravilla- Susurró Hayley.

-No puedo llevarme el crédito por la idea de Gertrude. Esta era su noche- Dijo Josephine mientras observaba la sala -El año pasado no fui capaz de hacer esta fiesta. Sin ella. Bueno, el tiempo sigue en marcha, ¿no es cierto?.

Todos nos dirigimos al centro del salón.

-¿Cómo te dejaste enredar en este fiasco- Le preguntó la tía Josephine a Cole.

-Cole fue nuestro héroe- Contestó Ley.

-Sin él no nos habrían dejado venir- Continuó Diana.

De pronto se sintió como si alguien tosiera. Era Alex. Había olvidado que él y Gilbert nos habían acompañado.

-También ayudaron Alex y Gilbert- Agregó Hayley en un suspiro.

-¿Joshepine?- La llamó Alex.

-¿Sí, querido?

-¿Hay posibilidades de poder traer a unos amigos de Cherlottetown a la fiesta?

-Claro, mientras más gente mejor.

Noté como Hayley miraba a Alex enojada y él le devolvía una mirada victoriosa. Quería reírme, pero era irrespetuoso. Marilla me enseñó a no meterme en cosas ajenas, estoy tratando de hacerle caso.

-Vamos a darles de cenar y después a la cama- Nos ordenó Josephine, y así lo hicimos.

TUS OJOS MÁGICOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora